실망

자기 개선

-superación personal.

Aquella noche en la que te fui a buscar, fui recibido por una sonrisa que se borró al verme. Tu hermana me hizo pasar pero su mirada se encontraba fija en el piso. Los minutos pasaban y con ellos la incomodidad en la atmósfera aumentaba. Sabía que no estabas en casa pero no sueles salir por mucho tiempo, sin embargo, fue diferente esta vez, traté de no alarmarme y esperé por dos horas.

Sorn ya no se encontraba ahí,  se fue sin poder mirarme a la cara. No lo comprendí hasta que pronto la puerta fue abierta con brusquedad. Vi como lo besabas con deseo, a quien tantas veces me llamó amigo. Sentí escalofríos y asco por aquella escena, ni siquiera se dieron cuenta de mi presencia, esperé que pasaran por mi lado para dirigirme a la salida.

No comprendía nada, mi mente no quería procesar lo que pasaba. Corrí como si el dolor se fuera a borrar por hacerlo, pero no fue así, el dolor siguió ahí, siendo cada vez más insoportable. La impresión y la decepción me estaban devastando.

Me detuve en el parque donde fue nuestra tercera cita, donde te arrodillaste a pesar de no ser necesario y me pediste que fuera tu novio. Algo se estremeció en mi interior, ahí todas las imágenes llegaron a mi mente. Estabas con alguien después de tan solo dos días de nuestro primer aniversario, donde me juraste que algún día viviríamos juntos y nos casaríamos simbólicamente, que conoceríamos París o cualquier lugar donde solo estuviéramos nosotros dos. Y realmente pudo haber sido así, si no fuera porque decidiste entregarte a alguien antes que unir nuestras almas. Al menos tengo el consuelo que no fui solo un juguete sexual, jugaste con mi corazón, sinceramente no sé qué es peor.

Caminando por una calle obscura sentí una mano posicionarse suavemente en mi hombro. Esperaba que fueras tú, que estúpido de mi parte, ni siquiera viste mis lágrimas, cómo verías mis ilusiones rompiéndose cruelmente.

Al girarme vi sus ojos expectantes, sentí sus brazos alrededor de mi cuello al igual que su respiración, acepté su calor. No me había dado cuenta del ambiente frío hasta que puso su chaqueta sobre mis hombros.

"Puede que hayas malinterpretado todo" escuchaba como trataba inútilmente de excusarte, sus nervios aumentaron al ver como las lagrimas salían y esta vez yo fui quien lo abracé mientras un leve "yo los vi" salió de mi boca, sus brazos se tensaron y me acercaron a él, pero me separé por mucho que lo necesitaba, te necesitaba.

No podía dejar que su sonrisa se borrara por tu culpa, así como la mía por el desengaño de mi fantasía. No diré que era demasiado bueno para ser verdad, porque no fue así. Te di mi amor y eso te enfermó, ¿por eso buscaste sus brazos? No, no quiero pensar que fue mi culpa. Te di todo lo que tenía, puede que haya sido muy poco para ti o quizás tú lo fuiste para mí.

Encerrado en mi mente sentí sus labios fríos sobre la fina tela de mi camisa. Supe que entendía lo que sentía, que él realmente estaba ahí para mi, que no estaba solo, que en único momento de mi vida en el que me sentí solo fue a tu lado, cuando cancelabas nuestros planes por asuntos de último momento ¿Esos asuntos era irte a revolcar con él? ¿Era el único que no sabía? Debí haberme visto como un idiota, ¿no es así?

¿Por qué no fui suficiente para ti? ¿Por qué no cortar las cosas y ya? Ya ni me esfuerzo en buscar una respuesta a las tantas preguntas que pasaron por mi mente en ese momento.

Si me engañaste, si tú no me valoraste en ese entonces, si tú fuiste quien me dejo caer en pedazos cuando entraste por esa puerta besando a Taeyong y probablemente luego teniendo sexo ¿Por qué me prohíbes amar a Jaehyun? No tienes el derecho. Si solo él me amó cuando nadie, ni siquiera tú, me notó o valoró.

Yuta, te amé y aprecié, pero no lo viste, solo dejaste de lado mis sentimientos como si no importaran. Ahora espero que puedas ser feliz con él, porque quiero pensar que lo que hiciste fue por amor.

Y por mi parte, podré dormir tranquilamente sabiendo que Jaehyun estará esperándome con su bella sonrisa al inicio de cada día, porque dentro de dos semanas nos casaremos.

¿Esperabas que ésta fuera una invitación? Estás muy equivocado. Solo quería decirte lo que sentí y que lo de nosotros dos, los momentos a tu lado, ni siquiera quedaran los recuerdos.