Dejarse llevar

3.5K 397 34
                                    

"Comprendió que su corazón no era un basurero para cargar con los escombros de un amor fugaz que pudo ser infinito y que prefirió ser efímero. Mato el fantasma que la hacía recordar todo cada noche y con él también murió la esperanza de un tal vez después si funcione, su corazón no quiso renunciar a la idea de ser feliz algún día con alguien que, si esté dispuesto a dar amor, no excusas (amor propio)" – ANDRÉS ALFONSO

JESS

Es increíble que, en tan poco tiempo olvide esta sensación de adrenalina de la competencia, había olvidado que en realidad amaba lo que hacía, que esto que comenzó como un hobbie se volvió mi vida.

Me gusta pensar que vivo siguiendo ese lema del que no arriesga no gana y lamentablemente perdí con Nick otra vez... ahora era tiempo de curar mis heridas y seguir adelante y mientras era apretada por unos brazos que me pasaban a otros y otros, inclusive sentí unos labios besar cerca de mis labios, pero no solo estaba ciega si no que me sentía sorda, el estruendo me ensordecía, ya no sabia quien me tocaba, solo como me felicitaban, ni siquiera tuve oportunidad de secarme, en cuanto salí de la alberca, el primero en abrazarme fue mi entrenador y decirme al oído que había calificado, estaba agradecida con todos lo que me felicitaban pero todos ellos no eran él, era obvio que estaba esperanzada con que él viniera, inclusive mis hermanos habían organizado una comida en la casa e invitaron a todo el mundo y tampoco vino, me moría de ganas de preguntar con Ryan o Nina, pero no lo hice.

Cuando le conté lo que había ocurrido en mi casa y que estaba segura de que alguien había entrado, Zac perdió la cabeza y ese mismo día me llevo a casa de nuevo, sé que días después saco mis cosas. Y aunque era un hecho que nuevamente buscaría mi independencia sé que este no era un buen momento, no al menos hasta que supiéramos bien que ocurrió ya que mágicamente no había funcionado el circuito cerrado del edificio y al parecer no forzaron la entrada por lo que no sonó el sistema de alarma, nadie entendía cómo habían entrado.

Todo el mundo platicaba y reía y de verdad que intente socializar ya que era por mí que todos estaban aquí y lo logre al menos por un rato, me quite los zapatos caminé hacia el columpio, si algo amaba de esta casa era su enorme patio, me gustaba caminar descalza en el pasto y sobre todo ese columpio.

-Los ojos no mienten sabes... - ya lo había escuchado caminar hacia mí, ahora ya lo distinguía entre el resto, había un sonido casi imperceptible en su andar debido a la pierna prostética que usaba, pero para mí oído sensible era inconfundible.

-Pues los míos son ciegos así que no confíes mucho en ellos – escuché su suave, pero roncosa risa, sentí como cambio el movimiento del columpio al sentarse a mi lado.

-No vendrá Nick?

-No lo sé, tú dime, tú eres su amigo

-Te lo dije, era su amigo.

-Nunca me dijiste porque dejaste de serlo.

-Es una larga historia que después te contare.

-El tuvo que ver con tu pierna.

-A veces si, a veces no... pregúntame mañana – Edwin era un hombre raro, y era cierto a veces no me daba buena espina, pero en otras ocasiones como hoy me trasmitía calma y me agradaba su compañía.

-Tu nuevo novio, ex prometido... nos esta mirando fijamente ahora – Sam otro problema añadido a mi vida, se había encargado de decirle a todos que era su ex prometida y que casi nos casábamos en España, juro que todo sacado de contexto, el que el me lo propusiera no quiere decir que iba a ocurrir.

-No es mi novio y no es mi ex prometido.

-Lo sé, pero es gracioso ver tu cara de exasperación, se nota que es un buen tipo, decente.

Enamorado de su mirada (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora