《Capítulo 6》

219 37 5
                                    

Con el tiempo, las estaciones cambiaron. Había llegado el otoño, y junto a él, los cambios.

Había ido la tarde de un sábado a casa de Chan, él se encontraba feliz de enseñarme su nuevo balón de fútbol y yo estaba más que contento por ir juntos a jugar al parque.

Con respecto a mi futura suegra...

Llevábamos bastante bien nuestra relación amor-odio.
Ella no había cambiado su manera de pensar con respecto a Chan y Yo. Siempre controlaba lo que hacíamos y no me dejaba visitarlo sin que ella estuviera en casa, pero con tal de estar cerca de mi Alfa, cualquier condición era aceptada.

En esos momentos nos encontrábamos sentados los tres en la alfombra de su sala, Chan
dormitaba abrazado a mi pierna y su madre miraba todo con una indescriptible mueca, sus labios y entrecejo se fruncieron a la vez que cubría al pequeño con una manta, levantando luego la mirada al hablar.

-Es difícil de admitir, pero... desde que Chris te conoció, ha estado sonriendo cada vez más -desvió la mirada hacia abajo, comenzando a jugar con el gato de Chan-También cuando tú
lo conociste por primera vez... gracias por ayudarlo a él y a chuYu*-sonrió mientras hacía al gatito bailar entre sus manos completamente encantada por los ronroneos.

Un murmullo bajito se escuchó desde Chan, había caído completamente dormido y se veía tan adorable con su mejilla regordeta aplastada contra mi pierna...

-Ah... Tan lindo channie- No pude contener un suspiro mientras acariciaba su cabello, pero salí de mi burbuja al notar la fija mirada de la mujer de nuevo.

-Me agrada que sean felices. ¡Pero no es que yo acepte tu relación con él!-dijo alterada.

-L-lo entiendo señora-reí por lo bajo, ya estaba medio acostumbrándome al fuerte carácter de la señora Bang.

******

Estaba feliz.

En cuanto pudiese estar al lado de Chan, sacrificaría lo que fuera por él.

Hasta el punto en el que ya nada me importaba. Cada vez que lo visitaba, debía aumentar la dosis de supresores. Llegaba un punto en el que mi cuerpo no los soportaba y terminaba devolviéndolo todo por la cañería, pero sólo le restaba importancia , cerraba los ojos, suspiraba y los tomaba de nuevo.

La medicina supresora tiene efectos secundarios muy fuertes en quienes abusan de las cantidades. Sin embargo, tomar una pastilla a la vez no tenía un efecto duradero en mí cada vez que veía a Chan.
Y fue junto a él cuando tuve mi primera des-compensación...

-Jeongin Hyung, cuando ingrese a la universidad, deberá dejar el Consejo estudiantil ¿verdad? Me imagino que los demás miembros van a estar muy sol...

Había sido repentino, así como un enorme mareo llegó, se llevó toda mi estabilidad, o la poca que me quedaba. Caí de espaldas en el césped dónde estábamos sentados, solo pude
escuchar en la lejanía la voz de Chan gritándole a su madre por auxilio.

Y cuando desperté, me encontraba mareado, en una habitación azul pálido exageradamente iluminada, conectado a una sonda y con mi querido tío gritón regañándome. Era de esperarse esta reacción, él mismo me lo había advertido.

-Mira Jeongin, te lo dije y te lo repetí ¿No es así?-Él estaba que explotaba del enojo y se notaba a lenguas- Te dije como usar correctamente la medicina, ¡Tomar más de las dosis
recetada está estrictamente prohibido! Además...- suspiró colocando una mano en la cadera
y la otra sosteniendo su tabique en muestra de fastidio-Los estudios muestran que tomaste otra medicina aparte de la que te formulé. No tengo idea de en qué hospital pediste otra
fórmula ni quién te la dio. Pero...

-¿Qué pasó con Chan?- interrumpí. El hombre pasó su mano por su rostro, quizás lo estaba hartando, pero no me interesaba escuchar algo que ya sabía-El niño que estaba conmigo.

-El niño... se lo llevó su madre. Ni le pregunté si quería quedarse contigo. Tenerlo cerca podría tener el efecto contrario en ti-bajé la mira con una mueca de disgusto-No pongas esa cara, sabes que al haber encontrado a tu pareja predestinada apenas te presentaste, tu cuerpo reacciona siempre pidiendo algo que un niño no está preparado para hacer.

Incluso si no quisiera estar al lado de Chan, o aún así sólo quisiera verlo de lejos, no era capaz de lidiar con eso a lo que llamamos Destino.

Si solamente Chan no fuera mi compañero destinado... Si no lo fuera, no nos habríamos conocido, y no me estaría sintiendo así de miserable cada vez que mi cuerpo desea al suyo.

Little Alpha ♡《ChanIn》[ADAPTACIÓN]                                            Donde viven las historias. Descúbrelo ahora