𝓢𝓮𝓾𝓵𝓻𝓮𝓷𝓮 | 🍃 ❝Dónde SeulGi le da clases de geometría a Park Soo-Young, pero le gusta llegar una hora antes de que Soo-Young llegué a casa para poder preguntarle a la pequeña JooHyun.❞
ㅡ ¿Está tu hermana en casa?
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♡𝐾𝑎𝑛𝑔 𝑆𝑒𝑢𝑙𝐺...
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JooHyun negó con la cabeza a la pregunta. "Dentro de una hora sale de la universidad." Informó a la extraña chica del picaporte.
"¿Una hora? Supongo que salí más temprano de lo común..." Decía para si misma mientras revisaba el horario en su teléfono. Un silencio incómodo se abrió paso entre las dos chicas, SeulGi quería sentarse lo más pronto posible, sus pies dolían como el infierno mismo y parecía que la hermanita de Soo-Young no tenía buenos modales.
JooHyun aún miraba confundida a la mayor, preguntándose por qué su hermana no le había mencionado la visita que tendría por la tarde, al menos podría estar bien peinada y disfrutar de su propia paz en su habitación. SeulGi se comenzó a poner un poco nerviosa ante la mirada de la pequeña chica, juraba que en ese mismo instante recibiría un puñetazo.
El teléfono de JooHyun comenzó a sonar, rápidamente contestó, era Soo-Young. "¡Hyun~! Quería avisarte que-" fue interrumpida de inmediato por la misma.
"Tú invitada ya está aquí y procura la próxima vez avisarme, idiota." Regañaba entre dientes.
"¡Espera! ¿Aún no la has invitado a pasar?" Cuestionó algo molesta entre pequeños gritos. "¡JooHyun!" Gritó aún más molesta causando que alejará el teléfono de su oído.
"¡¡Adiós Soo-Young!!" Colgaba con una sonrisa forzada al escuchar próximos los regaños de su hermana.
SeulGi no estaba sorprendida de que Soo-Young olvidará mencionar su visita, pero después de la incómoda llamada entre ellas dos realmente no sabía si reír o quedarse callada.
JooHyun suspiró y guardo su teléfono de nuevo en el bolsillo de su pijama. "Pasa y siéntate en la sala, no tarda en llegar." SeulGi se preguntaba si realmente debía obedecer aquella "orden", pero en poco tiempo ya se había sentado en dónde le habían indicado ¿Qué diablos?
"Gracias." Mustió en cuanto JooHyun abandonó la habitación, no era una casa grande pero si contaba con una decoración bella. La sala en general era de color blanca y tenía cojines color cremita, siguió recorriendo con su mirada el espacio hasta encontrarse con unos libros. "¿Debería?" Se debatía.
Tomó uno entre sus manos después de un largo rato, Preparatoria-ParkJooHyun, se había olvidado que la hermana de Soo-Young aún iba en Preparatoria... Parecía ser más joven. Abrió la página que estaba marcada, ejercicios de álgebra.
"¿No sabrá cómo resolverlos?" Siguió leyendo cuidadosamente, había pequeñas notas en forma de ositos por varias partes del libro, tenía una letra hermosa, pensó SeulGi.
Busco con la mirada por arriba del sillón, JooHyun parecía concentrada en la cocina cortando algunos vegetales. ¡Hey tomé tus cosas sin permiso, déjame ayudarte! No, no, no ¿Cómo debía decirlo?
"¿Pasa algo?" Pregunto JooHyun desde el otro lado de la cocina. SeulGi se levantó del sillón y camino a una silla de la barra.
"He visto que tienes unos libros de álgebra en la mesa de la sala..." Explicaba con el libro en manos. "Soo-Young me pidió que le diera clases de geometría, pero puedo ayudarte con esto." Ofrecía dudosa.
"¡¿En serio?!" JooHyun de inmediato soltó el cuchillo en la tabla y se sentó a un lado de peli negra con los ojos expectantes.
"Claro que puedo, mirá, lo primero que tienes que hacer..." Comenzó a explicar tranquilamente. JooHyun aprendía rápido y lo reconocía, fácilmente pudo resolver los ejércitos después de explicarle con un ejemplo.
JooHyun tenía el hábito de morder el lápiz mientras se intentaba concentrarse, tierna, era la palabra con la que podía describirla mientras terminaba sus deberes. Definitivamente los Park tenían aquella característica, pero JooHyun, JooHyun en definitiva tenía algo diferente. Su cabello castaño sujeto en sus pequeñas coletas se veía tan sedoso a pesar de no estar totalmente peinado, su pijama tenía pequeñas zanahorias en los pantalones y sus manos delgadas, delicadas y pálidas eran hermosas.
"SeulGi." Trató de llamar la atención, había terminado el último ejercicio y parecía que la mayor estaba pérdida en un tipo de viaje astral. "SeulGi." Repitió mientras tocaba su hombro constante.
"Ah JooHyun, ¿Pasa algo?" De nuevo estaba en la realidad, pero seguía observando las mejillas rosadas de JooHyun.
"Ya he terminado todo." Mostró el cuaderno con una sonrisa de oreja a oreja orgullosa, al fin podría contestar correctamente en clase.
Tomando el cuaderno entre sus manos comenzó a revisar minuciosamente, todos los ejercicios estaban correctos. "¿Segura que no sabías cómo hacer esto?"
JooHyun sonrió aún más orgullosa y negó con la cabeza, inmediato su sonrisa fue borrada ante un mensaje de su hermana.
"Voy para allá." Desesperada se levantó de la silla y continuó picando los ingredientes, SeulGi reaccionando un poco tarde pero se levantó y se ofreció a ayudar en la cocina.
Con cuatro manos fue mucho más rápido que la comida estuviera lista, colocaron los cubiertos y guardaron los libros y libretas. La comida olía deliciosa y sus estómagos rugían ante ella, JooHyun corría por toda la sala mientras sus pantuflas sonaban curiosamente. Soo-Young llegó después de unos veinte minutos, se disculpo varias veces con SeulGi por hacerla esperar tanto (Aunque ella haya llegado temprano).
"Siento haberte hecho esperar tanto, pero aún tenía una clase." Seguía disculpándose mientras tomaba sus manos y las agitaba.
JooHyun parecía haber desaparecido junto con sus libros y libretas, desconcertada SeulGi siguió hablando con su amiga.
"¿JooHyun te molesto?" Habló la castaña.
"¿Qué? ¡Es una masita!" Contestó inmediato, Soo-Young la miró desconcertada.
"¿JooHyun?" Pregunto de nuevo.
¿Había dicho que era una masita?
La única reacción que pudo ofrecerle a su amiga fue una sonrisa tonta y un asentimiento de cabeza. Soo-Young no preguntó más sobre su hermana e invitó a la mesa por la comida, terminando de comer comenzaron a resolver los ejercicios.
Pero JooHyun no salía de su mente ¿Qué estaría haciendo? ¿Estaría durmiendo? ¿Haciendo sus deberes? Pensar en JooHyun hacía que su estómago palpitar.
Tal vez su estómago no era lo que palpitaba.
Se despidió de Soo-Young y comenzó a conducir de camino a casa, las mejillas rosadas de JooHyun seguían en su mente mientras se preguntaba que más podría estar así de rosado.
