New York

1. El comienzo

¿Quien diría que todo esto empezó hace cuatro años?, ¿quien diría que esta loca historia comenzó de una simple, algunos dirían que estúpida, idea de formar una banda?, donde conocería a la persona que trae mi mundo entero de cabeza.

(...Cuatro años atrás...)

Ahí estaba yo, pequeña, inmadura, y torpe. Estaba tomando una clase de canto que, a decir verdad, no quería tomar. Ya estaba aburrida de hacer los mismos ejercicios una y otra vez, pero mi padre insistía en que lo hiciera. No me mal interpreten, me encanta cantar, solo que esa clase era realmente aburrida

-Vamos Alex, una vez mas y terminamos la clase por hoy- hablo Javier, mi profesor de canto sacandome de mis pensamientos.

-Esta bien- dije sin muchas ganas.

-Oye, se que no te gusta, pero es necesario para que avances- Siempre me decía lo mismo y yo no notaba el avance del que tanto me hablaba -Además, tengo algo que contarte, algo que sé que va a gustarte- cuando dijo eso mi curiosidad despertó.

Hice el ejercicio una vez mas, pero como era costumbre en el, me hizo repetirlo tres veces, sin embargo lo hice porque esperaba que me contara lo que sea que tuviera en mente.

-Esta bien, esto es todo por hoy- dijo cerrando el libro de solfeo que tenia en frente -Ahora llama a tu papá, que quiero hablar con el y contigo acerca de algo- Termino de hablar con una sonrisa en su rostro.

No entendía nada, ¿será que le iba a poner quejas a mi papá otra vez porque no estudiaba lo que el me mandaba? ¿Ya no quería que estuviera en sus academia? ¿Me iba a echar?. NO, ya deja de pensar estupideces Alex, solo haz lo que te dice. Era una suerte que las clases fueran en mi casa, así tenia libertad de hacer muchas cosas.

Me dirigí hasta el cuarto de mis padres, abrí la puerta y me asome para verlos en su cama viendo una película en el televisor.

-Papi, el profesor quiere hablar contigo- dije mirando a mi papá que estaba en pantaloneta y sin camisa.

-Mmmm, esta bien, ya voy- dijo mi padre sin muchas ganas de vestirse otra vez.

Cerré la puerta y me dirigí otra vez a la sala de estar, donde estaba mi profesor sentado en el mueble mirando algo en su teléfono.

-Ya viene profe- dije haciendo que levantara la vista de su teléfono.

-Ok- respondió sin más

-Y... ¿De que nos quiere hablar?- pregunte algo preocupada por lo que diria

-Tranquila- respondió notando mis nervios -Es solo que se me ocurrió una idea, ya veras- dijo alimentando cada vez mas mi intriga.

A los pocos segundos mi padre se hizo presente en la habitación, esta vez traía puesta la misma ropa que había usado hoy para trabajar.

-¿Que mas Javi?- dijo saludando con el clásico apretón de manos a mi profesor -¿que hizo Alex esta vez?- pregunto mirandome de reojo, a lo que respondí con una cara de sorpresa fingida

-No Marcos, esta vez no hizo nada- Respondio soltando una pequeña carcajada

-Entonces, ¿que es tan importante?- preguntó mi padre con una ceja levantada sorprendido de que esta vez no era ninguna queja sobre mi.

-Lo que pasa es que se me ocurrió una idea, no se que te pueda parecer, pero de verdad quiero intentarlo y quiero que tus dos hijas sean parte- hablo con una sonrisa y brillo en sus ojos

-¿Que es Profe?- Dije emocionada sin poder esperar lo que iba a decir

-¿Que los parecería formar una banda?- pregunto siguiendo con mi emoción.

-¿Una banda?- dijo mi papá sin muchas ganas -¿a que se debe esa idea?- preguntó

-Lo que pasa Marcos es que la la juventud de hoy esta distraída en estos aparatos- dijo señalando su teléfono celular a lo que yo respondí torciendo los ojos -Quiero que con este proyecto ayude a la juventud a despertar, a mostrar el poder que tiene la musica, lo hermosa que es- Dijo con el mismo brillo con el cual nos había comentado su idea.

-Que espectacular profesor- dije igual de emocionada que el. La idea de verdad me daba ilusión.

-No lo se Javier- dijo mi padre dudoso rascando su cabeza -¿quienes estarían en esta dichosa "banda"?- pregunto mi padre haciendo comillas con sus dedos

-Jóvenes Marcos, Muchachos que inspiren a esta generación- dijo levantándose del sofá quedando frente a mi padre -Ya tengo a algunos en mente, solo necesito tu aprobación para que tus hijas me colaboren con el proyecto-

-¡SI!- grite emocionada -quiero hacer parte, di que si papi, por favor- dije mirando a mi papá con cara de perrito

-Pues... Toca preguntarle a lizzy- respondió desordenando un poco mi cabello - si tu hermana dice que si, yo te dejo estar en la banda-

-Genial- bufé sentándome en el sofá y cruzando los brazos- Lizzy nunca va a aceptar-

-¿Que yo que?- dijo Lizzy entrando a la habitacion haciéndome pegar un pequeño salto.

-Hola Lizzy- la saludo mi profesor -es un gusto verte-

-Igual profesor, ¿de que hablaban?- pregunto mirándonos a todos los que estábamos en la sala.

Mi profesor procedió a contarle la loca idea que tenia en mente, a lo que ella solo asintió a cada cosa que decía. En estos momentos dependía totalmente de lo que ella dijera y la verdad estaba casi segura que no iba a aceptar.

-Entonces, ¿que dices?- dijo mi profesor terminando de dar su discurso explicando el proyecto.

-Mmmm- dudo mirándome de reojo -No lo se, dejame pensar- después de que dijo eso simplemente abandono la sala de estar con una pequeña sonrisa en su rostro.

¡¡¡ESTO TENIA QUE SER UNA BROMA!!!
sé que solo lo hacia para molestarme, estaba segura. De verdad queria hacer parte de esto y ella solo quería fastidiarme.

-Bueno, solo queda esperar a ver que dice tu hermana Alex- dijo mi profesor tomando su mochila.

-Te acompaño a la salida Javier- dijo mi padre dándome una ultima mirada y regalándome una sonrisa.

No sabia porque me daba tanta ilusión hacer parte de esta banda, había algo dentro de mi que me decía que lo hiciera y me daba rabia depender de mi hermana en estos momentos pero lo único que podía hacer era hablar con ella para tratar de convencerla y esperar a que aceptara.

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Holaaaaa
Aquí les dejo una pequeña historia basada un poco en mi vida 😅
Espero que la disfruten
❤️