Changeling

4

Casa de campo, Francia.

Dos damas llegaban inundando el hogar de suspiros cansados, agradeciendo a Lady Magia por existir, ambas solo se quitaron las capas que hacían de túnicas y se dirigieron al piso superior dónde una pequeña elfa doméstica vigilaba diligentemente a tres bebés.

Tres bebés que ya no parecían ser ellos.

Leyla los miraba sin ver, Lily, Albus y Scorpious ya no existían y tal vez nunca lo harían, tocó suavemente sus frentes, admirando como la magia había trabajado cambiando el intenso rojo a un suave rubio, el implacable negro a un castaño claro y el platinado rubio a un negro azabache, ya nada era igual pero eso no evitaba los recuerdos.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-¡Scorpious ten cuidado!- sabía que era inútil, el ya no lo escucharía, pero tenía que intentar.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-Leyla-
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-¡Lily no...!- sollozaba Potter a su lado, tenían tan poco tiempo.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-Leyla-
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Su hijo caminando como un rey, volviéndose tan parecido a un villano. Había fallado, otra vez.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-¡Leyla!-
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-¡Hugo!- otro sollozo que cruzaba el aire, habían llegado tarde, no podía hacer más que mirar y rogar porque Rose y James estuvieran bien.
¿Un adelanto? No lo estaban.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

-¡Leyla!- gritó una vez más Amelie en su oído.

-¿Qué? ¿Cuando?- sacudió la cabeza -¿Qué pasó?- odiaba perder el control, odiaba recordar su debilidad, se odiaba...

-Es lo que me gustaría saber, yo... Te seguiré mientras pueda y lo sabes, solo... Quisiera saber más- Amelie bailaba entre el deseo y el deber, esperando no ofender, pero necesitando tanto conocer -no te obligare, pero... Sería agradable si contestarás mis preguntas- se movía nerviosamente, intentando oprimir sus emociones -¿Por favor?- Leyla la miró, reconociendose por un instante, recordando...

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-Necesito respuestas Potter, ahora- sabía que confrontarlos no era sabio, pero haría lo necesario para no acabar así.
-¿Qué respuestas esperas que tengamos Draco?- Granger siempre tomaba la iniciativa, pero ahora se veía tan cansada.
-¿Cómo demonios piensas salir de aquí?- cruzo los brazos, intentando recuperar el control -Y aún si sales ¿Dónde piensas que será seguro?- tenía tanto miedo de que lo dejarán atrás, así no podría hacer nada.
-Esa es la pregunta que esperaba, sígueme- Potter finalmente se dignaba a hablar, era la hora de las respuestas.
Caminaron bastante hasta que llegaron a...
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

-Adelante- susurró mientras se alejaba de los niños y se sentaba en el piso, cruzando las piernas y viéndose tan imponente como un rey cautivo -solo pregunta- Amelie tomo una silla cercana, mirándolo a los ojos que ya no eran solamente de plata, vibrando de emoción y miedo, tan cerca y tan lejos -Un segundo-  Leyla se levanto aumentando aun mas la sensación de presa en Amelie, saco su varita y las rodeo con un hechizo olvidado -Et ostensio secretorum, ac protegas me non audiat desiderio- guardo la varita en la manga, tomo asiento frente a Amelie y espero tranquilamente con la sonrisa pintada en un rostro eternamente triste.

-¿Quienes son los niños?- no sabia si era la pregunta adecuada, tal vez debía empezar con el hechizo que la ataba, pero no podría vivir consigo misma si no se aseguraba de que unas almas tan jóvenes estuvieran protegidas.