Sword Art Online: Lonely Rival

Misión 0

Han pasado cuatro meses desde que completamos la misión "Reina de la Noche", de haber encontrado y salvado a Yuna por petición de Eiji y revivir a la amiga que perdió Kirito durante su participación en el juego mortal "Sword Art Online", bajo el nombre de Sachi. Días después de aquellos sucesos, recibí un mensaje anónimo preguntándome: ¿Cómo he estado?, ¿Qué tal me ha ido?; así como también los deseos de aquella persona ansioso de verme algún día.

A pesar de que el mensaje fuera enviado por una persona anónima, sabía perfectamente de quien era de tan solo leerla, era de mi amigo Itsuki que llevaba ya casi medio año sin saber nada de él, luego de haber puesto mi vida y la de mis amigos en riesgo en aquella partida mortal parecido a GGO. A pesar de eso, nunca lo odié y sentí rencor por ello por ser un amigo al igual que el resto, necesitaba ser rescatado por su pasado y del mundo en el que está atrapado o eso es lo que siempre pienso.

Un día, yo y el resto de mis amigos que me han acompañado desde que inicie como todo un novato en GGO habíamos acordado en reunirnos de nuevo para ir de caza, ya que, Kirito ha estado ocupado con su trabajo temporal y no ha podido conectarse como antes lo hacía de costumbre, además de que Asuna siempre lo acompañaba para que no se mal gastara en su trabajo. Ya habían llegado todos al vestíbulo con excepción de Kirito, Asuna, Alice y Eugeo, pero no sabíamos de estos dos últimos desde haces dos semanas y no estábamos seguros si se unirían a la caza. Ya había pasado media hora del tiempo acordado, entonces vuelve a conectarse Leafa al ver si Kirito llego a casa, empezando a hablar con un tono bastante decepcionada tras suspirar:

- Leafa: ¡Oigan chicos escuchen! Acabo de llamar a mi hermano y me acaba de comentar que él y Asuna van de regreso a sus casas ya que Kirito salió tarde de su nuevo trabajo y en un rato podrán conectarse; que por lo mientras nosotros nos adelantemos y nos alcanzarán en el lugar acordado.

- Zeliska: *sonando con un tono de atrevimiento mientras reí un poco* Vaya, vaya esos dos tortolos no se separan en ningún momento ni siquiera en la vida real. Me dan algo de enviada y supongo que también ha dos chicas en específico *mira con cara de burla a Lisbeth y Silica*

- Lisbeth y Silica: *ambas hablando al mismo tiempo algo molestas, casi lazándose sobre ellas* ¡¡No sabemos de lo que estás hablando!!

Todos empezábamos a reírnos casi llegando a las carcajadas, incluyéndome a mí. Después de recibir el mensaje de Kirito, todo el escuadrón partimos del teletransportador al SBC Abel en la zona nevada donde pasamos todos un buen rato viendo lo de siempre: Rei siempre atendiéndome apenas si tenía algún rasguño, Kureha siempre lanzándose sobre líneas enemigas siendo algo imprudente como de costumbre y los demás siempre apoyándose entre sí, como si siempre estuviera Kirito a pesar de estar ausente en aquel momento.

Días después, Kirito y Asuna nos citó a mí y a Kureha por una nueva actualización en la que añadieron una nueva mazmorra debajo de SBC Glocken lo cual fue raro ver que ningún jugador o escuadrón haya entrado o completado a pesar de las horas que hayan pasado de la actualización. Rei llego alterada sin poder comunicarse con nosotros y salimos de la habitación de Kirito para saber si esta falta del habla también afectaba a las demás unidades Arfasys, idea que llego a ser correcto, pero no afectaba a Lievre. Al concordar que la aparición de la mazmorra tenía algo que ver con el problema de comunicación de los Arfasys, Kirito, Asuna, Lievre, Kureha, Rei, Zeliska y yo viajamos a las profundidades de la mazmorra para buscar una solución a este gran problema.

Con el paso de los pisos que componían la mazmorra y la unión de un jugador que se hace llamar "Hydra", llegamos al último piso donde se encontraba el jefe final que tenía un aspecto muy similar al jefe que enfrentamos en el juego mortal que nos llevó Itsuki hace meses. Fue un combate bastante difícil de llevar a cabo, pero no fue imposible y logramos la victoria, pero en ese momento Lievre exaltada nos dice: