Capítulo 10

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Joaquín despertó ese dia sábado y se quedó acostado mientras pensaba que tenía ganas de salir con el castaño.

📲Tahi, ¿Por qué no salimos a comer?

📱 Por qué es sábado, y me toca trabajar a la noche 😣

📲 Pero y ¿Si salimos ahora?

📱Joaquín no tengo ganas, ni siquiera tengo ganas de ir a trabajar, mejor ven tú a mi departamento y pasamos el día juntos 😉

📲Mmm… buena idea, igual quería estar contigo 😘 nos vemos en un rato

📱 Trae vino, de la comida me encargo yo 😘

Luego de eso el castaño se levantó de la cama, aún estaba estirado en esta con su gato encima, le dió comida al felino

Listo duque, no me vengas a molestar a la cocina ahora, ya estás comiendo

Meow

No! Duque quiero impresionar a Joaquín y no precisamente por qué encuentre un pelo tuyo en la comida

Meow

-suspira- está bien, solo puedes mirar y nada más -ya era costumbre para el castaño hablar con su gato, era la compañía que tenía desde que llegó al departamento hace 3 años-

El castaño comienza a cortar carne en cuadrados para luego sellarlos con aceite de oliva, luego los coloca en una olla donde ya tenía cebolla en pluma, zanahoria en rodajas, y varios aliños, luego de unos minutos le coloca una chorrito de vino blanco y colocó a llama a baja para que se cocine la carne, paralelo a eso comienza a preparar un arroz graneado bajo la atenta mirada de si gato que se lamía su pata delantera

Meow

No duque, no te daré nada, esa carne es para Joaquín y yo, tú ya tienes tus sobrecitos de comida húmeda así que con eso te conformas

Meow -el gato se va hacia el cuarto del castaño y se acuesta encima de la cama de este-

Claro, ahora Joaquín también tendrá tus pelos en él -dice al ver al gato en su cama- te compré una cama y aún así prefieres dormir en la mía -rie leve- te amo mi gatito bello -le da un beso al gato y luego vuelve a la cocina, se lava las manos y continúa cocinando-

El rato pasó demasiado rápido, la comida ya estaba casi lista cuando sonó el timbre de su departamento, bajó la llama de la olla del arroz y fue a abrir

Hola -le dice Joaquín mientras lo besa- ¿Cómo estás?

Hola, bien -corresponde el beso y le abre paso al menor- adelante

Gracias -sonrie- mmm qué rico huele

Y eso que no me bañé -ríe el castaño mientras camina hacia la cocina- obvio si estoy cocinando yo

-rie negando- tú y tu humor -deja el vino en la encimera de la cocina- te traje algo -le sonrie al castaño que lo queda viendo con ojos brillantes- Ten -extiende una bola de estambre-

-frunce el ceño algo confundido y recibe la pelota – eehh… gracias, justo buscaba esto, era lo que me faltaba para la decoración -dice no muy seguro, ya que no entendía el regalo del mayor-

-rie fuerte- amor! Eso es para el gato -lo abraza mientras ríe- por eso me encantas -lo besa-

No te burles -hace un leve puchero- solo te agradecía por esto que no sabía que era

Ten! -extiende una rosa de color azul-

¿También es para el gato? -dice al tomar la flor entre sus manos –

No, amor, esta es para ti -sonríe- es que me encanta tú ingenuidad -dice Joaquín riendo  para luego besar a su novio-

Puedo no ser tan ingenuo aveces -le sonríe coqueto y se voltea a apagar la cocina no sin antes comprobar que todo esté cocido- almuerzo listo -rie leve y comienza a servir los platos, los lleva a la mesa donde Joaquín ya había servido las copas de vino- espero te guste

Amor, cocinas súper rico, siempre te lo he dicho -comienza a comer y cierra los ojos, la comida estaba realmente exquisita, bebe un poco de vino y ve al mayor que lo ve con un rostro de susto- amor, está exquisito, de verdad

Qué bueno que te halla gustado -le sonríe y comienza a comer él-

Así pasan el almuerzo, hablando de todo un poco, luego de terminar el bailarín le mostró unos pasos de baile que debía de aprenderse antes del viernes de la próxima semana para una evaluación, el castaño por su parte aprovechó de ensayar sus canciones que a la noche tendría que cantar, invitó al moreno y este acepto gustoso a ir, no le gustaba mucho que el castaño trabajará en esos lugares ya que se podrían sobrepasar con el chico, al menos él cuidando lo suyo estaría más tranquilo, pero el castaño no era suyo ¿O si? Aún no le decía nada al mayor, y tampoco sabía si el castaño quería formalizar la relación, se armó de valor y fue donde el castaño ahora lavaba la loza del almuerzo

-rodea al castaño por la cintura y le da un beso en el cuello, provocando un leve jadeo de parte del mayor- amor

Mmm -ladea su cuello al sentir nuevamente los labios del moreno en su cuello, y termina de enjuagar la loza que le queda-

Te quería preguntar algo -perfila su nariz por el cuello del chico provocando que este suspire un poco al sentirlo-

Dime -se seca las manos y acaricia las del moreno que descansaban en su estómago, se voltea y rodea al menor por la cintura- ¿Qué me quieres preguntar? -dice casi en un susurro rozando los labios de ambos-

-el moreno sonríe y sube sus brazos al cuello del chico- que si -besa al mayor al tenerlo tan cerca y luego se separa solo un poco- ¿Quieres ser oficialmente mi novio? Osea ¿Quieres ser mi novio?

-el castaño sonríe ante la pregunta del menor y asiente- si, si quiero Tahi -besa a su ahora novio- También estaba pensando en pedirte que fueras mi novio, pero te me adelantaste señorito Bondoni

Del Odio Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora