2# 14 de Septiembre

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Hoy llovió. No debería de extrañarme, porque estamos a comienzos de septiembre. Pero lo hizo, y como soy una incompetente, no me había traído el paraguas. La vida puede ser cruel. Mi madre me dejó en la puerta del colegio, y salí corriendo. Hoy llegaba tarde. En la entrada del colegio, no había nadie, salvó el señor Perkins. El señor Perkins es el bedel del instituto, y honestamente, nadie sabe de dónde viene, ni cuánto tiempo lleva aquí. Lo único que sabemos es que tiene un perro, tres gatos, y que vive en un cobertizo cercano al colegio. Eso si que es vida.
Entre rápido, y fui directa a mi clase. Por los pasillos se podían ver a otros chicos que habían llegado atrasados, y aunque esto pueda sonar malvado, me alegré de no ser la única en llegar tarde. No me gusta sentirme diferente.
Cuando llegué a mi puerta, en la sala de redacción, no fui muy delicada al abrirla. Creo que tendría que haber sido sutil, porque al entrar, lo que ha mi me parecía una gran multitud de alumnos me miraron con expresiones grotescas en sus rostros, no mucho mejores que la de la profesora Peacock.
Sabes, hoy era la primera clase de redacción del curso. Comenzamos las clases la semana pasada. Para ti, seguro no es nada importante. Pero para mi, este comienzo de curso significa que sólo me queda un año antes de conseguir mi libertad. Adiós instituto, hola mundo.
Con la cara esperanzada, busqué un sitio bueno en el que estar todo el año. Miré en todas direcciones, pero sólo quedaba un lugar libre. Al lado de Ben Jordan, el chico nuevo. No me hacia especial ilusión, pero aún así me senté.
-Bueno, chicos, ahora que estamos todos, me gustaría presentarme. Soy la profesora Peacock, y este año voy a intentar enseñaros a escribir. Y con escribir, no me refiero a esa vulgaridad de abreviar mil palabras por minuto. No, me refiero a expresaros, a transmitir vuestro mensaje al mundo.
Creo que no es necesario decir que la única cosa que este grupo de jóvenes obligados a juntarse en una clase no tenía nada que transmitir, y mucho menos quería ponerse a hablar de ideas y mensajes. Es decir, ¿porqué siquiera nos abrigan a tomar esta clase? Con la cantidad de alumnos que quedarían despiertos para el final de la hora, bien podría ser la clase del sueño. Pero eso a Peacock le daba igual, por lo que continuó con su discurso.
-Ahora, me gustaría que mirarais a la persona que está a vuestro lado.-yo miré a Ben. El me miró a mi. No, no hubieron chispas de amor flotando en el aire ni nada. Sólo dos caras de aburrimiento mostrándose miradas poco interesadas.-Chicos, esa persona a la que habéis mirado será vuestra compañera de proyecto. Juntos, tendréis que redactar una historia antes del final de curso, que me convezca. La historia valdrá la mayor parte de vuestra nota, por lo que esperó que pongáis mucho empeño en ella. Ahora, abrir vuestro libro por la primera página, por favor. ¿Susan, pudes leer, por favor?
El resto de la clase fue bastante monótona. Pasé bastante tiempo pensando en el proyecto. Honestamente, había cosas más importantes que quería hacer este año, como, no se, tirarme de un precipicio o ir a un museo. Mucho más interesantes que un trabajo con el nuevo. No es que tuviera nada encontra de Ben. La verdad, parecía muy majo. No era hablador, y no le había visto con nadie. Creo qué ni siquiera le había visto bien hasta hoy. Quizás es porque Ben es uno de esos chicos que se pueden caracterizar como....espeluznantes. Tez pálida, ojos negros, y no muy alegre. Nunca le había visto sonreír. Sinónimo de diversión.
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Pasé el resto del día sola. Desde hacer un tiempo, he convertido la soledad en un modo de vida. Paso el tiempo en la bliblioteca, estudiando. O algunas veces en los baños, todo depende del día. Antes extrañaba la compraría de la gente, echaba en falta su presencia. Pero me acabe acostumbrando, y se puede decir que ahora me gusta. Las clases fluyen, las comidas pasan, al igual que el tiempo.
Al final de las clases ví a Hayle hablando con Kara Seilors. Recuerdo cuando éramos mejores amigas. Nos quedábamos apoyadas en la puerta de la entrada, viendo a Kara y al resto del grupo de porristas salir, mientras nos reíamos de ellas. Nosotras dos contra el mundo.
Pero eso era antes. Desde Jane, nunca ha vuelto a ser lo mismo.
Querido estraño, estaba aprovechando unos minutos libre para escribirte esto. Ahora me tengo que ir a estudiar.
Por favor, no me olvides.

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⏰ Última actualización: Jan 24, 2015 ⏰

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Su nombre era Jane.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora