YZI

Influenciado

Me encanta esta era en la que vivo, gracias a la tecnología todo es diverso y transparente. Puedo saber lo que ocurre en China ahora mismo si quisiera y podría aprender el idioma que sea cuando lo quiera. Los videojuegos son mis favoritos y con el internet tengo amistades por todo el mundo. A pesar de no tener muchos amigos en mi vida, cuento con muchos que comparten mis gustos en otros países. Las plataformas de entretenimiento y red social también son muy entretenidas y con todo esto de los memes no hay minuto que no me esté riendo. 

En el colegio mi círculo de amigos no supera los 2, diría 3 pero uno va y viene así que no lo cuento como uno. Todos los días hablamos de los juegos y videos que circulan en internet, no hay día en que decimos “vamos a hacer lo que vimos en este video” y solo queda en palabras por qué no nos atrevemos a realizar cosas en lugares públicos por que somos tímidos. Somos valientes uno frente a otro pero cuando llegan los demás somos tan diminutos como unas hormigas, nos escondemos y nos vamos. Las jugarretas siempre son entre los 3 pero ese 4to amigo del que hablaba nos daba ideas bien curiosas. Un día con él llegamos hasta el camarín de las niñas y casi las logramos ver en ropa interior. Entre emocionado y asustado esas experiencias únicas sólo las teníamos con él y es por eso que a pesar de no ser como nosotros lo dejábamos juntarse con nosotros. 

El siempre ha tenido amistades con niños de cursos mayores y a veces pensábamos que si nos juntamos con él los mayores nos tomarían en cuenta y ganaríamos respeto en el colegio pero nunca ocurrió nada. 

Un día él nos sorprendió, llegó hablando sobre un desafío de comida. No pensamos que el veía las mismas cosas que nosotros y le seguimos el tema del desafío, el dijo que sólo escucho de esto y que le gustaría intentar eso. Yo sin saber aún a qué se refería le pregunté “sobre qué trata el desafío, comer muchas hamburguesa? O algo así? Comer en tiempo récord?” Y me dice “no, aquí tengo el vídeo”, y nos muestra su celular, antes de poner play al vídeo cubre su celular y nos mira diciendo “este es un desafío solo para hombres y si lo ven no le digan a nadie por qué es un desafío secreto”, más intrigado aún aceptamos su condición para ver el vídeo y lo vimos. 

Era un tipo que tomaba un tipo de dulce de color azul y rojo, miraba a la cámara y decía palabras en otro idioma que parecía ser ruso, el tipo hablaba mucho y luego de mirar muchas veces el dulce y con susto decide meterlo en su boca y tras unos segundos lo mastica y seguidamente lo escupe haciendo arcadas mientras que el que grababa se reía mucho. No entendimos mucho el vídeo así que nos empezó a explicar el vídeo, nos dijo “parece un dulce pero es como una pastilla de detergente que lo usan para lavar ropa, es muy malo pero quien pueda comer ese dulce sin vomitar es el ganador del desafío, sólo los grandes pueden soportar un sabor tan malo pero ustedes que les gusta mucho este tipo de cosas podrían hacerlo para que mis amigos grandes les tomen más respeto y nos juntemos todos”. Nos miramos entre los 3 y yo con un poco de duda le dije “pero no será peligroso?” y el dice “no, para nada. El cuerpo es muy sabio y si es algo que no aguantas lo vomita y ya”. Y mi otro amigo dice “y si duramos arto igual nos van a reconocer tus amigos?” Y el dice “por su puesto, solo los valientes toman este desafío”. Estábamos indecisos sobre el desafío pero saber que por fin tendríamos la amistad de los más grandes y con ellos por fin ser alguien más que solo y hormigas sería genial. Entre nosotros mismos terminamos de convencernos y decidimos hacer el desafío. “Genial!” Dijo él “yo sabía que ustedes serían capaces”. El se fue corriendo diciendo que nos conseguiría los dulces y que también llamaría a los demás para que vean el desafío en vivo, solo así podía asegurar que ustedes son unos hombres valientes. 

Nada más el saber que vendrían nos llenó de ánimos y ganas para hacer el desafío más tarde pero nadie debía saber esto. Al rato después conversamos el tema en un lugar apartado para que nadie nos escuchará y comenzamos a ver quién sería el primero, tras varias discusiones logramos hacer el sorteo con unos papeles quedando yo primero. Uno de mis amigos dijo “pero así sólo tú quedarás como valiente y cualquiera de nosotros que falle después quedará como cobarde, por qué no mejor lo hacemos al mismo tiempo los 3?. Esa gran idea me hizo sentir más seguro ya que no estaré solo. 

Las horas pasaron y no aguantaba las ganas de que llegara el fin de las clases hasta que sonó el timbre y nos fuimos del colegio. En la salida nos quedamos esperando al tipo y en un momento chocó un niño grande conmigo haciendo que cayera al piso. “Cuidado!”, Me dijo enojado. Me levanté y dije “tu cuidado, estúpido” pero lo dije tan bajo que ni mis amigos me escucharon. No pasaron más de 10 minutos y llegó el tipo, nos dijo “vengan, conozco un lugar seguro para hacer el reto. Los demás nos están esperando haya”. Y partimos a juntarnos con los grandes. Cuando llegamos lo primero que vimos fue un montón de niños grandes, eran unos 10 más o menos y uno de ellos tenía una pastilla de detergente en sus manos, nos vio llegar y comenzó a aplaudir junto a los demás como dando ánimo. Nos sentimos muy felices e inspirados, el tipo se nos acercó y nos dió la pastilla. Cuando la dejo en mis manos mire a todos y ví al niño grande que me botó en la salida del colegio, mi cara cambio a una de enojado y lo miré fijamente mientras él reía bromeando con los demás. 

Todo estaba listo, ellos sacaron sus celulares para grabar lo que iba a ocurrir y mire por última vez a mis amigos. Ellos se veían nerviosos y me dije a mi mismo “aguantaré más que todos y destacare por sobre ellos” estaba decidido en que saliera perfecto el desafío. Mire al niño grande que me botó y dije nuevamente en voz baja “ahora quien es el tonto”.

Los demás hicieron el conteo de 3 a 1 para comer la pastilla y me comencé a poner nervioso. Al llegar a 1 los 3 nos comimos la pastilla. Uno de mis amigos no aguanto nada y boto todo al piso escupiendo mientras el otro dio dos masticadas y comenzó con arcadas, no aguanto más y lo boto todo. Me dije a mi mismo “debo al menos tragar esto, una vez adentro del estómago no debería ser tanto”. cuando intenté hacerlo fue como si mi garganta se iba a salir por mi boca, vomité todo y caí de rodillas al piso, no paraba de vomitar a tal punto que realmente sentí que mis intestinos iban a salir por mi boca, no podía respirar y caí de cara al piso. 

Estaba todo oscuro y tranquilo, ahora es cuando me preguntó ¿Realmente es tan importante ganar este respetó?, ¿Vale la pena?, ¿Por qué no me quedé en casa jugando o viendo vídeos?. No sé qué pasará ahora… 

Cuando mi amigo me toca el hombro y dice “¿estás bien? Llevas un buen rato en el piso”, abro mis ojos y veo que estoy en la entrada del colegio tirado en el piso. “¿Que paso?” pregunto y me explicó que un niño grande chocó conmigo y caí al piso pero estuve mucho tiempo ahí.

Cuando llega de repente el tipo y nos dicen “ya vamos, los demás nos están esperando”. Sin entender qué pasó vamos los 4 a un parque y 5 niños grandes estaban ahí esperando, los miré a todos y nadie me parecía conocido. El tipo saca las pastillas y dice “ahí tienen”. Al mirar las pastillas recordé lo que pasó en mi mente y con mucho terror lance todas las pastillas lejos, miré a mis amigos y dije “vámonos de aquí, es peligroso” y salí corriendo. los otros dos vieron mi cara de asustado y me siguieron.

Hoy en día todo va de la mano con la “reputación” para los niños y jóvenes eso es algo importante. Es que mientras más reputación o reconocimiento tengan de otras personas son más geniales y tienen más amigos. Es normal que la gente más desordenada y escandalosa es la que tiene más amigos pero esos pequeños grupos que son más reservados no deberían arriesgar su vida ni integridad física por demostrar cosas que a la larga no lo vale. Cuídate y crece con valores.