El regalo perfecto.
Scorpius sabia que el amor que le tenia su padre era maravillo, autentico, inigualable e insuperable. Lo mimaba desde muy niño. dándole los mejores regalos como modales, criándolo de la manera en que su padre siempre quiso. Dejando de lado que su abuelo fuera un ex-mortifago como su padre.
Por eso, debía darle el regalo mas maravilloso del mundo, donde su novio Albus tenia que participar aunque en su pequeña mente de tan solo quince años no sabia que darle.
¿Qué se regala a alguien que lo tiene todo?
Trajes de vestir tenia muchos, zapatos, perfumes, dinero a montón por igual. Debía pensar en algo que le gustara a su padre, ¿que podia ser?
Su abuela Narcissa le podría ayudar, claro. Pero tendría que darle créditos, y eso no le agradaba mucho. Se tumbo a su cama pensando en que era lo mejor que podría darle, su padre se merecía todo.
Felicidad.
Su mente empezó a trabajar con rapidez. Desde que su madre falleció sabía que su padre no era el mismo, así como él necesitaba a alguien a quien amar y sentirse amado.
Cada año la profesora McGonagall le permitía salir del castillo para festejar con su padre su cumple años.
Sonrió casi parecido al gato de Alicia en el país de las maravillas. Se puso de pie y salió corriendo de su sala común en busca de su novio, seguro estaría con James o Lily.
Al encontrarlo supo que era lo que podría darle, pero su plan seria estancado si no tenia a su fiel cómplice, al llegar a él lo jalo. Albus lo conocía a la perfección como para saber que tenia un plan creciendo en su mente, bueno o malo, funcionaría a la perfección si sus mentes las mantenían juntas, como cada una de sus travesuras.
°°°
Era el día, cinco de junio. Su padre estaba en la mansion Malfoy como de costumbre, esperándolo en la sala. Sonrió al verlo, después de abrazarlo y acabar de almorzar fue cuando se armo de valor y por fin se decidió a hablar aquel tema.
- Padre, ¿te acuerdas que de niño me contabas que tu mayor felicidad era el señor Potter?
- Te decía que mi felicidad era molestarlo, no él. No distorsiones las cosas.
- ¿No te da curiosidad?
- Reformula bien tu pregunta, Scorp. Yo no te críe así. Que tengas al mini Potter de tu novio no significa que se te deben pegar sus manias.
- Lo sé, perdón. Reformulo, ¿No te da curiosidad saber como esta, que hizo, como es? Si yo fuera tú tendria mi cabeza llena de preguntas similares.
- ¿Por qué motivo tendría curiosidad de algo así?
- El señor Potter es muy guapo, cambio muchísimo desde la guerra. Desde su cara hasta su cuerpo, no es que yo lo vea pero debemos darle crédito a sus esfuerzos.
- ¿Cómo sabes eso?
- Lo eh visto en las fotografías que tienes en tu cuarto de él. Y déjame decirte que si no es porque es mi suegro y tiene la edad de mi padre, me tiraría sobre él.
El sonrojo de Draco se hizo presente al mismo tiempo que bajaba el libro que fingía leer al oírle. Vale, tal vez después de la guerra tuvo un amor hacia el salvador del mundo del que nadie sabia.
- Es de mala educación estar de metiche, serás amonestado y...
- Entonces, ¿Si te gusta?
- Scorpius Malfoy, sigue insistiendo con el tema y...
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El regalo perfecto [Harco/Drarry]
FanfictionDraco cumple años, Scorpius quiere darle el regalo perfecto, Albus quiere ganarse a su suegro y Harry sera el candidato perfecto. Los personajes no me pertenecen, todos son creados por J.K Rowling. Escenas explicitas. Idea sacada en masa por un g...