Secretos

secretos capitulo 2

Ya había pasado una semana desde que desperté en este hospital, es agobiante el echo de despertar y darte cuenta de que no tienes ni idea de quien eres, pero a pesar de eso las personas que e conocido en esta semana hacen lo posible para hacerme sentir cómoda, luego de la revisión con el doctor Conrad me asignaron un joven enfermero, era muy simpático y alegre, se llamaba Nathaniel de cariño le decía Nate, el siempre tiene cosas que decir, es divertido charlar con el, a veces traía juegos de mesa a escondidas o me llevaba dulces aunque siempre se los terminaba comiendo el, cada que puede me lleva a pasear por el hospital, en uno de los paseos conocí a una señora muy mayor como de unos 80, las enfermeras la llevaban al jardín y ella pasaba horas allí sentada, se me hacía raro verla ahí sentada, hace poco le pregunte a Nate si sabía algo a cerca de la señora, el me dijo que ya tenia casi dos años de estar en el hospital, era viuda solo tenía una hija y había muerto el año pasado en un accidente de tránsito, la muchacha era casi de mi edad, ella fue la que trajo a su madre al hospital, le habían diagnosticado Alzheimer, también me dijo que luego de enterarse de la muerte de su hija se cerró a hablar con las personas, los doctores intentaron de todo pero ella se negaba a hablar, era muy triste pensar en todo lo que esa señora había pasado, mi caso no se acercaba ni un poco a lo que le pasaba a ella, yo tengo la posibilidad de recuperar mis recuerdos perdidos, pero la posibilidad que tiene ella es nula. No paraba de pensar en esa señora, pensaba tanto en ella que hasta le puse un nombre, la llamaba Frida, la llamaba así porque me recordaba a Frida Kahlo, ella también había tenido que luchar contra el sufrimiento físico y las enfermedades que padecía, además que Frida significa princesa de paz, me hacía gracia recordar todo eso, seguramente lo aprendí en lo escuela o me llamaba la atención, Sea cual sea el motivo, agradezco haberlo aprendido. Había decidido hablar con Frida, pero probablemente Nate no quisiera acercarse a ella y probablemente no me deje ir sola,  así que tenia un problema, tenia que encontrar la manera de convencer a Nate de ir conmigo o escaparme para ir hablar con ella sea como sea tengo que ir a verla.

Estaba ansiosa, no dejaba de pensar en que hacer, no encontraba las horas que llegará Nate con mis respectivas medicinas para tratar de convencerlo, estaba tan perdida en mis pensamientos que ni siquiera me habia dado cuenta de que alguien habia entrado a la habitación.

-Tierra llamando a Amaya

Me sorprendí al escuchar una voz masculina en la habitación, por un momento pensé que era Nate, pero al ver que era el doctor Conrad sin querer solté un pequeño suspiro de alivio.

-¿Estabas esperando a alguien mas?, estás muy nerviosa.

Era desconcertante pensar en el echo de que este hombre pudiera prácticamente saber lo que estaba pensando o tal vez era yo la que era como un libro abierto, era confuso y gracioso al mismo tiempo.

-Estaba esperando a Nate.

-¿te refieres a Nathaniel?, parece que se han vuelto muy cercanos.

-Si, es agradable charlar con Nate, es un buen amigo.

-Entiendo.

-¿Hoy es la revisión doctor Conrad?pensaba que era mañana.

-La verdad si es mañana, solo pase a ver como te encontrabas.

-Bueno ya me encuentro mejor, pero aun no recuerdo nada.

-Entiendo, bueno ya que te encuentras mejor vendre mañana a hacerte una revisión completa... y porfavor llámame Conrad.

Y así se retiro a como había entrado, dejándome con una confusión extrañamente agradable.

Luego de un rato esperando Nate llega con las medicinas. Parecia algo triste de lo común.