Estábamos de nuevo en el balcón de la casa del árbol, Niall había sacado dos sillas en las que nos sentamos, ambos mirábamos hacia la nada, hasta que por fin rompí el silencio.
-Y bien, ¿Cuál es tu explicación? Dije con un tono seco.
-Vi lo que hiciste, eres muy fuerte y muy veloz, demasiado para alguien normal… ¿No eres humano verdad?
Niall no me respondió, continuaba viendo hacia la nada.
-Y eso que hiciste cuando la rama caía sobre nosotros fue…
-Yo no lo hice. Niall fijó su mirada en mí.
-Lo hiciste tú Wildy-
-¿Qué? ¿A qué te refieres? Dije sin poder entender
-Tú… eres como yo, tienes poderes, dones llámalos como quiera. Dijo Niall y pude notar cierto tono de molestia en su voz.
-¡Puedes hacer cosas que las personas normales no pueden!
-No, eso no es posible ¿Yo?
-Si Wildy, tú, tú fuiste la que nos teletransporto debajo de la casa del árbol, tú fuiste la que me lanzo hacia el árbol, tus poderes son asombrosos, ni siquiera me tuviste que tocar.
Lo que Niall decía sonaba casi disparatado, pero tenía sentido. La fuerza con la que lo golpee, como el pesado tronco se había partido en dos al tocarme, incluso la parte de cuando lo lance hacia el árbol sin tocarlo tenía sentido. Todo sonaba jodidamente estúpido pero era verdad.
-Hace apenas unas horas no sabía quién era y ahora me dices que soy una especie de mutante o extraterrestre? Dije mientras observaba horrorizada mis manos, mis brazos en busca de algo anormal, en ese momento desee tanto poder recobrar la memoria.
-No, no. Respondió Niall riendo divertidamente
-Somos humanos Wildy, solo que como te dije, podemos hacer cosas que las personas normales no pueden. En algunos las habilidades se muestran desde pequeños, desde su nacimiento prácticamente, en otros se manifiestan cuando son un poco más grandes, o más o menos a los 14 o 15 años en situaciones de estrés o algo parecido.
-Es por eso que me golpeaste, para que pudiera mostrar mis ¿Poderes? ¿Por qué no me lo explicaste desde un principio? Quizá yo hubiese intentado algo sin necesidad que me asustaras o enfadaras tanto.
-Si lo pude haber hecho… pero no hubiese sido tan divertido. Dijo Niall riendo y llevando ambas manos hacia su nuca.
Lo despreocupado que él era me parecía muy gracioso, hablaba de todo como si fuera más simple, no parecía tomar las cosas seriamente. Era muy agradable.
-Así que tu provocaste que esa rama callera sobre nosotros. Dije arqueando mis cejas.
-No yo no lo hice. Respondió ocultando una sonrisa.
-¡Ah! Ahora me dirás que no sabías nada de eso.
-Bueno, escuche un leve crujido, supe que la rama caería en cualquier momento y… aproveche la oportunidad.
-¿Y qué hubiera pasado si yo hubiese sido una “Persona normal”?. Pregunte fingiéndome enojada.
-Yo te hubiera salvado nena, o acaso olvidas con quien hablas.
-(Reí) Eres un tonto, sabes.
-Lo sé. Respondió Niall dedicándome una mirada coqueta.
-Y tu mamá ¿Sabe de tus habilidades?
-Si por supuesto. Tengo estas habilidades desde que nací, Maura fue la primera en saberlo.
-Y las personas del pueblo ¿Lo saben también?
-Si ellos lo también lo saben. De hecho todas las personas del pueblo tienen al menos una habilidad especial, otros tienen más, por ejemplo mi mamá tiene poderes curativos y es tan fuerte y veloz como yo a pesar de su edad.
-Oh por cierto, es tarde, ya casi se oscurece, no quiero que Maura se empiece a preocupar, hay muchas cosas que debes saber Wildy, pero te las contare después vamos, hay que irnos.
Niall dio un gran salto desde el balcón de la casa hacia abajo y me invito a que hiciera lo mismo, ni siquiera dudé un poco, inmediatamente salte y caí en sus brazos.
