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Lunes por la mañana ChangBin se había levantado temprano aún cuando sólo logró dormir unas cuantas horas ya que tenía que terminar los cuadernos del alfa para que los presentara a primera hora. Apenas y se llevó unos bocadillos de su desayuno a la boca antes de salir de casa. Tenía que llegar temprano a clases y estudiar para el primer examen que tendría. No obstante, ver a aquel alfa esperándolo afuera de su casa fue algo que lo tomó por sorpresa, pero sobre todo disgusto.

— ¿Qué haces aquí?

— No respondías a mis mensajes — contestó.

— Ah, estaba ocupado... — Pasando a un lado del alfa se abrió camino hacia el paradero.

— ¿Por qué la prisa? — cuestionó MinHo colocándose a un costado del bajito — ¿Acaso... huyes de mí? — inquirió divertido.

— Tengo que estudiar, por si no lo sabías hoy empezamos con los parciales — sentenció irritado.

— Ah... que aburrido.

ChangBin rodo sus ojos ante el comentario de su contrario y emprendió camino hacia el paradero. Necesitaba darse prisa si es que quería llegar temprano y darle una repasada a sus apuntes antes del examen. De lo contrario no obtendría el resultado esperado y terminaría estropeando su deseo de conseguir una beca para estudiar en las mejores universidades reduciéndose a sólo un sueño frustrado.

Mientras el azabache se concentraba en uno de sus libros MinHo desde el asiento posterior observaba al omega, aprovechando que el asiento de su costado estaba vacío con un movimiento diligente se situó junto a ChangBin, quién como supuso no le tomaría atención.

— ¿Qué escuchas? — inquirió Lee tomando uno de sus auriculares y colocándoselo en su oreja.

Bin clavó su vista sobre el de hebras color cenizo. Estaba molesto, primero, porque no pudo dedicarle el tiempo suficiente a sus estudios por estar transcribiendo los cuadernos del alfa; segundo, no había dormido casi nada y para Seo aquello era esencial. Y tercero, MinHo en verdad se esmeraba por sacarlo de sus casillas invadiendo cada vez más su privacidad.

El alfa mantenía su mirada al frente ignorando la mirada fulminante que probablemente le estaría lanzando el bajito.

— ¿Es Jay? — inquirió MinHo intentado cambiar aquel ambiente incómodo — Es muy bueno. — añadió.

— Lo es.

ChangBin estaba de cierto modo sorprendido, nunca pensó que aquel poste narcisista compartiría algo en común con él. Esbozó una pequeña sonrisa y su mirada volvió a su libro. En todo el trayecto Bin no se molesto en compartir auricular con el alfa, después de todo al parecer ambos tenían gustos similares.


[...]


Luego del primer examen Bin se recostó sobre su pupitre, estaba agotado, al menos se había quitado un peso de encima con los deberes del alfa y ahora podría estudiar y dormir como acostumbraba hacer. Su horario ya estaba planificado, y esa semana sólo serían exámenes y no habría tareas por lo que descansaría de hacer trabajo doble.

— ¿Cómo te fue? — cuestionó SeungMin extendiéndole un Milki de fresa y sentándose a su lado.

— Uhmm no fue tan malo.

— ¿Y eso?

— Es que no pude estudiar lo suficiente. Estaba ocupado...

— ¿Con? — A Kim le intrigaba saber qué era lo que estaba sucediendo entre aquel alfa y su amigo. Después de todo ChangBin nunca tuvo la oportunidad de decirle lo que había pasado para que terminara con esa marca o confirmar si era verdad sobre la relación que mantenía con MinHo — ¿Tiene que ver con... — alargó señalando su cuello.

𝙇𝙖 𝙋𝙧𝙤𝙥𝙪𝙚𝙨𝙩𝙖 ➻ [Lмн ; Scв] TERMINADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora