cнαρтєя eleven

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¡Vamos con el capítulo!

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Narradora

En cuanto ambas chicas cayeron dentro de el salón Agiri hizo un movimiento rápido, jalando a la pelirroja hacía ella y saltando por encima de las otras dos chicas, saliendo rápidamente por la puerta.

-¡No puede ser! ¡Agiri realmente escapó!- Dijo Yasuna mirando por la puerta, dónde no se veían rastros de Agiri ni de la otra chica.

-Bueno, ya no importa, de todos modos, Agiri tendrá que soltar la sopa cuándo la encontremos hoy en la salida

-No lo creo Sonya, seguramente ahora nos va a evadir durante toda la vida, o al menos hasta que alguien invente algún dispositivo para borrarnos la memoria y hacer que olvidemos que la vimos con alguien.-Dijo Yasuna frotándose la frente con cansancio.

Ambas chicas suspiraron y entraron a sus salones, seguían sin poder comprender a dónde había ido Agiri, pero lo que mas les inquietaba era saber con quién se había ido.

-Sonya, deberíamos buscar a Agiri y pedirle disculpas por seguirla.

-¿Disculpas? Se supone que es nuestra "amiga", ¡Pero no se tomó la molestia de decirnos con quién demonios iba a estar! Creo que la que debe de pedirnos disculpas es ella.-Dijo Sonya con enojo mientras se cruzaba de brazos.

-¿Eso crees? Deberíamos haber respetado su privacidad. . .

-Ajá, pero dime, ¿Acaso tu le has ocultado algo a ella? Hemos sido como libros abiertos con Agiri ¡Y ella ni siquiera se digno a buscarme hoy para devolverme el dinero que le preste cuándo aún estábamos en secundaria!- Dijo Sonya.

-¿Le prestaste dinero?

-Sí, pero nunca me lo devolvió. . .

Ambas llegaron a sus hogares mientras Yasuna y Sonya se seguían  preguntando ¿Quien era la persona con la que Agiri estuvo todo el día?

Ambas chicas seguían preguntándose que estaba sucediendo, mientras Agiri llegaba a su casa sonriendo y tarareando canciones de amor mientras daba pequeños saltitos, en cuánto entro a su habitación, se tiró a la cama y suspiro mientras tocaba sus labios con una sonrisa, para después comenzar a saltar en la cama y abrazar a todos los peluches que se encontraban encima de esta, pero segundos después su sonrisa se borró mientras se quedaba pensativa.

- Talvez debería haberle dicho a las chicas la razón por la que no estuve con ellas hoy. . .-  Pensó Agiri mientras miraba al techo y pensaba en sus dos amigas, las cuáles la habían perseguido para averiguar la razón de su ausencia.

-Nah, no creo que estén tan molestas, seguramente solo estarán confundidas, supongo que les explicaré todo. . . algún día. . .- Dijo Agiri para sí misma intentando calmar sus pensamientos, después se metió al baño para darse una ducha, saliendo de este minutos después con una cómoda pijama y una toalla en su cabello, se acostó a dormir, pero no pudo dejar de pensar en sus dos amigas, entonces tomo su celular y marcó un número.

- ¿Hola?-  Respondió una voz al otro lado de la llamada, haciendo que Agiri se sonrojara fuertemente y comenzando a ponerse nerviosa.

-¡Hola! S-solo quería preguntarte si. . . Si podrías venir a mi casa la semana que viene. . .o mañana. . .¡Pero también la semana que viene! D-digo. . .¡Solo ven mañana y la semana que viene!-  Dijo Agiri mientras intentaba no sonar nerviosa, cosa que no logró.

-¿Ah? ¡Claro! Supongo que mañana me dirás la hora y el día¿No?-

-Aah, si. . .- Agiri se golpeó mentalmente por no haberse dado a entender bien y por no haber especificado el día y hora.

-Al día siguiente alguien tocó la puerta de la casa de Agiri, ella solo se levantó rápidamente de su cama y corrió al baño para arreglarse, intentando verse linda, cepillo su cabello con demasiada fuerza que el peine quedó atorado en él, ella solo se rindió y corrió hacía la puerta.
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𝑐𝑎𝑚𝑏𝑖𝑎𝑠𝑡𝑒 -Kill Me BabyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora