Bajo la mirada tratando de ocultar el dolor que ha causado su muerte, hace sólo media hora estaba hablando con ella el autobús, trivialidades. De haber imaginado que sería nuestra última conversación hubiese dicho cosas más importantes. Pero nada de eso importa ya, ella está muerta, tan muerta toda la gente que he perdido en mi estúpida vida. Ya no me importa nada, todos estaban alrededor del autobús quemado, no sé como estoy con vida, también debí haber muerto, era lo lógico.
Me alejo discretamente, no quiero estar en ese lugar. Me pregunto si debería ir a mi apartamento, no... Eso solo me haría recordar. Me dirijo lentamente a paso pensante a las vías del tren, camino por ellas con parsimonia, decido a dejar los recuerdos de sus muertes tendidos en ellas para no tener que sufrir otra vez.
Empiezo por los recuerdos de mi padre, el primero en morir. El primer recuerdo de él es en el parque jugando al fútbol, una ida al zoológico, un viaje de campamento, cenas en familia estamos todos ahí, yo debo tener unos ocho años, mi padre está hábilmente conversando pero de pronto cae de bruces en la sopa. Todos corremos de un lado a otro, llamó a una ambulancia mientras mi hermana llorando grita una y otra vez, mi madre intenta hacer que se levanté pero fracasa. Llega la ambulancia y lo suben a ella, nosotros vamos detrás en el auto, llegamos al hospital y no nos dicen nada; suponemos los peor. Entonces un médico nos informa lo que ha sucedido - un derrame cerebral -, está en coma y nunca se recuperará. Le preguntan a mamá que deseamos hacer, aconsejan desconectarlo, dicen que es lo mejor para no hacerlo sufrir pero mamá no está segura de eso. Pasamos esa noche en el hospital y en la mañana mamá nos dice entre lágrimas - Deben despedirse de papá niños, recuerden que el los ama-. Mi hermana y yo nos acercamos a él, mi hermana no par de llorar mientras le abraza y lo besa, yo solo me mantengo aferrado a él, entonces suena el pitido que marca el final, es todo... Al menos mamá no cargará con su muerte en la consciencia.
He recorrido un kilómetro dejando mis pasos oscuros ellos manchados de mi trágico recuerdo.
Continúo caminando, sigue mi hermana... A los once años fue diagnosticada con leucemia, yo tenía trece. Vi como poco a poco se le caía el cabello y su cuerpo se adelgazaba, en su rostro se marcaban las venas cada vez más y mi pobre hermanita cada vez era más débil. El día de su muerte fue oscuro y lento. Ya ella tenía catorce años y en medio de su enfermedad se había vuelto una linda señorita, había conocido un chico y decidieron salir pero su cita fue corta, al momento en que puso un pie en el jardín ella se desplomó por completo, la llevamos a la clínica pero ella ya estaba muerta...
Sigo caminando, quiero recorrer un kilómetro antes de comenzar con la siguiente persona. Veo la señalización de haber pasado un kilómetro y me despido de los recuerdos de mi hermana, ya no volveré a llorar por ella.
He recorrido dos kilómetros dejando atrás mis pasos oscuros manchados de las lágrimas que derramamos por mi hermana.
¿Quién sigue? Nicolás, mi mejor amigo. El recuerdo me golpea, esa noche habíamos ido a una fiesta, habían pasado seis meses de la muerte de mi hermana. Regresábamos tarde, lo habíamos pasado en grande y nos habíamos divertido como nunca, había perdido la virginidad con una desconocida y me sentía bien por primera vez desde hacía seis meses. Estábamos bromeando y acortamos caminó por una mala zona de la ciudad, cuando menos nos lo esperábamos comenzó un tiroteo, nuestro instinto inmediato fue tirarnos al suelo pero eso no evito que me alcanzara una bala al estómago; Nicolás me arrastraba fuera de la zona cuando un tiro fue a dar a su cabeza, cayó instantáneamente, recuerdo intentar sujetarlo pero mi consciencia se desvaneció, desperté dos días más tarde en el hospital donde murió mi padre y me dijeron acababan de enterrar a mi mejor amigo.
He recorrido tres kilómetros dejando atrás mis pasos oscuros manchados por la sangre de mi mejor amigo.
Con la siguiente pérdida me quedé sólo. Mi madre no había podido sobrellevar la muerte de mi hermana, había estado sufriendo durante casi dos años y cada día era peor. Ya no salía del apartamento y se pasaba todo el día viendo la televisión con una botella de licor de mala calidad en la mano. La noche en cuestión se mantuvo sobria, me saludó cuando llegué a casa, me abrazo y por primera vez no olía a alcohol, pensé que estaba en proceso de mejorar. Yo tenía buenas noticias para ella pero decidí decírselas en la mañana. Esa noche se despidió de mi y me dio un beso de buenas noches como cuando era pequeño, noté que una lágrima le surcaba el rostro y le dije que la quería, luego ella se fue. Me dormí, pero un ruido sordo me despertó, un disparó; corrí a su cuarto y ahí estaba ella, tendida en el suelo con una pistola en la mano derecha y la cabeza llena de sangre. Nunca pude decirle que había entrado a la universidad...
He recorrido cuatro kilómetros dejando mis pasos oscuros manchados de las palabras que no pude decirle.
Por último estaba ella, Vanessa, tres horas antes había estado charlando con ella en el autobús, estaba enamorado de ella, era mi novia desde hacía dos años y había llevado a mi vida la felicidad que hacía falta para continuar con mi vida. Su sonrisa me alentaba a respirar un día más, cada vez que la veía me daba cuenta que la vida no se trataba sólo de tragedia y sufrimiento. Pero estaba muerta, tan muerta como todos. Todo pasó muy rápido, subimos al autobús, íbamos camino a la universidad comentando cosas del día anterior, entonces el camión de gasolina se volcó y una chispa encendió todo, el bus estalló en llamas intente sacarla en medio del desastre pero no se cómo ocurrió, sólo se que yo salí y ella no estaba conmigo. Volví mi cabeza y frente a mis estaba su cuerpo dañado por las llamas, muerta...
He recorrido cinco kilómetros dejando mis pasos oscuros manchados por los besos que no le di.
Escucho el sonido de un tren, ya está demasiado cerca, impacta contra mí pero no siento nada, comienzo a ver dentro del tren que pasa a toda velocidad; en ese momento caigo en cuenta: yo estoy muerto también...
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Pasos Oscuros
Mystery / ThrillerCaras largas, ojos tristes y sueños vacíos es todo lo que tengo.