𝐓𝐫𝐨𝐮𝐛𝐥𝐞𝐦𝐚𝐤𝐞𝐫

01

Aquí me encontraba, en mi salón, sentada sobre un pupitre, en un lugar donde solo habitan ancianos calvos y ancianas amargadas.

El único sonido que envolvía el salón en el cual me encontraba era el de un lápiz chocando constantemente con la madera de un pupitre, y se trataba de mi, el sonido era molesto a los oídos de mis compañeros que se quejan hasta porque pase una mosca frente a ellos.

Es realmente complicado con ellos, al igual de que en un salón de clases nunca falta la castrosa, la cual en estos momentos estaba pidiendo que apagaran el aire acondicionado solo porque tenía frío, alta estupidez, solo dan ganas de meterle un calcetín en la boca para que así se callé...

Nada especial en este salón, están los típicos personajes principales, el galán, la chica que está más abierta que las torres gemelas...el homofóbico, El callado y bla bla bla, Siempre lo mismo y aburrido

A pesar del sonido del lápiz chocando con la madera el salón se mantenía en calma total al no estar acompañados de algún profesor, por lo general cuando uno de estos se distrae se forma la tercera guerra mundial.

Fueron varios segundos de silencio donde solo se escuchaban entre si sus respiraciones hasta que el sonido de una puerta rechinando al ser abierta llamo la atención de todos, se trataba de la profesora de Historia, Luego de un perezoso "Buenos días" de parte de sus estudiantes al unisono, está entró al lugar acompañada de dos chicas de aspecto impecable.

Mi vista fue directo a una de ellas, una chica de piel cremosa y ojos grandes, llamativos, de esos ojos en los cuales podrías leer muchas cosas solo si su persona te lo permite, ella llevaba el uniforme desarreglado en comparación a la otra chica que entró junto a ella, Que llevaba su uniforme bien planchado y arreglado con su corbata bien hecha.

En cambio, ella, ni siquiera llevaba su corbata echa, solo la llevaba alrededor del cuello, su camisa blanca se veía arrugada más aún así estaba limpia, es aceptable.

Debe ser una chica desordenada por como lleva sus prendas, Patético para ser ya una chica de 17 años.

Una voz se hizo presente sacándome de mis pensamientos.

- Deben presentarse a la clase, Jovencitas. - Sentenció la maestra quien sacaba sus libros de su bolsa acomodandolos en el escritorio, sin dedicarle una mirada a las recién llegadas.

Claro, Sería lo típico de las nuevas que se presentan amablemente, que no conocen el lugar, se pierden, son torpes y son las niñas bonitas que se roban la historia y atención de la vida de los demás, esto se vuelve cada vez más cliché.

- Buenos días, mi nombre es Kim MinJu. - Hablo la chica a la cual apenas había notado, al dirigir mi vista hacia ella Noté que su aspecto arreglado y su poco maquillaje dejaba ver a una chica tierna, con piel aparentemente de porcelana, una leve sonrisa se formó en sus labios luego de presentarse, está si que es la chica linda y tímida de todas las historias...

- Kang Hyewon. - Se presentó la opuesta llamando nuevamente mi atención, a diferencia de su tono de voz, el de ella se escuchó más forzado que el de la anterior, quien utilizó un tono de voz bastante amable y juguetón, más el salón aún se mantenía en silencio por parte de mis compañeros quienes solo miraban como bobos a las dos nuevas y las chicas que algunas las miraban igualmente como estúpidas y otras con envidia...

- Vallan a sentarse. - ordenó la profesora alzando su mirada mientras tomaba unos marcadores para la pizarra, ya iniciaría su clase.

Ambas chicas hicieron lo ordenado por la autoridad en estos momentos, Ambas recorrieron con la mirada el salón en busca de algunos asientos vacíos los cuales estuvieran uno cerca del otro, más por su mala suerte los únicos asientos libres estaban en cada esquina del salón.