Capitulo 2: Vida caótica.

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"¡¿Tienes idea en los problemas en que nos metiste?!" - gritaba furioso un hombre - "¡Murieron 3 personas! ¡Destruiste un edificio médico, desovedesiste la regla más importante!"

La pequeña castaña estaba destrozada, aún con ese rojo apagado en sus dedos.

Estaba temblando, aún no podía creerlo.

Sus dos mayores pesadillas se habían hecho realidad.

El perro observada nervioso la situación, estaba escondido bajo la pequeña mesita de la sala.

Pocas veces había visto a su dueño tan furioso, y esas pocas veces eran las suficientes para alterarlo.

"¡Yo no puedo..." - tapo su cara aún molesto - "Tienes suerte de que nadie puedo haberte visto claramente... ve a la habitación"

"¡Papá, y-yo de verdad L-Los--"

"No hables mas" - interrumpió - "Por favor... solo no hables más..."

Se sentó destrozado.

Al igual que el pequeño corazón de su hija.

Pequeños pasos se pudieron oír hacia la habitación.

Una puerta cerrándose luego...

No tardaron en aparecer las lágrimas, lo había arruinado, justo el día en que pensaba dejarlo... lo había arruinado a más no poder.

Lentamente ella se deslizó por la pared, hasta llegar al suelo y poder abrazar sus piernas en paz.

Dolia, esa sensación... la odiaba.

Esa profunda presión en su corazón...

"Que haremos?..." - pregunto al aire - "Dios, Solo es tiempo a que el pueblo nos cuelgue" - apretó su cabeza asustado - "No tenemos transporte, no podríamos avanzar ni 10h de aquí sin que nos quedemos sin provisiones"

Lentamente pequeñas gotas de sudor se hicieron presente en el hombre.

"Tal vez..." - paro unos segundos - "Ella estaba cubierta, creo que nadie pudo ver su rostro, nadie nos siguió, y creo que también nadie vio que me la lleve" - lentamente comenzó a estirarse mientras cubría su cara - "Dios, no tenemos un plan de apoyo si nos descubren, no tenemos a donde ir, ni transporte ni nada... que haré..."

Tener su propia vida y la de su hija en sus manos era demasiada presión, apenas pudo llevar la de ser padre y ahora esto, es demaciado.

Lentamente comenzó a hiperventilarse, sujetaba fuertemente su corazón mientras que su vista se nublaba.

"Debo... Debo de asegurarme" - trago saliva - "No puedo quedarme aquí si ellos saben que fuimos nosotros... necesito asegurarme"

Proyecto: Crianza.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora