𝙔 𝘿𝙞𝙟𝙚𝙧𝙤𝙣 𝙌𝙪𝙚 𝙎𝙚𝙧 𝙋𝙖𝙙𝙧𝙚 𝙀𝙧𝙖 𝙁𝙖𝙘𝙞𝙡.

CAPITULO 01: diablillo

Kim Taehyung.

Esto es asqueroso.

Demasiado asqueroso.

Literalmente tenía vómito de bebé por mi cara y pijama. Quería ir al baño y darme una ducha rápida, pero había un problema. Demasiado grande. Mi pequeña bestia no dejaba de llorar.
Ya intenté de todo, desde darle su leche en polvo, cantarle, mimarlo, acunarlo, nada funcionaba. El sigue llorando y cada vez con mucha más fuerza. Me preocupaba muchas cosas, desde que su pequeña garganta sufriera algo y si es que tenía que ir corriendo a un hospital para ver qué sucedía. Pero. ¿Cómo iba a salir a estas horas?, eran las casi las 4 de la mañana y por dónde vivo, al bajar es un poco peligroso.

Nunca me había pasado esto, bueno desde que nació Kim Young Soo, no me había pasado hasta ahora.

Siempre fue un bebé tranquilo y sus horas de despertarse eran iguales. Como cualquier bebé que te despierta en la madrugada. Pero esta vez, este bebé se despertó con todo.
Su llanto ya estaba queriendo reventar mis oídos, pero eso a mí no me importaba.

Le hacía el típico "shi" Repetidas veces para lograr calmarlo, pero el aún así no lo hacía. Yo ya estaba llegando al topé, estaba desesperado y deseaba que si era posible, un ángel me ayudara.

El timbre de la casa sonó repetidas veces y yo, con lágrimas en los ojos y sobando la espalda de mi pequeño, el cual aún seguía llorando, abrí la puerta y me encuentre...

- ¡¿ PUEDES POR FAVOR CALMARLO ?!-me interrumpió ella mi pensamiento, mientras se volteaba y se cruzaba los brazos.

Mi vecina se sorprendió, creó, que cuando vio que el único que lloraba no era solo el bebe en mis brazos, si no que también estaba llorando un adulto de 25 años. Ella suspiró y pasó por mi costado entrando al pequeño apartamento, miró todo para luego acercarse a mi y extendiendo sus brazos, en señal en que le pase a mi bebé.

Esta bien que haya dicho que deseaba que si era posible un "ángel" me ayudará, pero no esperaba un demonio.

Aún que... Ella quería ayudar.

Era mi única opción.

-Se me cansan los brazos de esperar, señor Kim-dudando le di a mi hijo cuidadosamente, ella lo tomó y lo acunó en su pecho en sus brazos, acomodándolo para poder empezar a moverse con mi bebe en sus brazos por la pequeña casa.

Eso basto para que mi hijo abriera sus ojos y calmara su llanto mientras miraba a la señorita Cortés. Como si mi vecina fuera un ángel para él.

Ella empezó a acariciar suavemente la pequeña frente de mi hijo, el... ¡EL! Se calmó y acomodo su pequeña cabeza en el pecho de ella, como si nada. Abrí mi boca sorprendido, limpie mis lágrimas que están por mis cachetes, sobe mis ojos queriendo que esto sea una broma.

¡Mi vecina! La cual la tachaba de odiosa...

¡Tranquilizó a mi pequeña bestia como si nada!

-cierra la boca que se te entran las moscas, señor Kim. -Dijo Cortés aún acunando a mi hijo.

Y pensar que hace unos días peleé con ella por el tema que vino lo que creo que era su novio, llego hasta mi puerta borracho a ser un escándalo. La cosa era que el se confundió de puerta y al último a pesar de que no era problema de ella que su novio venga borracho y se confunda de puerta, yo le termine gritando ya que había asustado a mi hijo por la forma en la que golpeó mi puerta.

Ella estaba aquí, al frente mío, en mi departamento y literalmente había domado a la bestia.

Me acerque a ella mientras miraba mi hijo, iba a decir algo pero ella me interrumpió.

-vueles horrible, así que vete al baño y date una duc...-antes de que ella pudiera terminar de ordenarme a irme a dar una ducha, mi hijo puso su boca a lo que tenía cerca, eso era el pecho de Cortés, al principio Cortés no hizo nada solo se quedó estática como si fuera una estatua, luego abrió sus ojos todo lo que pudo al procesar lo que estaba pasando y fue un segundo después en el que su cara se puso totalmente roja en pocas palabras: se había sonrojada; lo cual se me hizo tierna de alguna forma, aunque también chistoso porque mi hijo empezó a querer chupar encima de la tela del polo de pijama de Maggie (como así se llama mi vecina).

Sonreí disimuladamente, aunque aún así ella se dio cuenta algo que un poco mas y podía sentir su mirada tirándome dagas. Si las miradas matara, yo ya estaría muerto de una forma muy retorcida, pues, era Maggie Cortes quién lo hubiera hecho.

Yo me encogí de hombros y me alejé poco a poco, caminando de espaldas hasta el baño, que por cierto, casi me doy en el culo por ir de espaldas.

Se que ella no intentaría nada malo dentro de mi apartamento y que tampoco se iría ya que mi bebé la agarró como remplazo de biberón.

-me las pagaras Kim Taehyung y muy caro.

-claro, como tú gustes, Maggie Cortés.

Sonreí dejando a la vista mi dentadura, y ella hizo lo mismo pero en una fingida sonrisa, le guiñe el ojo antes de adentrarme al baño y cerrar la puerta con seguro por las dudas. Siendo hombre a veces me sentía violado por esa mujer por las anteriores veces que nos topábamos, nuestros mayores encuentros eran en el único ascensor del edificio, en donde aquel pequeño lugar, su mirada en mi era notoria y lo menos disimulada. Era como si ella fuera un gato y yo el ratón que no caza por querer jugar.

Siendo rápido me quité la pijama que tenía y lo puse en la lavadora que estaba a un costada de la puerta del baño, antes de meterme a la ducha y lavar todo mi cuerpo. Bañándome como si fuera flash y no era que no confiara mucho en Cortes, solo que siempre me preocuparé sea como sea de mi bebé.

Al salir ya limpio, seco y con un pantalón para dormir que estaba tendido en el baño.

Vi a Maggie sentada en mi cama y aún con mi hijo en brazos, ella tarareaba una canción mientras miraba cariñosamente a mi hijo. Algo raro viniendo de ella. Pues desde que llegó casi siempre solo me miraba a mí y no a mi bebé.

-¿Cuántos años tuvo cuando dio a luz al bebé?- preguntó Maggie.

Su pregunta me agarró desprevenido y un tanto aturdid me rasque la nuca mientras me acercaba a ella manteniendo mi vista en mi pequeña bestia durmiendo en sus brazos. Maggie miraba la fotografía enmarcada que estaba en mi pequeña mesa al costado de la cama.

- 26 años...-dije con los labios fruncidos.

-¿Quisieras contarme cómo se conocieron?-me miro y yo a ella.

¿Le contaría?

◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡◡
⌂ ⌕ ⊞ ♡ ○

Holisss 🙋

Espero y les haya gustado.

Y Perdón si hay fallas ortográficos.

Sin más, cambio y fuera, bestias.🥀

aclaro: si Tae le dice así es porque se le quedo grabado el apodo que le decía maléfica a la princesa de pequeña.