De mi propiedad [Transformers Prime]

Capítulo 1 ¿Quién eres tu?

El sol se estaba poniendo y salía tarde de mi trabajo como todos los días, solo me despedía de unos cuantos que estaban en el lugar mientras me dirigía hacia el estacionamiento e irme a casa, no fue hasta que me encontré nuevamente con jack que igualmente se preparaba para ir a casa.

-Vaya día ¿No ____? [Pregunto jack]

-Eh, si. [Respondí incomoda]

-Te veo mañana en la escuela, que descanses. [Dijo jack alejándose del lugar]

-Si, que descanses igual tu. [Dije mirando detrás mía, pero ya no estaba]

Sobre dos ruedas me dirigía a casa y las solitarias carreteras se iluminaban con las pocas farolas que había, lo único en lo que pensaba era en poder llegar a casa y descansar después de un día agotador, pero un golpe me saco de mis pensamientos, había caído de mi bicicleta y no era porque haya tropezado con un piedra o bache, la cadena se había roto.

-[Suspire pesadamente] Porque justamente hoy. [Dije levantándome y quitando el polvo de mi ropa]

Mire la cadena esperando buscar una forma de volverla a reparar, pero estaba tan desgastada que ya no había posibilidad de volverla a arreglar, lo único que podía hacer era andar a pie con una bicicleta inservible. Mire el cielo estrellado ya que eran pocas las ocasiones que podía hacerlo, mientras seguía caminando varios autos pasaban a gran velocidad a un lado mío y detrás una nube de polvo que se dirigía hacia mí, cubrí mi cara y espere a que pasara hasta que escuche el motor de una moto frenarse frente a mi. Levante la mirada para encontrarme con jack quien tenía nuevo vehículo.

-¿Necesitas que te lleve a casa? [Pregunto]

-Estoy bien. [Respondí]

-¿Estas segura? el lugar esta enfriando y hay personas realizando carreras por este lugar. [Dijo mientras me ofrecía su mano]

-Tienes razón, pero solo esta vez dejare que me lleves a casa. [Dije subiendo a la parte de atrás de la moto]

Con una mano me sujete de el y con la otra el manubrio de la bicicleta ya que me daba pena tener que dejarla después todo lo que habíamos pasado.

-¿Y bien? ¿Qué le a pasado a tu bicicleta y a ti? [Pregunto]

-La cadena se ha roto, lo cual hizo que cayera. [Respondí]

-¿Y es por eso que caminabas en medio del desierto esperando a que alguien te ayudara? [Pregunto]

-No, solo disfrutaba de lo silencioso que estaba hasta que unos locos en sus autos pasaba a gran velocidad. [Respondí]

-Deberías considerar comprar un nuevo vehículo o la pasaras mal nuevamente.

-Ya había considerado eso, así que no tienes que preocuparte por mi, darby. [Respondí algo molesta]

Al llegar a casa agradecí y me despedí de el, lleve mi bicicleta al garaje olvidándome completamente de ella, entre a la ducha y comencé a realizar la tarea que había pendiente, por suerte no era mucha, pero no supe en que momento me había quedado dormida. Un ruido estremecedor me despertó eran las 2:30 de la mañana yo solo esperaba que fuera solo mi imaginación hasta que lo volví a escuchar, se escuchaban como pasos, grandes pasos, tome una pistola que tenía guardada en una mesita de noche y salí de casa en busca de lo que estaba produciendo tal ruido, busque en los alrededores pero no encontré nada, hasta que vi una gran pisada y un charco de un liquido azul brillante que se dirigía no muy lejos de donde yo me encontraba.

Seguí el rastro hasta llegar a un pequeño risco y en el fondo había algo o alguien, poco a poco baje y conforme bajaba más lo que se encontraba herido se iba hacia más grande, no podía creer lo que veía era un robot gigante, probablemente 10 veces mi tamaño, pero ¿Cómo había llegado hasta aquí? ¿Acaso el gobierno esta metido en esto? eran las preguntas que más sonaban en mi cabeza hasta que el bot se movió. Retrocedí todo lo que pude y sus ópticos se abrieron posándose sobre mi, como si me estuviera examinando de pies a cabeza y nuevamente volvió a cerrarlos, me acerque a el lentamente esperando que no se moviera otra vez y al mirarlo detenidamente tenía rasgos casi como los de un humano, mire a un costado suyo y tenía una fuga del mismo liquido azul que me condujo a el, pensé en una forma de ayudarlo o llevarlo a un lugar donde pudiera repararlo y nuevamente se movió. Se había transformado en un auto, diciéndome que así era la única forma en la que podía ayudarlo.