Nota** La canción es narrativa adicional pero ojalá la escuches, explica mejor la atmósfera de la historia.
Me gustaría recordar qué hice esa mañana antes de conocerte ya que todo me resultaba tan cotidiano hasta que te miré.
Afortunadamente, aún recuerdo perfectamente la primera vez que te ví, sigues tan presente en mi memoria como si hubiese sido apenas ayer nuestro encuentro: sentada en medio del salón, sola, inmersa en tu celular; ignorando todo a tu alrededor, incluyendome.
Es difícil expresar lo que provocaste de forma tan repentina en mi alma y mi corazón.
Mientras te miraba la duda invadía mi mente y pese a ya habernos conocido en otro plano, no lograba reconocerte. Tampoco comprendía la razón de tu silencio si figurabas ser la persona más dulce de toda la ciudad.
¿Debería acercarme?
¿Debería actuar como si no fueras la gran cosa?
Sí, definitivamente haré lo segundo porque mis sentidos parecen no responder a mis intenciones y me han dejado a la deriva provocando una indiferencia casi obscena ante tu presencia a escasos metros de mí; lo único que puedo hacer es voltear la mirada hacia mis amigas y unirme a la conversación cuyo tema no sé en absoluto mientras me muero de ganas por saber quién eres.
De cualquie forma, fue cuestión de minutos averiguarlo: acabas de llegar a la ciudad y dejaste toda tu vida detrás por razones ajenas, no obstante, extrañas que todo siga igual y deseas que el tiempo avance velozmente para poder regresar a casa.
¿Soy yo o el mundo se detuvo cuando pronunciaste tu nombre y al voltear miré detalladamente tu rostro inundado en pena?. Tus ojos color miel, tu cabello tan lacio lacio sobre tus finos hombros y tu piel tan blanca siendo adornada por sutiles pecas... eres perfecta.
¿Por qué aquellas situaciones que me marcan de por vida suceden tan repentinamente?
Aparto mi mente después de notar que quizá me quedé admirándote más del tiempo estándar y aunque hace cinco minutos inició la clase no logro concentrarme porque no puedo dejar de pensar la forma correcta de acercarme a ti cuando lo único que haces es rechazar cualquier cosa que provenga de esta ciudad tan aburrida.
No sé, pero al parecer esa forma correcta se traduce en reirme a cada momento y ser amable con los demás para poder llamar tan siquiera un mínimo tu atención y entonces puedas notar que soy diferente a todo lo que ya has visto. Tal vez si hago reír a los demás me dejes escuchar el sonido de tu risa y te acercaras a mi, facilitando todo.
Quizás... pero nada de eso ocurrió.
La clase terminó y te esfumaste así como llegaste.
No me acerqué, no te hablé y no te conocí; pero trato de tranquilizarme, todavía tengo tiempo y mañana lo intentaré nuevamente.
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Eres piscis, mujer.
RomanceFragmentos de cómo la conocí y me enamoré perdidamente de ella. Aún no comprendo como es que estoy a tu merced, quizá es porque eres piscis, mujer.