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—Amor —la dulce voz de Baekhyun llamó a Chanyeol, este renegó y se giró en la cama, tapándose aún más con las sábanas, exactamente igual que su hijo. —Despierta, en un rato llega Taehyung.

Eso hizo que Chanyeol se despertara rápidamente.

—¿Qué hora es?

—Son las seis, tienes que vestirte y hacer de cuenta que llegas después que él.

Chanyeol se levantó de la cama desnudo, el ojiverde mordió su labio al ver el cuerpo tonificado de su novio, y sus mejillas se colorearon cuando posó su mirada en el miembro del alto.

—¿Por qué te sonrojas?

Baekhyun avergonzado responde. —Shhh, no quiero escucharte.

—Pero si hasta jugaste con él hace un rato —por el comentario, Baekhyun soltó un bufido y Chanyeol una sonora risa.

—No te burles de mí. —hizo un puchero tan característico, que el ojiazul tiró del brazo del rubio para acercarlo. —Date una ducha así te ves más presentable, parece que un camión te ha pasado por encima.

—Alguien me estuvo montando toda la tarde como si su vida dependiera de ello, y me agoté.

—¡CHANYEOL!

El ojiverde rió y guió a Chanyeol hasta el baño, el rubio abrió la regadera, empujándolo para que entrara sólo.

—Oh no — se quejó, Chanyeol —tú vienes conmigo.

Baekhyun chilló al sentir su cuerpo empapado por el agua. Chanyeol rió y comenzó a besar el rostro del rubio, quien se retorció en los brazos del otro.

—Te voy a matar.

—¿A besos?

Chanyeol unió sus labios en un tierno beso. La bata de dormir y el calzoncillo que llevaba puesto Baekhyun fueron retirados de su cuerpo velozmente. Las manos del alto tocaban la delicada piel porcelana del ojiverde.

Baekhyun tampoco se quedaba atrás y sus finas manos acariciaban el abdomen trabajado de su novio.

Los besos se hicieron húmedos y profundos, mientras sus miembros chocaban.

—C-channie. — Baekhyun gimió. —Hagas lo que hagas apúrate que vendrá Taehyung en un rato.

—Lo haré rápido.

En ningún momento se separon. Baekhyun gimió al sentir como Chanyeol lo apoyó contra la pared fría, abriendo sus piernas para que el pelinegro tuviera acceso a su interior.

Perdieron la noción del tiempo entre jadeos, gemidos y el miembro de Chanyeol entrando y saliendo del interior de Baekhyun.

Por primera vez después de mucho tiempo lo hicieron sin protección. La excitación los hizo olvidar todo.

[...]

Taehyung cantó a todo pulmón su canción favorita en la clase de canto. Fue el último en presentar su examen vocal de mitad de año.

Cuando terminó salió del salón y su amigo, Hoseok, lo estaba esperando junto a su mamá. Ya que vivían cerca, la señora lo llevaba hasta la puerta, y de paso pasaban tiempo juntos.

—Gracias por traerme, señora Jung. —con una inclinación se despidió de la adulta y con un saludo de puños con Hoseok.

Taehyung entró a su casa y vio dos portafolios, uno de su padre y otro no sabía de quién, pero sospechaba.

Dejó el pequeño morral que llevaba a sus clases de canto y la bufanda azul, junto a la campera de Jean. El día estaba fresco, pero no tanto.

Justo su padre y Chanyeol bajaban las escaleras riendo y él les dio una mirada acusadora.

Baekhyun lo saludó con un beso en la mejilla y el profesor de matemáticas lo saludó con la mano.

—Hola profesor. —Taehyung se inclinó y luego los observó. Ambos tenían el cabello mojado, entonces se dio cuenta de que pasaba algo entre ellos. — ¿Qué hacían arriba?

—Se me rompió el caño de agua, Chanyeol llegó de imprevisto y me ayudó, mojándose sin querer, así que le presté otra muda de ropa.

Taehyung asintió no muy convencido.

La excusa era buena, cualquiera podía creerla, pero él no, los labios de ambos estaban rojos e hinchados. Ellos estuvieron besándose.

—¿Comenzamos?—Chanyeol interrumpió rápidamente, sabía que a Baekhyun no le quedaban más excusas, por lo tanto prefirió dejar el tema ahí. Luego hablaría con Baekhyun para que le contarán al niño.

Ellos no sabían cuándo decirle sobre su relación, tenían pensando en navidad, pero no estaban seguros todavía. No querían que fuera un shock.

—Claro, iré por mis libros y la calculadora.

Chanyeol asintió y esperó que Tae subiera las escaleras para hablar con Baekhyun. —Creo que se dio cuenta.

—Lo sé, veré que me dice luego, tendremos que decirle pronto.

Chanyeol rió. —Tienes los labios hinchados, amor.

Baekhyun rió con él y quiere acercarse al alto, pero el sonido de las escaleras lo detuvo.

—Estoy listo, pasemos a la mesa.

Chanyeol siguió a Taehyung, no sin antes lanzarle un beso volador a Baekhyun.

El niño sacó sus libros y Chanyeol comenzó con las clases.

—Los números reales son cualquier número que corresponda a un punto en la recta real y pueden clasificarse en números naturales, enteros, racionales e irracionales.

—Perdón por interrumpir, pero, ¿Quieren algo para merendar?

—Yo sí, muero de hambre. —respondió Taehyung.

—Con cualquier cosa estoy bien.

Baekhyun apareció con unas galletas caseras y dos vasos de leche.

Chanyeol continuó la clase, no sin antes regalarle una sonrisa a su novio.

Las clases siguieron mientras Baekhyun arreglaba su habitación, había restos de semen en sus sábanas y tenía que lavar a profundidad.

PROFESORES ||Chanbaek||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora