END OF THE WORLD ━ MINSUNG

¡ t w o !

han jisung; cuatro días antes

Limpió las lágrimas que caían por sus mejillas con fuerza antes de contestar la llamada entrante en su celular. Desde el anuncio realizado por el gobierno, sólo se había dedicado a llorar y asustarse. Quizás todo era una mala broma, una estrategia de los opositores políticos, una forma de imponerse frente a la población.

Pero la verdad era otra, y por más que Jisung quisiera evadirla con ideas distintas, no podía dejar de pensar en eso. 

Al contestar el teléfono, lo único que logró oír del otro lado de la línea fueron gritos y quejas. Jisung no entendía absolutamente nada, pero sólo sentía ganas de seguir llorando por la situación en la que se encontraba, él, sus amigos, las personas que quería; el mundo en general.

—Jisung —se escuchó después de un rato, la voz sonaba cansada y preocupada.

—Binnie, ¿pasó algo? ¿Estás bien? ¿Felix está bien?

—Sí, creo que si, estamos bien —una pausa prolongada entre Han y Seo dio lugar a una pelea del otro lado de la línea, Jisung dedujo por las voces que escuchaba que no era Felix con quien peleaba, tenía que ser alguien más.

—¿Todo bien allá?

Al parecer, esa pregunta devolvió a Changbin a la conversación telefónica que mantenía con Jisung.

—Si, no tanto. Creo que deberías venir, o él ir hacia allá, necesitan estar juntos.

No era necesario que Seo aclarase de quien hablaba, para ambos estaba más que claro quién era él. Ahora, Jisung entendía con quien había estado peleando el mayor. 

—No puedo salir, no hay forma de que llegue a ustedes, los transportes están cerrados.

—Minho va a ir hacia vos.

—Pero... ¡No puede hacerlo! No puede salir y arriesgarse, y menos por mí.

—Va a ir a buscarte y estarán juntos cuando suceda.

Changbin tampoco aclaró que era lo que iba a suceder; no era necesario. La garganta de Jisung se cerró y sintió que era cuestión de segundos para que volviese a llorar.

—Mañana Minho va a salir y van a encontrarse a la noche. Pueden quedarse en tu departamento o venir al nuestro. Lo importante es que estén juntos. 

Jisung suspiró, la presión comenzaba a descenderle y sus ojos amenazaban con cerrarse en cualquier momento.

—Bien, está bien.