Villano (Cancelado)

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Durante mi primer año conocí a gente muy amable dentro de la Jail City, gente que por módicas sumas de la moneda de intercambio llamada Traffic te protegerán de todos incluso de ellos mismo y las golpizas que te darán si no estás protegido. Pero uno destacaba por sobre todos ellos, era un tipo aterrador al que todos le tenían miedo y al que llamaban esquirla de acero. Agradablemente el sabia jugar ajedrez y le faltaba contrincante y yo necesitaba protección y no tenía intención de pagar por ello.

No todas las historias de aquellos que van a la cárcel son iguales o similares, de echo algunos van por que se lo merecen y otros porque son el peón desechable de la sociedad que funciona para encubrir el crimen real. La historia del grandote se remonta a cuando él trabajaba como jefe de una constructora, su trabajo era simple y era ser uno de los 3 supervisores de la construcción. Sus turnos estaban establecidos a mano y como el uso de computadoras aún era dudable dado a que era la novedad en el país eran escritos en una simple hoja para ahorrar en costos.

El 3 de noviembre de 1998 durante el turno del jefe a cargo Larens uno de los obreros fue a hablar con él por posibles problemas con una de las vigas de la construcción:

Obrero: Señor, la viga puede caerse en cualquier momento... los remaches que pidió son de una medida menor a la necesaria.

Larens: entonces coloquen mas y dejen de molestar... mañana pedirán otros remaches a Guilbert.

Pero los remaches no lo soportaron. Casi al finalizar el turno de Larens había 4 muertos por aplastamientos de vigas caídas y la construcción se había retrasado 4 meses. Se hicieron investigaciones para hallar al culpable, se habló con el obrero por ser testigo de los hechos y con el Propietario de la constructora para saber mas detalles. En el 3° juzgado de justicia de Valparaíso se llevó a cabo el juicio, Guilbert subió al estrado y se auto declaro inocente. Larens fue llamado como testigo ya que por lo visto según la hoja de horarios el turno que seguía era el suyo.

Las pruebas eran solo una hoja y muchos testigos, la declaración era clara.

Juez: ... Por negligencia en las horas de trabajo y la muerte de 4 trabajadores provocadas por tal negligencia es declarado culpable de todos los cargos.

Juez: Por ello es sentenciado a 30 años de presidio.

Yo personalmente ya cometí cobre por lo que me hicieron y ahora voy a vengar a mi amigo, aunque desde que hice explotar la ciudad tengo una sensación de, como decirlo... necesidad, como que necesito saciar el hambre de ver el terror, escuchar los grito y lloriqueos, tener el olor de los cuerpos quemados por la explosión y aplastados por escombros ardientes o hirviendo.

Al principio pensé que solo era mi imaginación pero no es asi, con el paso de la semana después de destruir todo Los Andes no podía dormir o calmarme pensando en los gritos y el terror que cause, las caras... los rostros los veía derretidos y ardiendo por todos las a todas horas y en todo momento como si aun estuviera pasando pero en mi cabeza. No me sentía mal si no que era como excitación, exaltación por sentir de nuevo todo eso.

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Franco: y como piensas saciarte... ¿Cómo piensas tener de nuevo ese éxtasis con lo que has robado?

Dalker: Mi querido franco... ¿Puedo llamarte asi verdad?

Franco: No, y ahora dime cuál es tu plan.

Dalker: Mi querido... Corneole, ¿sabes que edificios gubernamentales y patrimoniales existen acá?

Franco: Entonces ¿de verdad declaras la guerra a tu propio país?