SOY UN SÚCUBO!

CAPÍTULO 5 - DE REPENTE, TENGO UN COMPAÑERO DE CUARTO SÚCUBO

"¡Vamos, relájate!" Mio flota frente a mí mientras caminamos a casa. "Nadie se dio cuenta, ¡y te divertiste!"

"Nunca he estado más avergonzado en mi vida".

Mis pantalones y ropa interior todavía están empapados, y hace mucho que se han enfriado. Afortunadamente, llega el verano. Incluso con la caída del sol, el ambiente cálido reduce mi ropa mojada como una molestia pasable.

"Entonces ... sobre cambiarme de nuevo ..."

Mio gime y flota sobre sus pies a mi lado. No es frecuente que la vea caminar. Me pregunto si sus alas alguna vez se cansan. Ya que soy un súcubo, ¿eso significa que también puedo volar?

"Te digo que no puedo. Para empezar, no soy tan poderoso.

"El fragmento que tenías", recuerdo el cristal que me mostró en la mañana. "¿Cómo conseguimos más de esos?"

"Son de mi mundo, a los que no podemos volver sin dicho cristal. Lo que significa que estoy realmente atrapado aquí.

Espera un minuto...

Ella es una súcubo después de todo. Una criatura que no creía que existiera hasta que apareció ante mí. Es natural que ella viniera de otro mundo. ¿No significa eso que también hay un montón de otros mundos por ahí?

"¿No te importa tratar de regresar?"

"¿Por qué habría?" Pasamos junto a un par de corredores y Mio les silba. El jinete en la parte de atrás se da vuelta y me da una mirada sucia. "Este mundo es muchísimo mejor. Lleno de 𝓱𝓸𝓻𝓷𝔂 𝓯𝓾𝓬𝓴𝓼 solo buscando meterlo ".

"Hah ... siempre y cuando no provoques ningún problema importante". Ahora que lo pienso ... si Mio vino de otro mundo, eso no significa ... "¿Podría haber otros como tú que vinieron a este mundo con un fragmento?"

"Posiblemente. Todavía no he visto a ninguna de mis hermanas.

Cuando llegamos al frente de mi casa, me doy cuenta de que Mio me ha estado siguiendo todo el camino. "No me digas, ¿vas a vivir conmigo?"

Mio vuela por los aires, junta las manos y se pone los ojos de cachorrito más grandes posibles. ¡Pwetty pwease! Me comportaré."

"Multa. Necesito vigilarte de cerca de todos modos.

"¡Hurra! Yo llamo a la cama. Ella vuela hasta el segundo piso y entra desde el balcón.

"Uuu ... va a tener que establecer algunas reglas básicas".

Cuando entro, el olor agrio del curry de katsu me llena la nariz. El curry de Hatsumi es lo único que me hace tolerar toda su crianza. Es tan bueno que probablemente podría traer la paz mundial si todos se sentaran y se la comieran.

"Hermana, estoy en casa". La llamo desde el vestíbulo.

"¡Ah! ¡Bienvenido a casa, Saeko! Estoy haciendo tu favorito para la cena.

Mientras me quito los zapatos, noto una cola balanceándose hacia adelante y hacia atrás entre mis piernas. Me paso la mano por el pelo y dos cuernos lo detienen. "¡¿Eh ?!"

"¿Qué pasa?" Hatsumi pregunta, viniendo hacia el vestíbulo.

"¡NADA! Estaré abajo en un minuto. Corro escaleras arriba antes de que ella pueda verme y cerrar la puerta detrás de mí una vez que entro en mi habitación.

Mio está acostado en mi cama leyendo un manga. Ella levanta la vista y dice: "Oye, este es realmente bueno. Sin embargo, creo que el protagonista es un poco tonto. ¿Cómo quién, voluntariamente, se deja atropellar por un camión pensando que entrarían en otro mundo?

"Necesito que lances otro hechizo para eliminar mis características de súcubo de nuevo".

Ella suspira, agita una mano frente a mí y chasquea el dedo. Los cuernos, las alas y la cola desaparecen. Mi cabello se retira a su color corto y negro normal. He vuelto a parecerme a mi ser normal.

Mirando hacia mi cuerpo, hay un montículo abultado que bloquea la vista de mis pies. "Uh. 𝓢𝓱𝓲𝓽 ... la toalla ... "

"Oye, oye. ¿Qué es ese olor abajo? ¿Tienes una fiesta? Mio se dirige hacia la puerta, pero la alejo de ella y la empujo hacia la cama. "Lo que da - oh, ¿tal vez quieres un poco de mí? Teehee ♡ ".

"¡Como si! No te atrevas a bajar las escaleras. Puedes vivir conmigo, pero no puedo permitir que Hatsumi se entere de ti. O esto . Le hago un gesto a mi cuerpo. Me sumerjo en mi armario para buscar otra toalla alrededor de mi pecho y me pongo un suéter ligero encima.

Mio comienza a deprimirse. "Aww, ¡pero huele tan bien!"

"¿No has tenido suficiente fiesta por un día?"

"Incluso el súcubo puede disfrutar de los placeres de una comida física".

Bueno, ella escondió mis partes de súcubo. "Te guardaré algunas sobras para más tarde. Solo quédate aquí hasta que regrese.

"¡Hurra! ¡Eres la mejor!" Lanza sus brazos sobre mí, presionando sus senos contra los míos.

Mio es sorprendentemente linda por lo grosera que es. Si las cosas hubieran resultado un poco diferentes, tal vez habría aceptado tener sexo con ella. Hacerlo me habría impedido meterme en este lío para empezar ... Pero no tiene sentido demorarse ahora.

"Está bien, bájate de mí ya. Vas a soltar la toalla y... ¡¿nnnph ?! " Los suaves labios se presionan contra los míos, y siento una lengua resbaladiza deslizarse dentro de mi boca.

¿Es esto ... un beso? ¡Ella se adelantó y tomó mi primer beso así!

Mi mente se vuelve borrosa mientras su lengua juega con la mía. Ella deja que su saliva gotee por mi garganta, y felizmente lo acepto. Sabe tan bien que me está volviendo loco.

"Haaahhh— ah ♡!" Mio se aleja dejando un rastro de saliva que todavía nos conecta. Saca la lengua, guiña un ojo y dice: "Incluso dos súcubos pueden divertirse un poco. Tal vez te lo enseñe esta noche, ahora que estás más dispuesto.

Me limpio la baba de la boca y salgo corriendo de la habitación. Mi corazón está latiendo con fuerza, cientos de pensamientos están corriendo por mi mente. Cosas como...

Por qué ella hizo eso?

¿Soy un hombre ahora? No claro que no. Eso es tonto.

¿Qué quiso decir ella esta noche?

Solo puede significar ... una cosa ... ¿verdad?

"¡Saeko! ¡La cena está lista!"

"¡Ya voy!" Corro escaleras abajo al vestíbulo primero para buscar la toalla. Paso unos buenos cinco minutos mirando alrededor, pero no se ve por ningún lado. Eso es imposible. Tenía que haber caído entre la puerta y mi habitación.

"Eso no puede ser ..." Me digo en voz alta. ¿No hay forma de que me haya perdido la toalla? ¿Hatsumi lo tomó? Si lo hiciera, podría sospechar algo.

Trago.

Entro en la cocina escaneando tanto el comedor como la sala de estar, pero no puedo ver la toalla en ningún lado.

"¿En busca de algo?" Hatsumi pregunta desde la estufa. Ella trae dos platos de curry a la mesa. El delicioso olor a pollo frito y la vista del daikon en escabeche en cubos es suficiente para hacerme abandonar mi objetivo.

"N-nada". Le dije a ella.

Hatsumi se sienta frente a mí y sonríe. "Itadakimasu".

"¡Gracias por la comida, hermanita!"

"Jeje. Cualquier cosa por mi pequeño Saeko.