Capitulo 1.1

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"Las aves también cantan en el infierno."

Tommy

Y allí me encontraba, corriendo en aquel interminable pasillo oscuro, mi respiración empeoraba con cada paso que yo me atrevía a dar, cansado y con una herida en el lado izquierdo de mi torso, una herida lo suficientemente grande como para que mi mano por si sola pudiese detener por completo el sangrado, las pisadas fuertes y pesadas de aquel que me perseguía retumbaban en el lugar, no quería mirar atrás, no quería saber que tan cerca o lejos estaba esa cosa de mí, finalmente llegué al final del pasillo, y una gran puerta de metal se posaba frente a mí, jadeante la observé, sintiéndome victorioso al fin, inserté la vieja y oxidada llave por el cerrojo, giré y entonces...

Desperté, jadeante con el corazón a mil por hora, exaltado nuevamente, "Otra pesadilla" pensé, ya era la cuarta de esta semana, me hacían despertar con fuertes dolores de cabeza, y ocasionalmente aún más cansado, solo me encontraba yo en cama esta mañana, la luz del sol entraba por la ventana y deslumbraba en mis pies, hacía un cálido día, eran aproximadamente las 8:30 Am.

- Angelina debió haberse ido ya.

Dije para mí mismo mientras nuevamente me tumbaba en mi cama, observando el techo, y pensando que era aquella imagen se repetía una y otra vez en mente, cada vez era lo mismo, pero no lograba entender claramente que significaba; fue entonces que mi teléfono celular comenzó a sonar, una llamada obviamente, con poca gana lo tomé y contesté.

- ¿Sí?

- Oye muerto viviente, se te hace tarde para el trabajo – Dijeron del otro lado.

- Oh, hola Angeline buenos días cariño.

- Hola amor, hablo en serio se te hace tarde, dejé Casa hace media hora y seguías dormido.

- Ya sé, ya sé, ya me voy, nos vemos al rato.

Colgué el teléfono celular y me levanté: luego de vestirme y tomar mi desayuno salí de casa, el pueblo de Damon's se tornaba tan tranquilo como siempre, tengo casi diez años viviendo aquí, antes, vivía en Playa Costa, un pueblo cercano, pero dejé el pueblo luego de que mis padres murieran allí, viví lo que quedaba de mi niñez en Damon's con los padres de mi amigo Joshua, me cuidaron como a su hijo, luego a los 17 comencé a vivir en un departamento que me ayudaron a pagar al comienzo, luego comencé yo solo; actualmente trabajo en una juguetería del pueblo, vivo además con Angelina mi novia, gracias a su padre tenemos esta casa él nos ayudó a pagarla, es una chica que conocí en Italia hace 3 años en un viaje que hice con Joshua, luego de quedarnos 4 meses, Joshua regresó y yo continúe con ella, al cabo de un año decidió venir conmigo pues consiguió puesto en una universidad.

Caminaba por la acera, perdido en mis pensamientos, a paso lento, me sentía algo cansado, pero era porque estaba recién despierto, a lo lejos divisaba una persona saludarme, pero el sol no me dejaba verle con claridad, finalmente luego de unos segundos, logré verle.

- ¡Hola Tom! – Dijo mientras me proporcionaba un beso en la mejilla.

- Hola Pilar, ¿Qué haces por aquí? – Pregunté mientras continuaba caminando, ahora junto a ella.

- Josh me pidió que te buscara, se te hizo tarde para llegar a la juguetería y el Señor Román estaba algo preocupado.

- ¡Ah eso! Lo siento es que se me hizo algo tarde.

- En fin da igual, hoy es mi día libre así que pensé en pasar a saludarlos, al llegar yo no estabas tú y Josh me dijo que si pudiese pasara por tu casa.

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