Cuarta regla: no olvidarse

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•Roma•

El corazón se me paralizó por un segundo, estaba jodida hasta el culo, esto no podía ser cierto...

La cara de valen era igual o peor que la mía, el pobre no sabía como reaccionar ni que decirme.

-segura?- pregunto para calmar la tensión

-si valen, hay dos rayas re marcadas- solté largándome a llorar nuevamente y tirándome lentamente al piso porque en ese momento no me funcionaban ni las piernas

Valen se agacho hasta quedar a mi altura, para luego sentarse a mi lado y sin decir nada abrazarme. Yo estaba en un total shock, temblaba sin poder controlarlo y tampoco  entendía como todo se había ido tan a la mierda.

-va a estar todo bien chiquita, yo sé que ahora no hay nada bueno pero todo se va a acomodar si? - soltó Valen después de más de media hora de completo silencio

-vos decís?- le pregunte como pude

-siempre nos las arreglamos para que todo se mejore, y esta no va a ser la excepción

-pero es un montón, que voy a hacer? Como le digo a Mateo? Le digo a mateo?

-si Romi, como no le vas a decir a mateo? Ya con él decidirán qué quieren hacer

-no quiero- volvi a llorar- no puedo con tanto, ya tenia demasiado con intentar superar a Mateo y ahora esto.... la vida me odia

-ey no... hay mil cosas lindas que tenes de las que agarrarte para no hundirte en este momento de mierda

-espero que tengas razón

-ya vas a ver que si, vamos- me sonrío parándose y extendiéndome las manos para ayudarme a pararme

Nos dirigimos a la cocina y valen me obligo a que tomara un vaso de agua para que me calmara un poco. No se que sería de mi en estos momentos si no tuviera a gente como valen y Pia a mi lado

-queres que veamos otro capítulo de friends?- me sonrío quitando una lagrima de mi cara

-quiero que todo esto sea una pesadilla, quiero dormirme y levantarme abrazada a Mateo. Que me sonría como todas las mañanas y me prepare su café asqueroso, que me tomaba nomas porque lo amo... lo amaba y...

-euu... ya está amiga...- me interrumpió valen abrazándome nuevamente y tratando de calmarme

-qué voy a hacer valen? Mi vieja me va a matar...

-tu vieja es un amor, aparte te tuvo cuando tenía más o menos tu edad o no ?

-por eso... siempre trato de darme un futuro mejor y aunque se que me ama con su vida, siempre me inculcó que tenía que formar mi futuro antes de formar una familia, porque después se complican las cosas. Y acá estoy... embarazada de un pibe al que no lo puedo ver sin destruirme por dentro. Mi mamá ni siquiera sabe que corte...

-ya vas a encontrar el lugar y el momento para decírselo, ahora respira y cálmate. Te va a hacer mal ro enserio...- soltó preocupado valen

Nos quedamos un rato tirados en el sillón, sin decir ni hacer nada. Yo pensando como mierda iba a hacer para sobrellevar todo el quilombo que estaba haciendo mi vida y valen ayudándome con lo que podía.

-bueno voy a hacer algo para cenar porque ya es re tarde, queres?- me pregunto valen sonriendo

-si, dale. Mi vieja no va a volver hoy, hay varias cosas para preparar. Yo... ahora te acompaño- le intente sonreír

-Dale Mita no te hagas drama

Me quede un rato más tirada, la noticia que había recibido hacía un par de horas no era tan facil de digerir.

Una vez que junte fuerzas decidí darme una ducha, necesitaba bajar decibeles y no encontraba otra manera de hacerlo

Me puse un nuevo pijama, cepille mi pelo e intente sonreír ante el espejo. Estaba pálida, con unas ojeras que me consumían toda la cara, los ojos hinchados y rojos. Nunca había estado tan demacrada en mi vida y tampoco tenía las fuerzas necesarias para no estarlo.

Fui hasta la cocina donde me encontré a Valen cocinando mientras bailaba y cantaba una canción. Todo me hacía acordar a Mateo, él hacía exactamente lo mismo y literalmente no podía hacer nada sin su música al palo. Sonreí al recordarlo cantar alguna cumbia villera mientras se mandaba unos pasos demasiados cómicos, valen en este caso era más tranquilo al igual que la música por la que había optado

-qué rico olor- le sonreí

-Fideos con tuco, receta de mi abuela. Si no te gustan creo que voy a tener que anularte como amiga- rio con esa risa que lo caracterizaba e intentando guiñarme un ojo pero sin éxito, nunca le había salido del todo bien

-qué agrandado oliva, igual me encantan las pastas ya lo sabes

-bueno entonces pone la mesa que esto ya sale

Con su ayuda puse la mesa para luego disponernos a cenar, creo que por lejos ese había sido el momento con más paz que había tenido desde que todo el caos se había desatado. Valen generaba eso en todas las personas, su forma de ser tan serena y su risa eran un mimito al alma en estos momentos.

Después de quedarse un rato más y ayudarme con otra de mis tantas crisis partió para su casa dejándome una vez más sola con mi corazón roto...

Les dejo su dosis diaria de novela
Yo no quiero decir nada pero el capítulo de mañana la puuuuuu 🤭🤭