Parte unica

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Segunda hora escolar y a Cartman ya se le había caído el pompón amarillo de su gorro por quinta vez mientras entregaba a sus compañeros de aula las invitaciones de su cumpleaños número quince. Kenny se agachó a recoger el desgastado pompón del piso para después acercarse a Eric y quitarle el gorro de su cabeza fácilmente aprovechándose del hecho de que el más robusto era mucho más bajo que el.

Viendo las dos piezas con colores semejantes a un cielo soleado ya en sus manos y la voz enojada de cartman en el fondo no pudo evitar perderse en sus pensamientos ¿por que el culón aún tenía ese gorro? ¿Por que no se compra otro? No es como si fuera el el niño más pobre del colegio.

El más bajo arrebató los objetos en sus manos, sacándolo de su mundo para después encontrarse con la exótica mirada de Eric acusándolo, quien sin decir nada se dio media vuelta para ir hacia su mochila del mismo color del pompón y sacar un pequeño tarro de silicona fría y echarle un poco a la punta del gorro donde se suponía iba el pompón amarillo. Esto dejó aún más confuso a Kenny

¿que mierda tenia aquel estúpido gorro de especial?

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Esa mañana en el jardín de niños un pequeño regordete de mejillas rosadas y cabello despeinado iba entregando invitaciones de cumpleaños a los demás niños del aula, mientras les decía que regalo llevar a cada uno.

Pero estos le decían que estarían ocupados o que sus padres no les dejarían ir, en fin sacando excusas para no ir al cumpleaños del niño regordete, porque si bien todos sabían que la mamá del castaño era una de las mejores cocineras en South Park no podrían aguantarse al hijo de esta solo por unos cuantos bocadillos y un pedazo de pastel.

Eeic llegó donde estaban los súper mejores amigos y les entregó las invitaciones a cada uno mientras les platicaba de lo fabulosa que iba a ser su fiesta de cumpleaños y que todo aquel que osara no ir lo iba a lamentar el resto de su vida.

-No puedo-dijo un pequeño pelirrojo.

-¿como que no puedes?-pregunto alterado el castaño, después de todo si el pelirrojo no iba ¿quien le iba a regalar la figura de acción del Power Ranger rojo?-¿por qué?

-no puedo culón, tengo que hacer emmm cosas judías eso-mintió titubeando, no muy seguro si el castaño le iba a creer.

-claro-dijo entrecerrando los ojos-por eso es que dios los odia, malditos judíos, da igual ni me iba a importar si ibas o no-dijo rodando los ojos con fastidio-¿y tú hippie? ¿vas a ir? -pregunto al niño del pompón rojo.

-no creo que pueda tengo que ir a protestar para que salven a los hipopótamos, ya sabes, cosas de hippies-otro vil mentiroso más a la lista.

-si, si como sea, ¡BUTTERS! ¿tú si irás a mi fiesta verdad, mariquita?- dijo acercandoce a los rubios que estaban en la resbaladilla del aula.

-no c-creo que pueda E-Eric, estoy castigado por ponerme la ropa interior al revés-dijo el pequeño rubio apenado, pero bueno, primera persona en decir la verdad y a lo mejor la única.

-jodete Butters-dijo enseñándole el dedo medio al niño castigado- ¿Kenny irás?-dijo volteándose hacia el otro rubio.

Kenny se quedó pensando: aceptar, ir al cumpleaños de Cartman donde hay deliciosa comida y aguantarse al cumpleañero o negar y pasar ese día con Stan y Kyle.

Los colores del cielo [Kenneric]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora