Capítulo 2

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Abbie y Bethan acaban de llegar. Tengo pensado preparar unas pizzas y sacar el tema. Me van a odiar por no habérselo dicho antes aunque en mi defensa yo lo sé desde hace tres días.

"- Esto... tengo que deciros algo."- la verdad es que nos sabia como decírselo porque sabía que se iban a enfadar de repente Bethan me responde - "¿Que pasa? Nos estás asustando" " No es nada grave no os preocupéis es solo que... a mi padre le han ofrecido un trabajo en Nueva York y me mudo con el ."- En ese momento vi como Beth soltaba el trozo de pizza y se me quedaba mirando bastante sorprendida, al contrario Abbie siguió comiendo como si no hubiera dicho nada. En ese momento Beth responde -"Estás de broma ¿verdad?"- sentía que en cualquier momento se me iban a soltar las lagrimas- "Lo siento muchísimo, siento no habéroslo contado antes. Me voy el viernes que viene." - en ese momento Abbie ya se empezó a meter en la conversación - "¿¡EL VIERNES QUE VIENE?!, como te vas a ir el viernes. ¿Y nuestro viaje al pueblo de mis abuelos?"- se me rompe el alma en pedazos al escuchar esas palabras, es verdad que me iba a ir con ellas. En ese momento se me empieza a desprender la primera lagrima por la mejilla.- "¿Entonces estáis enfadadas?- pregunto yo un poco segura de sus respuestas-"¿Que si estamos enfadadas? Tienes el valor de invitarnos a tu casa a dormir y decirnos que la semana que viene te mudas así sin más y luego nos preguntas si estamos enfadadas, ¿Tú que crees?."- nunca había visto a Abbie tan enfadada. -"¿sabes que? Yo paso de estar enfadada la última semana contigo. Vamos a vivir esta semana como nunca."- al escuchar esas palabras mi corazón fue cobrando vida de nuevo. Abbie asintió ante las palabras de Beth.

En cuanto  terminamos de cenar nos acurrucamos en el sillón y nos pusimos a ver nuestra película favorita, a3msc. Daba igual las veces que viéramos la película que siempre acabábamos llorando. Uno de los mejores recuerdos con ellas es la primera vez que vimos la película. Creo recordar que fue la primera vez que lloramos juntas.

"Spencer, prométenos que en navidades vas a venir a vernos por favor" - asentí muy rápido ante las palabras de Abbie- "Os prometo que voy a venir a pasar las mejores navidades junto a vosotras"- en ese momento nos abrazamos las tres y nos dormimos acurrucaditas.

Nos despertamos sobre las diez y media y nos dio tiempo a arreglarnos un poco e ir a desayunar fuera. No recuerdo la última vez que desayunamos fuera.

Abbie se pidió unas tostadas con mantequilla y mermelada como de costumbre, Beth pidió unas tostadas con aguacate y yo pedí unas tostadas de aceite y tomate. Después nos fuimos de compras y Beth me dijo q me comprara un vestido mono y a la vez sexy. A si que me ayudo a encontrar un vestido apto a sus descripciones y me lo compre. No sabía muy bien para que lo iba a usar pero bueno. Después comimos en nuestro restaurante favorito y por fin volvimos a casa después de todo un día fuera. En casa me probé el vestido y me quedaba realmente bien. Os tengo que ser sincera, nunca antes me había puesto un vestido, ni una falda tampoco. Yo soy más de llevar pantalones vaqueros y jersey de cuadros. Abbie es igual que yo a si que no me siento la rara del grupo. Es más Beth es la única que siempre va a la moda. Por eso muchas chicas la tienen envidia. Hay chicas que me tienen envidia a mi por ser su mejor amiga.

Era sábado y me iba el viernes que viene. No quería desperdiciar ni un solo minuto junto a ellas a si que las dije de ir a cenar. Obviamente me dijeron que si porque estaban igual que yo. A si que cenamos al lado de mi casa y cuando terminamos me despedí de ellas. El domingo lo pasé sola en mi casa. Quería empezar a meter todo en cajas a si que me venía mejor estar sola. Me pase casi todo el día sacando cosas de los cajones y recordando los momentos más felices de mi infancia. Saque una foto que tenía en el suelo del armario. Era una en la que salía con mi madre. Ella murió de cancer cuando yo tenía 7 años. Me costo mucho asimilarlo ya que no tenía unas amigas con las que pasar esos momentos. Solo tenía a mi padre. Se que para el fue mi difícil criarme ya que está muy liado con el trabajo y era mi madre la que siempre me atendía. Igualmente fue de gran ayuda para mi, porque siempre estuvo a mi lado en los peores momentos. Hoy en día ya estoy mucho mejor. Si que es verdad que criarse sin madre es duro pero al final la infancia solo es una de las muchas etapas de la vida.

Se me paso el día volando. A si que me fui a dormir temprano porque mañana era el último día de clase y tenía que estar descansada. Al día siguiente casi no hicimos nada en el insti. Salimos a la hora de comer, y Beth y yo nos fuimos a su casa a comer. Por cierto Beth tiene bastante dinero ya que su padre es el director de una empresa de no sé qué. Comimos en su casa y después me llevo a su cuarto y me enseñó todas las joyas que tenía. Me dijo q tenía una sorpresa para mi y me dio a elegir unos pendientes, un collar y una pulsera. Elegí unos que pegaban con mi vestido azul marino. Lo entendía porque de la nada me regalaba eso pero estaba muy contenta y agradecida. Después tuve que ir a mi casa para terminar de recoger todas mis cosas.

Cada día se acercaba más al último día en Los Angeles. No estaba preparada para irme. Me entró pánico nada más levantarme ya que no quería irme. Me fui a casa de Beth. Esta vez si que vino Abbie. Nos pusimos los bañadores y nos bañamos en su piscina. POR FIN ERA VERANO!!! Jugamos como si fuéramos niñas pequeñas. Nos empezamos a salpicar la una a la otra -"Os voy a echar mucho de menos"- digo mientras nos salíamos de la piscina-"Nosotras a ti también, ya sabes que puedes venir cuando quieras que siempre vas a tener un espacio en nuestra casa"- dijo Beth muy convencida. La verdad es que es verdad, tiene espacio para mi y para ocho elefantes.

Me fui a mi casa después de comer en casa de Beth y me tumbe en mi cama por mucho rato.

Un romance un tanto inisualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora