Épica batalla de dioses contra titanes, marcada por la ambición, dolor y el sacrificio de cada uno de los que participaron en ella.
Pero, ¿Cómo fue que comenzó esta épica batalla, que marcaría el fin de una era y el comienzo de otra?
Los invito a l...
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Jápeto, se encontraba en la entrada del templo, recostado sobre unos grandes cojines. Estaba acompañado de unas ninfas que ponían racimos de uva en su boca y le extendían copas llenas de vino y ambrosía.
En eso vio a uno de sus hermanos titanes correr hacia él, sujetaba su hombro ejerciendo presión. Cuando pasó junto a él, lo llamó deteniendo su carrera. —¿A dónde vas con tanta prisa? —preguntó Jápeto. —¡Necesito hablar con Cronos urgentemente, es sobre su hijo! —respondió agitadamente.
Jápeto miró la herida en su hombro. —Por qué no te calmas y me cuentas lo que hizo ese mocoso, mientras vamos con Cronos. El asintió.
Sala del trono...
Cronos, se encontraba caminando de un lado a otro. Mantenía su mirada baja y manos en su espalda. Pensaba de manera inquieta en lo que sucedió hace unos momentos con Nyx y su hijo. «¿En verdad fue ella quién provocó eso? Puede ser, ella es muy poderosa, incluso más poderosa que yo, pero su naturaleza no es la de dañar ¡Y exterminó un bosque entero! ¡¿Qué fue lo que sucedió?!» se preguntaba Cronos tirando de sus plateados cabellos con desesperación.
En eso entraron Jápeto y otro titán de nombre océano. —¡Cronos! —lo llamó Jápeto. —¡¿Qué es lo que quieres?! No tengo tiempo para tus venenosas palabras —dijo Cronos con brusquedad.
—Es sobre tu hijo, pero no seré yo quien lo diga, sino él, que vio lo que pasó —dijo apuntando a océano.
Cronos lo miró con atención. —¿Estuviste ahí? —preguntó. El asintió, mostrando una Herida en su hombro donde brotaba icor. —Dime ¡¿Quién hizo eso?! y ¡¿Cómo paso?! —preguntó acercándose a él. Océano respiró profundo y habló. —Fue tu hijo, Aidoneus...
Océano platicó todo lo que vio mientras Cronos lo escuchaba atentamente. Con cada palabra, sus puños se cerraban con fuerza, parecía que iban a sangrar en cualquier momento. Cuando terminó de relatar lo ocurrido, Cronos salió del salón hecho una furia, con sus ojos inyectados en sangre. Jápeto miró la escena sonriendo con gran satisfacción.
Aposentos principales...
Rea, se encontraba mirando el atardecer desde una ventana, el sol había vuelto a la normalidad brindado su luz, pero no dejaba de pensar en su pequeño, sobaba su pecho en un intento de calmar el mal presentimiento que la albergaba. En ese instante, sintió a sus espaldas la presencia de Cronos cargada de ira, respiró profundo y lo encaró tranquilamente.
—¿Qué ocurre Cronos? —le preguntó manteniendo la calma. Él la miró fijamente. —Te preguntaré algo mujer y quiero que seas completamente honesta conmigo —Rea asintió. —¿Las moiras en verdad te dijeron que esté hijo no sería quien usurpase mi trono? —preguntó Cronos con calma aunque por dentro hirviera de ira.
Rea al oír la pregunta, sintió su corazón latir rápidamente. —¿Por qué lo preguntas? —vaciló evadiendo la pregunta, pero lamentablemente a Cronos se le agotaba la paciencia.
