Anhelos

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Levante la vista para mirar tras la ventana de mi habitación, todo se encontraba cubierto de nieve, a causa de la fuerte nevada de anoche, suspiro un tanto melancólica, Edward se encontraba inerte en la portátil terminando un trabajo de la editorial, estos habían sido los días mas fríos de todo el invierno en seattle y a causa de aquello Edward decidió que trabajaríamos desde casa y como mi jefe no tuve oportunidad de oponerme ;
En ese momento recordé el día que lo conocí, fue en mi primer día de trabajo en la editorial published de seattle, recuerdo que estaba muy nerviosa, puesto que era mi primer trabajo en la rama de la literatura, esa mañana mi cabello había sido un locura y termine haciéndome una sencilla coleta, después mi auto no encendía, y para terminar derrame un poco de café sobre unos papeles... ¡que día!
Después de dos meses como editora comenzamos a salir y sin darme cuenta una tarde de el 30 de mayo todo se detuvo en la oficina, de pronto las máquinas dejaron de sonar, tal tranquilidad, me perturbo y asi   despegue la vista de mi computador, Edward se encontraba parado detrás de mi con una pequeña caja de terciopelo negro, todos se encontraban a nuestro alrededor con extrañas sonrisas de sorpresa
-Anastasia te quieres casar conmigo - jamás lo había escuchado hablar tan firme y sin titubear, en cambio yo sentía que el piso se me movía debajo de los pies, pero solo era yo la que lo sentía, las manos me temblaban y la mente se me descolocó, ¡no sabía que decir! Al ver las miradas expectantes de nuestro público me sentía aun mas  presionada, mi mente esta al mil, debo responder
-¿si? - digo con un hilo de voz al final, y me extraña que no, note la pregunta en mi afirmacion
Todos gritan y vitorean a nuestro alrededor, Edward me estrecha en sus brazos con una gran sonrisa en sus labios ;
El tiempo pasó tan rápido desde ese día, cuando me di cuenta ya tenía puesto un enorme vestido de novia, recuerdo exactamente lo que pensé en ese momento frente a el espejo de piso a techo que había en la habitación,
Que estas haciendo Anastasia me reprochaba yo misma, por un momento deseaba salir corriendo de ahí, dejarlo todo comenzar una nueva vida en otra parte, tal vez en California o Irlanda, tan lejos como pudiera, viajar por el mundo conocer a mas personas, vivir mi vida, pero aquí seguía con los tacones clavados en el piso de mármol blanco;
Asi, 2 años pasaron, y para mi  toda una eternidad,
Me levanto despacio de la cama para no distraerlo y me dirijo hasta mi estudio que quedaba en el otro extremo de la casa, los pasillos eran fríos a causa de las paredes de vidrio y la decoración tan minimalista, al entrar me tumbo en mi cómodo sillón de piel color café tabaco que parecía ser el único mueble en la casa que yo había escogido cuando me mude acá, me acomodo en el y contempló por el gran ventanal los espesos pinos que ahora se encontraban cubiertos de nieve, mi vida era tan diferente a como la había imaginado en mi juventud, creía que me comería el mundo que tendría el mas arrebatado y apasionado amor , que escribiría mi propio libro, pero todo eso había quedado atrás, ahora mi vida era un cliché ;
Todas las chicas de la editorial me envidiaba por estar casada con Edward el dueño de aquel monstruo de la literatura, pero en estos momentos todo lo que tenía lo cambiaría por una nueva vida, pero ¿acaso tendría el valor de salir de aquí?¿ acaso podría dejar a Edward? que a pesar de nuestra corta edad parecíamos un matrimonio de 50 años, no había pasión, ni seducción entre nosotros, aunque yo lo anhelaba... pero ahora... ya no con el.

{Esta es una versión sobre el libro de Fifty Shades of Grey... espero que les guste }

Ingles..... P. O. V. Anastasia steele
I look up to look out the window of my room everyone was covered by the snow because of the heavy snow last night, sighed somewhat melancholy, Edward was inert on the laptop finishing a work of the editorial, these had been the Coldest days of all winter in Seattle and because of that Edward decided that we would work from home and as my boss I had no opportunity to object;
At that time I remembered the day I met him, it was on my first day of work at the published publisher of seattle, I remember that I was very nervous since it was my first job in the literature branch, that morning my hair had been crazy And I ended up doing a simple ponytail, then my car wouldn't start, and finally I spilled a coffee on some papers ... what a day !!
After two months as an editor we started going out and without realizing it one afternoon on May 30 everything stopped in the office, suddenly the machines stopped sounding, such stillness disturbed me and I took my eyes off my computer, he was standing behind me with a small black velvet box and everyone was around us
-Anastasia you want to marry me - I had never heard him speak so firmly and without hesitation, instead I felt that the floor was moving under my feet, but it was only me who felt it, my hands trembled and my mind went wild He went out of the picture, he didn't know what to say !! Seeing the expectant looks of our audience I felt pressured
-yes? - I say with a voice
Everyone screams and cheers around us, Edward holds me in his arms with a big smile on his lips;
Time went by so quickly from that day, when I realized I was already wearing a huge wedding dress, I remember exactly what I thought at that moment in front of the floor-to-ceiling mirror in the room,
What are you doing Anastasia I reproached myself, for a moment I wanted to run away from there to leave everything to start a new life somewhere else, maybe in California or Ireland, travel the world meet more people live my life, but here I continued with heels nailed to the white marble floor;
And here I am 2 years married, but they seemed like a lifetime;
I get up slowly from the bed so as not to distract him and I go to my study that was at the other end of the house, the corridors were cold because of the glass walls and the minimalist decoration, when I entered I lay in my comfortable armchair with tobacco brown skin that seemed to be the only piece of furniture in the house that I had chosen when I moved here, I settled in and looked out the large window at the thick pine trees that were now covered in snow, my life was so different from As I had imagined in my youth, I believed that I would eat the world that would have the most rapturous and passionate love, that I would write my own book, but all that had been left behind now my life was a cliche;
All the girls in the publisher envied me for being married to Edward the owner of that monster of literature, but right now everything I had I would change for a new life, but perhaps I would have the courage to leave here, perhaps I could leave Edward, who despite our young age seemed like a 50-year-old couple, there was no passion or seduction between us although I longed for it ... but not with him anymore.

{This is a different version of the Fifty Shades of Gray book ... I hope you like it}

Fifty Shades Of Passion Donde viven las historias. Descúbrelo ahora