Conocí a Luke en el colegio, nos hicimos mejores amigos cuando él me habló diciéndome que le gustaba mi camiseta de Nirvana.
Así empezó todo.
A los 15 años me confesó que estaba enamorado de mi, y me acuerdo de ese momento perfectamente.
*Flashback* .
-Rose, tengo que decirte algo.-Dijo mientras se mordia el labio
-Decime, ¿qué pasa?
-Hmm...hace tiempo que ...es difícil decirlo...estoy enamorado de vos -Dijo aganchando la cabeza.
-¿Encerio?- Dije sonrojada.-Luke, no tengas vergüenza...A mi también me gustas.
Él levantó su mirada hacia la mía, no dijo nada, sólo me miró y me besó.
*Fin del flashback*.Y hoy sería el último día que lo iba a ver, ya que él se mudaba a otro lugar, lejos de mí.
-Rose, ¿en qué piensas?- me llamó Luke, sacandome de mis pensamientos.
-Estaba pensando el día que nos conocimos, cuando me contaste que yo te gustaba- Él se acercó por atrás, me abrazó la cintura y apoyó su cabeza en mi hombro.
- Te amo, ahora más que nunca.- Me dio la vuelta para poder mirarme a los ojos. -Vamos a fuera, ya van a empezar los fuegos artificiales.
Nos sentamos en un banco a esperar que ya sea navidad, sería la última navidad qué pasaría con Luke.
-¿Me podes prometer una cosa?-Dije mirando sus hermosos ojos celestes.
-Si mi amor, ¿Qué cosa?- Me agarró las manos
-Nunca me olvides.
-Nunca lo voy a hacer, te amo.
Y nos dimos un beso lento y lleno de amor, mientras que en el cielo, ya estaban los fuegos artificiales.
-Feliz navidad Luke, te amo.
-Felíz navidad Rose, te amo más.