Cuando tenía menos edad, siempre me he sentido incómoda, invadida y sola, me asusta últimamente que esas sensaciones abunden en mi vida y que la sensación de calma y felicidad viene de a poquitos.
Cuando me siento ansiosa, destruida, desubicada, es como si en mi mente hubieran muchas voces, la necesidad de hacer algo y saciarla, pero no saber por donde empezar, luego todo se rodea de una aura negra, la gente me estorba o amanecen con la misión de estorbarme... afuera no hay nada y mucho menos adentro, yo me pongo a escuchar música y aquello es un conflicto peor, por que nunca esta la canción apropiada, hablar con alguien... no es una opción lo he intentado, pero no me pueden ayudar, a ellos no les importo y así está bien.
Suelo hablar sola, hablar sola como una estúpida, puedo durar toda una mañana en el baño, puedo durar toda la vida hablando conmigo misma...
Cuando me siento así cualquier cosa me afecta, me afecta en lo más profundo.
Hablar del suicidio no es un tema diferente al de bañarme.
Pensar en que me hago daño y pierdo el conocimiento es como la búsqueda de mi paz mental, la calma.
Nada mejor que correr contra la paredy romperme la cabeza.
Sangrar, ir al médico, sentir dolor y estar en calma.
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FUGACES
Non-Fiction¡El frío que se cuela por las ventanas! posee me querido...porque te amo-amo.