CASTIGO

CAP. 11

Pov Jungkook

...Tres meses después...

Habían pasado ya tres meses desde que estamos en corea del norte, dos meses desde que cumplí los 18 y tres semanas desde que estoy comprometido con Kim Taehyung.

Ahora mismo me encontraba en nuestra oficina, Tae había salido porque se le presento una urgencia mientras yo me tenía que hacer cargo del negocio y todo lo que se moviera.

Tenía que hacerme cargo de la distribución de las drogas, las armas y sobre todo firmar y llenar muchísimo papeleo porque Taehyung no regresaba hasta mañana; admito que al principio fue super incómodo y agotador porque en mi entrenamiento me pusieron las cosas muy difíciles a propósito, en dos de mis últimas misiones casi pierdo la vida por culpa de algunos que se encontraban con odio hacia mi, supongo que porque de repente yo podía dar órdenes y ellos solo podían seguirlas.

A la oficina entró un hombre alto a traerme unos papeles, sin mi autorización se sentó frente a mí para mirarme como si yo fuera su juego favorito, eso en serio que daba miedo.

- ¿Qué son esos? - pregunté incrédulo

- Son unos papeles para que nuestra nueva armería sea trasladada, pero esperaras a Taehyung y la firmara, no alguien como tú

- ¿Porque no?, Tae dice que puedo tomar decisiones y sabré hacerlo de manera que nos convenga

- Mira Jeon, no me agradas mucho menos quiero obedecerte yo he estado dándole mis servicios a Taehyung desde hace 5 años y tú solo eres una perra que quiere venir y hacerse cargo de algo que no le va

Estaba empezando a perder la paciencia.

- Mira Lee, enserio que tú tampoco me caes bien y si por mí fuera créeme que no estarías aquí, Ahora permíteme aclararte algo aver si logra entrar en tu pequeña cabecita, ese bobo enamoramiento que tienes hacia Tae no será correspondió por la simple razón de que estoy yo, y para él yo soy más que suficiente, Yo soy suyo y él es mío, lamento decepcionarte pero no aceptamos un trío - le dije fríamente mientras le miraba directamente a los ojos

- ni creas que me vas a impresionar con lo mediocre que sonó ese discurso de mierda, yo nunca seguiré tus órdenes y creeme cuando te digo que haré que Taehyung se aleje de ti y te deje en las calles

Eso habría causado una sensación extraña en mi sino fuera porque realmente me despreocupaba lo que él podía hacer, está limitado a muchas cosas, yo por otro lado podía hacer tanto como quisiera y nadie diría nada. La única razón por la cual no le he matado es porque el muy maldito es realmente bueno en lo que hace.

- Deberías pensar un poco más en tu futuro querido Lee, que no se te olvide nunca con quién estás hablando

- ¿Con quién estoy hablando Jeon?¿Con la zorra calienta camas de Taehyung?

- No, con su prometido y próximamente con nuevo líder de este imperio, porque si querido Lee, Taehyung planea que los dos lideremos todo esto, ¿Curioso, no crees?

- ¿Qué es lo curioso? - preguntó fastidiado

- Que tú hayas estado buscando este puesto que ya tengo garantizado durante los últimos 5 años, mientras yo solo tuve que esperar tres meses

- Eres un maldito! - gritó levantándose rápidamente del sillón para agarrar su arma y apurarme con ella

Yo por otro lado estaba de lo más relajado, solo despegaba mi mirada de la suya para mirar el reloj, al fin ya había marcado las 5:30.

- Baja tu arma y alejate de Jeon si no quieres que te vuelve la cabeza - dijo un muy molesto Tae entrando por la oficina con su arma en manos y acompañado de dos hombres

Yo solo pude quedarme a mirar la escena mientras lentamente me volvía a sentar en mi sillón, trate de no soltar una pequeña risita ante la confusión en el rostro de Lee pero se me fue imposible. La verdad para mí también era una sorpresa que mi Tae-tae regresará antes de lo planeado pero realmente no me disgustaba esa idea.

- ¡Tú!, Maldito Jeon lo planeaste todo, claro era obvio, ya decía yo que no era normal estuvieras tan tranquilo con un arma apuntando tu cabeza - Quiso brincar sobre mi pero el arma que amenazaba su nuca lo detuvo

- No me creerías si te digo que no planeé nada, pero como me vale mierda tu opinión solo queda decir que, estoy agradecido con el de arriba - dije sin quitar la pequeña sonrisa en mis labios

Uno de los hombres que estaban con Tae se apresuró a coger a Lee bruscamente del brazo y retenerlo hasta que Tae dio la orden de que lo llevasen al sótano y lo ataran. Cuando todos salieron se apresuró hacia mi y unió nuestros labios.

Ambos estábamos deseosos por los toques y caricias del otro, Tae me levanto colocando sus manos en mi trasero mitras yo tomaba su cintura con mis piernas y a la vez llevaba mis manos a su nuca y cuello para profundizar el beso. Pero claro como era de esperarse las cosas no acabaron ahí, aún conmigo en sus brazos Tae se las ingenio para cerrar la puerta con seguro y luego tirar todo lo que había en el escritorio para acostarme lentamente sobre este.

De repente empezaba a hacer mucha calor y no creíamos necesitar ropa, así que una vez los dos estuvimos desnudos, Tae se dedicó a masturbar mi pene erecto mientras mordía levemente mi cuello y pecho.

- Taehyung Aahh~ más... Rápido - logré decir entre gemidos

Él como buen chico que es empezó a masturbarme con más salvajismo hasta que me vine en sus manos; repentinamente Tae me bajo del escritorio para presionar mi pecho contra el mismo dejando mi trasero expuesto, agarró mis manos y las puso detrás de mí espalda para agarrarlas con sus manos, sabía lo que quería hacer, quería jugar rudo y yo obvio no me opuse, Tae entró en mi de una sola estocada sin necesidad de prepararme y es que digo en estos tres mese hemos sido demasiados activos en el sexo, todavía no se cómo no he quedado embarazado.

Es porque no eres mujer, ni tienes óvulos y menos vagina Jeon

Bueno ahí está la respuesta; Tae me hizo volver a la realidad cuando de repente y sin avisar empezó a dar fuertes estocadas, eso hizo que un gemido saliera de parte de ambos, Mi hyung siguió en lo suyo durante no sé cuánto tiempo, después de que se viniera dentro de mi me soltó las manos y me cargó hasta el baño de la oficina  para que ambos nos diéramos un largo y merecido descanso.