A pesar de esto seguia hablando con Daniel pues realmente no sentía que era un desconocido, era como si fuese un amigo de toda la vida en el cual podía confiar.
Seguimos hablando todos los días como de costumbre dia, noche y madrugada por un período aproximadamente de 6 meses hasta que por fin decidimos conocernos en persona.
Como los dos estabamos en la universidad coordinamos un dia con horarios semejantes y decidimos que seria el lunes de la proxima semana.
En comparación a como había transcurrido el día, el resto de la semana pasó realmente lento y cada día aumentaban las ansias de verlo, no podia imaginarme a ciencia cierta como seria aquel momento solo sabía que tenía gran potencial para ser el día perfecto.
Finalmente llegó el lunes, habiamos acordado encontrarnos la universidad después de clases, como era de imaginarse antes de salir de casa me puse ropa linda, unos jeans y una camisa a cuadros para ser mas exacta, no queria lucir muy exagerada, al fin y al cabo nuestro tan esperado encuentro seria en la universidad, me puse un toque perfume con olor a petalos de rosa, algo no muy llamativo y perfecto para la ocasión y al fin sali a mi clase.
La clase de matemáticas esa mañana pareció ser un poco mas larga que lo acostumbrado, no estaba muy segura si era por el hecho de que realmente no estaba prestando mucha atención o porque quería que el tiempo pasara rápido para conocer a Daniel.
10 de la mañana y finalmente suena la campana, era oficial la clase habia terminado y la hora de conocer a Daniel por fin había llegado.