One-Shot

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Recuerda la primera vez que lo vio, se dijo a sí mismo que esa belleza era sobrehumana, ningún ser lo igualaba.

Fue demasiado tímido para acercarse en ese momento, creyó que era una atracción física por el mayor.

Pero de repente, se descubría a sí mismo nervioso ante su tacto, avergonzado cuando lo felicitaba por algún logro, inquieto al estar su presencia rodando en su campo de visión. Kun estaba, con el paso de los años, cayendo lentamente en los encantos de Taeyong.

Pero vamos, buen rapero, excelente bailarín, carismático, hermoso físicamente, Tierno, sexy y otros posibles puestos que te decían que Taeyong era sencillamente perfecto en todos los sentidos. ¿Como no enamorarse?

Durante su grabación de Black on Black en 2018, fue suficiente para que supiera que su amor por el líder de 127 era grande y que no podía volver a los tiempos donde el mayor no rondaba siempre por su cabeza.

Se sintió tranquilo cuando fue promovido como miembro de WayV, pues eso significaba que no iba a tener ataques de nervios a cada momento que pasaba.

Creyó que al estar en el nuevo grupo, se iba a olvidar de su amor por él, ya que iba a dedicar todo su tiempo en el cuidado de los chicos y las promociones futuras.

Y sí, pues Kun cambió mucho al entrar a V como líder, y eso lo enorgullecía bastante, era más seguro de sí mismo y hacía las cosas de la mejor manera.

Aunque, con la reciente presentación de Música Bank y la caída de salud del mayor, los chicos de WayV iban a ser trasladados al mismo edificio que 127 al igual que los Dream por tiempo indefinido.

Kun de verdad llegó a pensar, en su tiempo como líder, que ya lo había olvidado, pero los nervios y la inquietud del momento decían lo contrario, aunque él se quería convencer que solo era porque iban a estar todos juntos y el maknae de WayV (Yangyang) no se llevaba bien con los dos de la Dream (Chenle y Jisung).

Sí, solo era por eso.

—¡Llegamos!— Anunció Ten haciendo que Kun respringara en su puesto.

Los chicos salieron y con ayuda de los Guardias, llegaron al piso respectivo que le pertenecía a 127. Las indicaciones que le había dado el manager era que tendrían dos días libres y luego comenzarían con las prácticas. Aunque, primero que todo, se presentarían ante los otros chicos.

Se saludaron entre todos -Excepto los que tenían conflictos entre sí- y se sentaron en los sofá a conversar sobre sus aventuras como IDOLS y demás.

Kun no podía evitar buscar con la mirada a Taeyong aunque sabía que no iba a aparecer pues tenía que guardar reposo. El tailandés, quien era el único que se había enterado, captó las intensiones de su mayor y no le quedó más remedio que actuar él.

—¿Y Taeyong? ¿Cómo está?— Preguntó de la  nada.

—Está en su habitación descansando.— Le respondió Haechan. —La habitación es la que queda...— Se calló, no sabía cómo explicar donde quedaba. —¿Sabes qué? Si quieres los llevo y ya.

—Yo creo que sería mejor que Kun vaya.— Sintió la mirada matadora del líder pero lo pasó por alto, después se lo agradecería. —Entre líderes se deben de entender... Además no sería recomendable haber mucha aglomeración para que Taeyong-Hyung se sienta cómodo pues... Digo yo.

Kun quiso que al tailandés se le olvidara hablar coreano, pero no lo logró porque su pronunciación salió a la perfección. No pudo protestar porque ya Donghyuck se había levantado, haciendo seña que lo siguiera.

La habitación estaba oscura excepto por un lámpara que se hallaba al lado de una cama, donde había un bulto envuelto en sabanas.

—WayV ya llegó.— Anunció el pequeño. —Tienes visitas.— El moreno hizo una pequeña reverencia antes de cerrar la puerta y esfumarse.

Amor. (Kuntae) (One-Shot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora