Cuando el odio se convierte en amor || Larry Stylinson AU|| [Traducción]

Capítulo 23 ~ Oh, mierda

LOUIS POV

Harry abrió la puerta del asiento detrás de mí, empujándome hacia abajo en el colchón suave y se cernió sobre mi cuerpo. De alguna manera, se las arregló para cerrar la puerta detrás de él, y tuve que doblar mis piernas para que no chocaran con la parte delantera del auto. Todo su cuerpo se apretó fuertemente contra el mio entre mis piernas abiertas. No iba a mentir, me gustaba esta posición.

Sus labios estaban en los míos dentro de un segundo, y juntos chocaban febrilmente contra el otro, creando un lío caliente. Me lamió el labio inferior, con las manos corriendo por mis costados mientras que la mía corría a lo largo de su chaqueta cubierta trasera. Separé mis labios, dejando que su deliciosa lengua se deslizara en mi boca y se arremolinara alrededor de mía.

Era realmente caliente, nuestras respiraciones hacían que las ventanas se empañaran con gotas de sudor en la frente formándose, teniendo en cuenta que estaba en una campera de abrigo con un hombre encima de mí, que estaba prácticamente aplastando mi cuerpo. No es que me importara sin embargo.

"Mierda," dijo cuando hice mis caderas hacia arriba, lo que provocó que nuestras ingles se tocaran una contra la otra. Sabía que esto no iba a ir mucho más allá, porque seamos sinceros; sólo habíamos llegado a un acuerdo de habla hace unos minutos. Sin embargo, eso no significaba que no iba a disfrutar de un poco de fricción.

Él mordisqueó el labio inferior en broma, tirando de la piel entre los dientes suavemente mientras arrastraba su lengua a lo largo de ella. Un pequeño gemido escapó de mis labios, y envolví mis brazos alrededor de su cuerpo más fuerte, presionándolo hacia abajo más cerca de mí por lo que estaba aún más cerca de mi parte superior del cuerpo. Mis manos encontraron sus cabellos rizados, tirando de ellos ligeramente cuando ponía besos con la boca abierta a lo largo de mi mandíbula y hasta mi cuello.

Sus labios besaron mi piel, chupándola para crear un chupetón rojo que sabía que iba a cambiar a un color violeta púrpura después. Incliné mi cabeza un poco para darle un mejor acceso a mi cuello, y al instante se aprovechó de ello, besando todo el camino hasta detrás de mi oreja. "Eres tan hermoso" tarareó, sosteniendo mi cabeza entre sus manos con cautela.

Pronto encontró su camino de regreso a mis labios para besarlos con tanta pasión que casi me llevó al límite. ¿Cómo siquiera tiene este tipo de efecto sobre mí? Pensé que era inmune a tener este tipo de sentimientos por alguien siendo que nunca había experimentado el verdadero amor antes, pero creo que no. Literalmente estaba cayendo por él a pedazos.

Continuamos besándonos por un tiempo, experimentando nuestros cuerpos un poco más lejos de lo que habíamos hecho antes y simplemente disfrutar el hecho de que las cosas habían salido de la manera que lo hicieron.

Eventualmente, sin embargo, nos alejámos y salimos del asiento de atrás, sólo para darnos cuenta de que todavía estaba lloviendo afuera y que nuestras mochilas estaban todas empapadas en el suelo.

Cogí la mía lentamente, mirando por encima para ver a Harry haciendo lo mismo con la suya. Intercambiamos una mirada antes de estallar a carcajadas. Fue agradable porque era la primera vez que en realidad nos reíamos juntos, y definitivamente lo quería experimentar de nuevo en un futuro próximo.

Antes de que pudiera moverme una pulgada, presionó su cuerpo al mío así que mi espalda estaba contra el coche y sus manos estaban a cada lado de mi cabeza. Se inclinó tan cerca que nuestras narices se rozaban entre sí y me susurró con una sonrisa en sus labios: "Sé que estás empapado, pero te llevare a casa igual, ¿bien?"

Asentí con la cabeza, devolviendole la sonrisa sin decir nada. Retrocedió entonces, pero no antes de darme un beso en la frente, lo que provocó que mis mejillas se tiñeran de un rosa claro. Se colgó la mochila al hombro, me dirigí hacia el otro lado del coche y me metí en el asiento del pasajero, esperando a Harry para hacer lo mismo.