Es ridículo pensar como la vida puede cambiar al atardecer,
como el presente se vuelve el pasado y las anécdotas de ayer se vuelven historia.Pensamientos irracionales que pueden convertirse en racionales de un día para otro.
Seres queridos que están ahora y luego se van.
Príncipes encantados que se vuelven bestias que llegan a matar.
Olores que se quedan plasmados en tu cabeza que siempre que vuelvan a tu nariz recordarás.
Es ridículo pensar como el mundo puede cambiar en un chasquido, y como ahora pagamos las consecuencias de lo ocurrido.