Entre los Muertos

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Una semana más tarde, después del atentado contra el mundo el gruñido de un zombi sin brazos y piernas, atado con una cadena contra una tubería, desesperado por comer se escuchaba en una azotea en la cual un hombre albino se encontraba frente a este

James – oye ¿quieres un poco?

Le ofrecía un poco de vino de una botella a lo cual el zombi se volvía loco por estar a pocos centímetros de morder el brazo del tipo

James – oh... es verdad, tú ya no puedes beber... es una lastima

Con su Katana decapita al zombi y arroja su cuerpo a la calle y después de eso comienza a darle mantenimiento al sable

James – oh demonios se me terminaron las gomitas, tendré que ir por más

El sonido del abrir y cerrar de un encendedor era el único sonido que por el momento se hacía escuchar a las afueras de la ciudad

Anthony (abría y cerraba el encendedor) – ¿pueden creerlo? Nunca imaginé que el humo que liberó el misil sería un virus que convierte a las personas en zombis

Johnny – pues debes creerlo... por el momento estamos solos

Artillero – tenemos poca gasolina, esto si apenas nos alcanza para volver a la ciudad

Anthony – ¿seguro?, tú quieres volver pero te recuerdo que hay de esas cosas ahí, mejor vallamos a la siguiente ciudad

Artillero – ¿prefieres quedarte a medio camino e ir por gasolina a pie?

Johnny – es mejor que volvamos, además no sabemos si la otra ciudad este igual o mejor dicho quizás seamos unos de los pocos humanos vivos, seguro el mundo entero ya está perdido

Anthony – está bien... volvamos

Johnny – de acuerdo

Artillero – yo tomare el calibre 50

Johnny – Anthony tu conduces. [Me pregunto si ella estará bien...]

Los 3 Marines subieron al vehículo y dieron marcha de regreso a la ciudad en busca de combustible. Mientras tanto en el apartamento de ropa adentro del centro comercial...

Michel – no creí que fuéramos a librarla

Zoe – ahhhh nada mejor que un cambio de ropa

Nadia – lo que daría por un baño

Michel – solo si tuviéramos más munición y no estuvieran esas cosas podríamos ir donde el personal del centro se duchaba

Zoe – por lo menos tenemos cambios de ropa

Nadia – se siente extraño no estar en compañía de un hombre

Michel/Zoe - ¿eh?

Nadia – solo compañía, ósea convivir con un chico

Michel – jajajaja, tranquila Nadia solo molestábamos, pero... ¿tenías a un chico especial antes de que esto pasara?

Nadia – no, no tenía tiempo para pensar en eso

Michel – ¿y tú Zoe?

Zoe – pues... me atraía bastante un chico que trabajaba en la corporación

Michel – entiendo... pues yo... perdí al mío mucho antes de esto, estábamos en preparatoria cuando él se marchó...

Nadia – ¿terminaron?

Zoe – no me digas que... ¿se atrevió a irse con otra?

Michel – (suspira) no, él estaba tan cansado de la vida que llevaba y decidió escapar de su pasado, además no éramos pareja, solo era su mejor amiga aunque yo lo amaba demasiado pero no tuve el valor de decirlo por temor a arruinar nuestra amistad

Sinister World (En Pausa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora