Capitulo 2: El príncipe eterno y la señorita pureza

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- Me parece una falta total de respeto - dijo con ímpetu

- Estoy totalmente de acuerdo - respondí disgustada

- ¿Cómo es posible que se haya acabado el jugo de manzana? Señora Vicente - preguntó aún más furiosa

- Lo lamento, pero ya serví todo el jugo de manzana - respondió la señora con tono tranquilo

- Bueno, ya qué - le respondió y cogió una caja de jugo de naranja - no puedo creer que se acabaran el jugo de manzana

- ¿Qué tiene de malo el de naranja? - pregunté mientras nos sentabamos en una mesa del comedor de la escuela

- Nada, pero prefiero el de manzana, ya me conoces

- Sí, eres muy persistente - me reí

- ¿Qué tal? señoritas - sentí que alguien me tomó del hombro, conocía ese aroma «Definitivamente es Eric»

- Miren quien se digno a aparecer después de medio día - dijo Katherine en tono irónico

- Estuve muy ocupado, tuve que...

- ¡¿DE DONDE SACASTE ESO?! - chilló la morena

- ¿Qué cosa? - preguntó Eric confundido

- Ese jugo de manzana - señaló la cajita con la imagen de una jugosa manzana

- Me la dió Damián, no la quería y...

- ¡Agh! Mejor me voy a comprar uno de la máquina, ya vuelvo - se de refunfuñando

- ¿Y dónde has estado todo el día? Nos tuviste preocupados, ni siquiera nos contestabas los mensajes - dije mientras novias las manos por todos lados

- Cálmate, estuve con mi mamá en el hospital - se rascó la cabeza

- No te creo

- ¿Qué? ¿Por qué? - preguntó extrañado

- Porque te conozco y nos hubieras avisado, es más ni siquiera hubieras vuelto a la escuela

Conozco muy bien a Eric y por más que parezca ser un chico despistado y despreocupado era muy abnegado con su familia. El primer día que llegó a la escuela vino con su madre, ella estaba muy contenta pero al se le veía incómodo y nervioso, Damián se le acercó en el almuerzo y le preguntó si quería sentarse con nosotros y el respondió con un simple si y desde ahí somos inseparables. Él sabe muchas cosas sobre mi, le tengo demasiada confianza, es de las pocas personas que si le cuentas algo personal te escuchará y no te juzgará y te aconsejará con toda la sinceridad del mundo.

- ¿Por qué no viniste? - preguntó ya un poco estresada

- No puros decirte - miró a todos lados

- ¡Ay! Pero tú siempre me cuestas todo - hice un puchero

- De acuerdo, pero no le digas a nadie, sino le digo a Damián...

- ¿Qué me dirás? - preguntó con una sonrisa pícara «mi corazón se detuvo por un instante, con temor a que Eric continuara con la frase, estaba claro que sería "... que te gusta" »

- Nada, idioteces mías, ¿a dónde te fuiste? me dijiste que vendrías a comer con nosotros - cambió de tema de inmediato lo cual agradecí mucho

- Estaba ocupado con lo que me pediste - se sentó a mi costado - oye, ¿has cambiado de perfume? - me preguntó con cara de intriga y una leve sonrisa

- Este... no, ¿por qué? «seguramente parezco un tomate»

- Es que huele muy bien, más fuerte d Elo normal - comentó algo confundido

Close to you // Cerca de ti (Ondreaz López)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora