Mientras Erza seguía en shock ante lo dicho por la extraña mujer la cuál se reveló cómo su madre, esta se acercaba a paso lento a Natsu el cuál tragaba duro ante la presencia de esta
Irene:- Mucho gusto jovencito - decia con una sonrisa de lado - cómo ya sabes soy la madre de Erza -
Natsu:- E-eh claro u-un gusto - dijó algo temeroso
Irene:- Sere clara contigo - se acercó al oído derecho del pobre Natsu que ahora temblaba - si le haces daño a mi hija te corto las bolas y te castrare lenta y dolorosamente ¿oístes niño? - le dijó con una voz muy aterradora
Natsu:- ...... - se quedó en blanco ante lo dicho, prácticamente esa mujer lo haría mierda si le hacia daño a Erza.....pero esperen si la que le hacía daño era ella con sus golpes
Jellal:- Hay si cómo si esas cosas pasaran jejeje - decia apareciendo al lado de Natsu
Natsu:- ¿Jellal donde estabas? - preguntó confundido
Jellal:- Atrás aguantandome la risa y viendo cómo tu suegra te amenazaba jejeje - decia algo sonriente
Natsu:- (Ya me las pagaras) eh vieja.....que diga señora este tipo de acá le hizó daño a su hija - decia haciendo de que Irene volteara y los mirara con una sonrisa que sonrojó a ambos, pero de pronto se cagaron del miedo a ver cómo esa sonrisa se deformaba y daba paso a una mirada aterradora haciendo de que ambos se quedaran petrificados.....
Nadie absolutamente nadie intervinó en la paliza que le dieron a Jellal por segunda vez, incluido también le dieron su golpiza a Natsu ya que Irene se justifico de que eso era por embarazar a su hija.....
Ultear:- Jellal ¿sigues vivo? - decia mientras se arrodillaba y veia al peliazul
Jellal:- S-si todavia sigo vivo - dijó en un susurro antes de desmayarse
Zeref:- Te pasastes Irene - dijó observandola
Irene:- ¿Qué? es un acto justificado - dijó al ver a Natsu llorando de miedo mientras abrazaba a Erza la cuál lo consolaba mientras veia a su madre con enojo
Gray:- Jajajajaja eso les pasa por idiotas - se burlaba junto a Gajeel
Irene:- ¡Silencio! - ordenó a lo que esos dos se callaron y se abrazaron del miedo que sentían
Zeref:- Mmm supongo que cómo tu castigastes a mi hermano, tendre que hacer lo propio con tu hija - decia con una ligera sonrisa
Irene:- Esta bien emperador - asintió con la cabeza
Makarov:- (Oh santo dios) -
Zeref:- Bien de seguro Larcade ya debe de estar por llegar - y tal cómo dijó las puertas fueron abiertas por un rubio el cuál tenía una cruz en su frente y venía cargando dos enormes costales