CAPITULO 1 El Tokomo de Derek.

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-no puedo creer que no mudáramos a una nueva ciudad hermano. En verdad me da mucho miedo, conocer nuevos amigos, nuevos lugares...

-no tienes por qué sentirte nervioso, después de todo mamá decía que después de una gran tormenta viene la calma. Esta es una nueva forma de vida, nos irá muy bien.

-está bien, confió en ti.

Hoy, comienza la historia de estos dos hermanos, el menor, Derek es un joven de 16 años, es un poco tímido y también un poco torpe, sin embargo, le guasta ayudar a los demás en lo que pueda. Es de esos amigos que darían cualquier cosa por ti. Mide 1.70, ojos color celestes y cabello negro. A pesar de su torpeza tiene un muy buen talento creando y confeccionando cualquier tipo de ropa o incluso adorno.

El otro joven de 18 años es su hermano mayor Erick, un joven atractivo de buen físico, carismático, ojos cafés rojizos y cabello negro. Erick se ha dedicado a trabajar desde temprana edad para que su hermano se mantenga estudiando y, ha tenido mucha suerte ya que consiguió una mejor oportunidad de trabajo en la nueva ciudad.

Cuando ambos hermanos terminaron la mudanza, había quedado una caja por vaciar. Ambos abrieron la caja y sacaron unas fotos, algunas eran de Derek con sus amigos en algunos lugares significativos de su vida, desde el parque, el colegio, el parque de atracciones y una muy especial con su mejor amiga. Por otro lado, Erick saco una foto familiar, en donde aparecían los padres de ambos y ellos sonriendo.

-no creo que sea una buena idea ponerla- le dijo Derek a su hermano algo deprimido. Su hermano, al verlo de esa manera lo abrasa y le coloca la foto en el pecho.

-nunca debemos olvidar a nuestros seres queridos. Sé que es difícil, pero, ellos son nuestros padres. A pesar de que no estén con nosotros acá, es mejor siempre recordarlo aquí- tocó el pecho a su hermano en su corazón.

Las palabras de su hermano fueron adecuadas. Ambos colocaron las fotografías en la sala, en una cómoda de su antiguo hogar.

- ¿Qué te gustaría de almorzar? -preguntó Erick- después de todo no pudimos desayunar.

-mejor no cocines, solo compremos una pizza- Derek saca su billetera y saca un par de billetes- ten, compra con todo- le entrega el dinero en la mano y guarda su billetera en sus bolsillos- estaré en mi habitación.

Derek sube a su habitación, un cuarto cómodo, tenía un armario amplio, incluso aún tenía campo para más ropa. Su cama tenía un peluche de un oso blanco pequeño el cual se llamaba señor miel o, ese es el nombre que le bautizo de pequeño. Esta era una cama individual y el colchón estaba nuevo. Tenía una pequeña mesa en donde estaba su laptop y su celular. También tenía un televisor en la esquina colocada en un esquinero, sin embargo, no podía encenderlo ya que el tomacorriente estaba lejos de su alcance.

Derek agarro su celular y se acostó en la cama. Miro varias fotos con sus amigos que tenía guardadas y también uno videos bonitos de recuerdos. También reprodujo un video lleno de nostalgia, un video que, habían hecho sus amigos despidiéndose de él en el aeropuerto. Claro que, Derek no podía dejar de ver el video y llorar a la vez. Aun sabiendo que, podía comunicarse con sus amigos gracias a los avances de la tecnología, sabía perfectamente que no era lo mismo.

Erick toca a la puerta de la habitación y Derek se levanta para abrirle. Erick pasa, se sienta en la silla del escritorio y nota los ojos rojizos de su hermano.

- ¿te encuentras bien? -pregunto algo preocupado, aunque no sonaba de esa manera, más bien, se escuchó como una pregunta fría sin sentimiento alguno.

-solo veía el video de mis amigos- se restregaba la mano por los ojos intentando limpiarlos- ¿a qué has venido?

-era para decirte que, me toca turno de noche, la pizza viene en un par de minutos así que cuando toque a la puerta por favor baja.

Tokomo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora