Capítulo 100

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Song Ci no estaba preocupado en absoluto. Él creía que Wen Changchu tenía la capacidad de provocar la caída del Estado de Lan.

Lo único que le daba dolor de cabeza eran todas esas bonitas concubinas que venían en todos los tamaños en la residencia del general. Este general grosero era muy aficionado a la bebida y el mujeriego. Incluso diez dedos no fueron suficientes para contar la cantidad de esposas y concubinas que tenía en la casa. Todas esas charlas. Molesto.

En el momento en que Song Ci entrara a la casa, habría concubinas acercándose a él y buscándolo a tientas. Pero fue un poco especial hoy.

Las concubinas alzaron la cabeza y miraron con los ojos muy abiertos mientras esperaban mucho tiempo el regreso del general. Pero entonces, el general que regresaba tenía un invitado con él cuando las puertas de la entrada principal finalmente se abrieron.

Esas ruidosas concubinas se asustaron instantáneamente en silencio. Bajaron la cabeza y se retiraron a un lado.

La residencia del general siempre había observado la propiedad. Además, el que vino no era otro que el infame primer ministro traidor del Estado de Lan.

Los ojos de Rong Bai estaban casi cegados por la vista de todo este jardín de hermosas flores en plena floración. Levantó las cejas ligeramente y miró a Song Ci, solo para ver que Song Ci decía con una expresión imperturbable: “Nadie puede permanecer en el patio delantero. Todos ustedes van al patio trasero.

Este era un tono acostumbrado a mandar a otros.

Considerando que el general era un hombre de mal genio, Song Ci "naturalmente" perdió los estribos. Les he estado malcriando demasiado. Cada una de ustedes será castigada copiando las 'Instrucciones para las mujeres' tres veces. ¡No tienes permitido entrar al patio delantero hasta que hayas terminado de copiarlo todo!

Ninguna de las concubinas se atrevió a llorar y a conmocionarse.

Lo único fue que Song Ci no se dio cuenta de que todavía sostenía la mano del primer ministro Rong mientras decía todas esas palabras.

Y así, al día siguiente, la noticia de que el General había llevado al Primer Ministro de su mano de regreso a su propia residencia, y que este último incluso había pasado la noche, se extendió como un incendio forestal. Todos lamentaron cómo el Primer Ministro y el General podrían parecer adversarios irreconciliables en la superficie, pero en verdad, el primer ministro ya había sido abrumado por la virilidad del General y estaba dispuesto a ser su amante masculino.

Song Ci no sabía si llorar o reír cuando se enteró de esto. Él dijo: "Tonterías".

En realidad, no estaba tan lejos de la verdad.

Nadie realmente podía interferir cuando Rong Bai se abrió paso rápidamente en la residencia del general para vivir. Algunas personas aprovecharon la oportunidad para presentar conmemoraciones repetidamente a Wen Changchu. Pero Wen Changchu solo quería vomitar sangre cada vez que veía esos montones de peticiones. Ni siquiera leyó ninguno de ellos.

Wen Changchu también cumplió con su deber, arrastrando su cuerpo roto y miserable para atormentarse aún más. Detuvo las sesiones de la corte de la mañana durante más de diez días seguidos, abandonó la medicina y estuvo en el palacio todo el día.

En cuanto a las bellezas en su harén, no llegó a tocar ni siquiera uno de sus dedos. En cambio, fue Zhu Yishu quien demostró ser una monstruosidad todo el tiempo. Cada vez que Wen Changchu lo veía, la sangre que tosía aumentaba.

De hecho, Wen Changchu no tuvo que hacer un esfuerzo consciente para hacer nada. Todo lo que tenía que hacer era acelerar su propia muerte. Como el monarca no tenía heredero, estallaría una poderosa batalla por el trono después de su muerte. El poder en el país se dividiría en varias facciones. Con contiendas internas continuas e invasiones extranjeras sin cesar, el Estado de Lan se desintegraría por completo.

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