Our love in time - Lee Jooheon 2°Parte

25. Mi delirio

Probablemente la tarde había caído, pero no parecía importarme el tiempo, ni el día ni siquiera pensar en que estaba en lo más alto de un edificio, solo podía pensar en una cosa en Lee Jooheon y en lo mucho que su tacto estaba volviéndome loca, mi cuerpo podía comenzar a sentir la piel desnuda de mi cordura muy cerca de la mía que se tensaba un poco con cada beso que recibía por parte de él, desde mi cintura hasta la punta de mis labios.

-Eres todo lo que necesito – dijo acariciando mi mejilla mientras tomaba mi cintura y me acomodaba mas cerca de el, logrando que un pequeño gemido saliera de mis labios por su tacto – Lo que siempre necesite – hablo atrapando mis labios de nuevo y moviendo su cuerpo con delicadeza al mismo ritmo que el mío y olvidándose de cualquier cosa, podría jurar que mi corazón se movía al mil por hora y que mi respiración intentaba recuperar el aliento cada vez que su cuerpo se sentía más pegado al mío.

Mis brazos comenzaron aferrarse a la ancha espalda de Jooheon, mientras mi cuerpo se dejaba llevar por el control y los movimientos que Jooheon decidía hacer para encender cada uno de mis sentidos, mientras yo intentaba contener un millón de suspiros, sus manos comenzaron a bajar de nuevo a mi cintura levantando sin problema mis caderas para quedar abrazada a su cuerpo casi al borde de la cordura con cada sutil movimiento.

-Jooheon- solté desesperada abrazándolo con fuerza con los ojos completamente cerrados, sintiendo los últimos fugaces y rápidos movimientos de su parte, apretando con más fuerza mis manos a él, dejándome guiar por su cuidadoso tacto hasta el final de todo.

Nadie más estaba consciente de lo mucho que importaba ese día, de lo mucho que significaba para los dos, de lo mucho que marcaba el inicio de algo que nunca terminaría, eso solo lo sabría mi dulce cordura, mi dulce delirio Lee Jooheon.

Mis ojos habían terminado por pesar de apoco, provocando que callera profundamente dormida a un costado de él, mientras lograba escuchar de nuevo un "te amo" acompañado por un beso en la frente.

Unas pequeñas caricias comenzaron a sentirse al costado de mi cintura, logrando que abriera mis ojos y observara junto a mi aun sonriente Jooheon, que no dejaba de mirarme ni por un segundo "Estas aquí" pensé regalándole un gran y tímida sonrisa, mientras subía un poco las sabanas para cubrirme y el soltaba un tierna risa dándome un corto beso en los labios.

-Eres perfectamente hermosa – susurro mirándome, mientras yo lo veía como estúpida, incrédula y completamente enamorada, del ser tan maravilloso que era- Y realmente lamento haber sido un idiota- repitió.

- Te das cuenta que esta sería la segunda vez que intentas disculparte de esta manera – reí con dulzura mientras acariciaba su mejilla y señalaba la situación en la que estábamos.

- Entonces, prometo inventar disculpas un millón de veces si vamos a terminar de esta manera- respondió sonriente tomando mi cuerpo para abrazarlo, provocando que soltara un par de risas- Lo que sea, pero esta vez no pienso perderte de vista, nunca más –

- Hecho – le sonreí sacándole la lengua divertida, comenzando así una guerra de cosquillas y risas entre nosotros, me sentía tan completa por primera vez en mi vida tan feliz, que ahora estaba segura de una cosa, me convertiría en un gran problema para Sho, por que no pensaba huir de Jooheon nunca más.

-¿De verdad no puedes mudarte conmigo o no quieres? – hablo mi dulce delirio por el teléfono mientras caminaba hacia la galería acompañada de Joshua, era oficial los días estaban contados y la apertura ya estaba a la vuelta de la esquina.

-No puedo Jooheon – le respondí con dulzura – O por lo menos no ahora, debo plantarle a la Señora Sun que estas apunto de raptarme y que solo la veré por las tardes y ya no al amanecer – reí mientras escuche un bufido de reniego por parte de Jooheon.

- Ese es el punto, yo muero por verte todos los días al despertar – dijo provocando que sonriera de manera sosa y Joshua soltara un bufido irritado – Bien, pero si no te deja ir, dile que me iré a vivir con ustedes, apuesto que con esa idea, hasta ella te ayuda empacar – dijo divertido mientras yo soltaba una gran risa de tan solo pensarlo.

-Recuerdan la custodia compartida, sigo aquí podrás verla todas la veces que quieras ¿Cuál es la necesidad de marcarle cada cinco minutos? – grito desesperado Joshua, mientras yo le lanzaba una mirada asesina y el alzaba sus manos calmándose.

- ¿Le has dicho ya que somos novios? – me cuestión con rapidez Jooheon – No, olvídalo no se lo menciones yo mismo se lo diré – dijo con malicia mientras yo negaba con la cabeza - Debo irme, te amo linda – dijo mi bipolar novio al teléfono.

- Yo también – le respondí con dulzura, soltando un suspiro una vez que colgó el teléfono.

- ¿Dime que fue lo que te agrado de él?, es decir sus ojos son tan pequeños que ni siquiera sabes si te está viendo a ti o no se cualquier otra cosa – bufo con malicia mientras caminábamos.

-Y dime tú ¿Te levantaste de malas o es solo mi imaginación? – lo cuestione alzando mis cejas y frenando mi cuerpo frente a él.

- Tal vez – bufo soltando un suspiro, esquivando mi mirada.

-¿Está todo bien? – lo mire curiosa y preocupada a la vez, era la primera vez que lo veía molesto, siempre que estaba con el su actitud era divertida y de un cierto modo pacífica.

- Es complicado Pía – dijo bajando su mirada, con una media sonrisa mientras yo soltaba un "Oh"- Prefiero no hablarlo ahora, tal vez en otro momento – me miro mientras yo asentía con la cabeza, había entendido una sola cosa de él, aparentemente su vida privada era mucho más complicada de lo que le hacía saber a los demás y no puedes presionarlo, debía ser paciente y esperar.

- Bien, pero sabes que cuentas conmigo para lo que sea – le sonreí colocando mi mano en su obro mientras él me miraba con dulzura- Siempre y cuando no seas un asesino serial, porque la verdad eso de ver muertitos no es lo mío – bromee mientras comenzaba a caminar de nuevo, intentando distraerlo un poco, logrando escuchar una pequeña risa de su parte.

-Dime ¿Cuentas veces debo decirte que no lo soy? – Renegó divertido mientras comenzaba a caminar conmigo – Ni siquiera luzco como uno. No tengo la menor idea de donde sacaste eso – rio despeinándome.

- Ya sabes lo que dicen, hasta el más inocente suele ser culpable – lo moleste haciendo que me mirara sorprendido y comenzara a reír conmigo mientras alegábamos entre risas caminando hacia la galería- Pía- hablo cambiando con rapidez su cara divertida por una seria frenándose en seco.

-Hay bueno está bien, no te delataría – reí mirándolo - ¿Qué?, ¿Por qué pones esa cara estaba jugando?, ¿Qué pasa? – lo observe confundida.

- ¿Por qué no volvemos más tarde?, creo que no me siento bien – dijo nervioso tomando mi brazo intentando que caminara hacia otra dirección.

-¿Qué?, - lo observe sorprendida mientras él me miraba con cara de súplica- Bueno vale, solo déjame cerciorar que todo esté bien en la galería y volvemos más tarde –dije sonriente despeinando su cabello y desasiéndome de su agarre, para girar con rapidez mi vista y observar como un par de personas comenzaban a desmontar cada cuadro y escultura de la galería metiéndolos sin tacto alguno a un camión viejo estacionado frente a esta - ¿Pero qué? – lo mire aterrada y abrumada para comenzar a correr hacia la galería sin pensarlo dos veces.

- No Pía, espera – Grito Joshua preocupado una vez que mis pies corrieron con desesperación. 

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Ya se el drama es mi pasión, y odió dejarlas con el que pasar pero les aseguró que una Pía súper segura de si misma viene en camino ❤️, de verdad espero que se estén cuidando muchísimo ,las quiero 🌻🌻 y de nuevo gracias por estar aquí con esta loca .

2/2 Bonita noche 🌻