-Sophia. Oye...lamento el choque.- Jay sonrió e hizo un movimiento con las manos para restarle importancia.
-No te preocupes. ¿Puedo sentarme con usted?. Quedan dos horas para mi vuelo,es aburrido esperar sólo.-
-Claro...-Contesté no tan convencida mientras me sentaba en la banqueta.
-¿De donde eres?- Dijo curiosamente.
-España,¿y tú?-
-Estados Unidos.-
-Wow,pensé que eras coreano.- El rió.
-Mis padres son coreanos,pero nací y crecí en Estados Unidos.- Asentí.
Salimos de la cafetería tras estar casi una hora y media conversando.
Aquel extraño llamado Jay,resultó ser un gran hablador,claro, también me escuchó perfectamente.
El iba a Corea,y para mayor coincidencia se sentaría a mi lado en el avión.
Decidimos intercambiar números, tal vez,tener un amigo en Corea,sería bueno,¿no?
- Vamos, tenemos que subir.- Pasamos por los controles y abordamos el avión.
Jay me permitió ponerme al lado de la ventana.
Hablamos de esto y aquello durante el viaje. Era muy agradable. Prometimos volver a vernos.
Me contó la razón por la que se mudaba a Corea,quería ser Idol.
Sin duda,el visual lo tenía y su carácter,al menos a mi, me parecía maravilloso.
Desperté desconcertada sobre su hombro. Jay trataba de moverse lo mínimo. Le observé un rato,era,simplemente,perfecto.
Jay me miró y hizo una mueca,me coloqué bien.
-¿Siempre duermes en los aviones? - Asentí con la cabeza.
-Son muy cansados.- El asintió.
Pronto llegaríamos a Corea,el marido de mi hermana me recogería en el aeropuerto,me contó que recogería al hijo de su amigo.
Bajamos del avión y Jay me ayudó a bajar mis maletas. Un hombre alto y trajeado se acercó a mi.
-Sophia,cuanto tiempo,veo que ya conoces a Jay. Venir,os llevaré a casa.- Mire a Jay y este daba la mano a Kang, el marido de mi tia.
LAMENTO NO HABER ACTUALIZADO,IRÉ HACIENDO EL CAPITULO DE A POCO,PERO AQUÍ TENEIS UN ADELANTO.
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