AVENGERS X MALE READER

Tony Stark - Tan dulce como el azúcar

Notas:

(Y/N) = Tu nombre
(L/N) = Tu apellido
(H/C) = Color de cabello
(E/C) = Color de ojos
(Y/A) = Tu edad
(W/N)= Nombre del Bistro

Bien eh vuelto con más, ahora le toca a Tony, no suelo escribir para él ya que no soy súper fan de Stark pero pos estos no serían one shot de Avengers si no lo incluyo aunque sea una vez. No se enojen ya que es platónico (tratare de subir algo ms romántico luego)

**********************************************************************************************
5:00 am, tu celular suena con la pista más estruendosa que tienes entre tus carpetas de música, no es que te levantes tan rápido, Dios sabe que no eres una persona madrugadora, tienes que levantarte para ir a trabajar, adoras tu trabajo, tal vez no es el más glamoroso o el mejor remunerado económicamente, pero te gusta mucho. Eres cajero/mesero en un pequeño bistro en el centro de Nueva York, no es un lugar tan grande, pero si es muy concurrido, la mayoría de los clientes matutinos son frecuentes así que memorizaste los desayunos de los que ahí lo toman. No sería difícil trabajar ahí, si no fuera por tu jefe, se podría catalogar como alguien un poco más que insufrible, él es la razón por la que atiendes la caja y eres mesero, pero no te molesta (mucho), los clientes te han agarrado cariño, eres dulce, amable y divertido, muchos se quedan ahí y te cuentan sobre su vida porque tienes un aura que les inspira confianza, otros entran ahí con todo el estrés del mundo y salen relajados después de una buena charla contigo.
Regresando a la rutina, despertaste, te alistaste para salir, llevabas tu uniforme debajo de tu sudadera, te toma aproximadamente 1 viaje en metro para poder llegar, después de empujones en el metro y caminar unas 20 calles para llegar desde la estación por fin estás listo para entrar. Lo primero que haces al llegar es poner a funcionar todas las cafeteras, y la máquina de expesso, llamar a la panadería local para asegurar el pedido de pan fresco y por ultimo ordenar todas las mesas y la barra para los comensales. Te toma aproximadamente 1 hora todo esto, así que cuando el reloj ya casi marca las 7:00 am te dispones a abrir y te das cuenta de que ya tienes por lo menos a 3 clientes haciendo fila.

Pasan un poco más de media hora y el lugar ya se encuentra con bastante gente, tus 2 compañeros se encargan de entregar la comida, pero no se dan abasto. Así que como ya no tienes clientes en caja te dispones a tomar los pedidos de la gente que está en la barra. te diriges hacia cierto hombre de lentes oscuros sentado al final.

(Y/N): buen día, bienvenido a (W/N), ¿en qué le puedo servir? – Le dices poniendo un vaso con agua a su alcance, el hombre gira perezosamente la cabeza sin mirarte, se quita las gafas, unos círculos adornan las pequeñas bolsas de sus ojos.
Tony: ah.... Si..., dame 4 expressos – Dijo el hombre entrecerrando los ojos, se notaba cierto olor a alguna bebida alcohólica, podría ser que tenga resaca.
(Y/N): Entendido, cuatro expr... disculpe ¿dijo cuatro? – dijiste sorprendido ya que es demasiada cafeína
Tony: si, cuatro, pediría más pero aún tengo varias reuniones y ahí tomare más café... - el hombre parecía más muerto que vivo, pensaste que a su edad ya no debería desvelarse tanto.
(Y/N): Muy bien... amm, ¿algo de comer?
Tony: No, aunque muero de hambre no creo que algo se quede en mi estómago si lo fuerzo. – Dijo el mayor mientras palmaba su estómago mientras revisaba su celular.
(Y/N): Bien, en un momento vuelvo. – Fuiste a preparar los 4 expressos, pero también fuiste por algo a la cocina para aquel hombre – Bien, aquí tiene, 4 expressos - los colocaste enfrente de él, inmediatamente colocaste también un tazón con tozos de mango con miel.
Tony: disculpa, yo no ordene esto – dijo mirando al plato
(Y/N): Lo sé, pero le ayudaran con su resaca, créame, y descuide, van por cuenta de la casa.
Tony: No es que no pueda pagarlos es que... - Paso de ver el plato a finalmente mirarte a los ojos, se quedó un poco sorprendido, a primera instancia tus ojos (E/C) llenos de amabilidad le encantaron, luego esa sonrisa cálida y amistosa que sabía que ese pequeño gesto que tuviste para con él fue lo más sincero posible, no estaba acostumbrado a recibir amabilidad de la gente – Gracias...