II

21 3 0
                                    

                                                •1952•
                                      Taehyung 17 años

"De repente me despierto por los gritos Los silbidos
pasos que se arrastran
que van y vienen
después el silencio que me da escalofríos  en todo el corazón"

Tae nuevamente estaba frente a la venta fijándose en "su calle" , dónde veía las grandes sombras de las personas que iban y venían con rapidez; apurandose por  ir a casa antes de que llegara la oscuridad.

El jóven muchacho suspiro, temblando de frío (y miedo) se abrazo a si mismo buscando su propio calor.

Aquella señora que le había criado estaba enferma, sus hermanos aún eran niños pequeños y el cuidaba de ambos preocupándose por lo que pasaría después.
El dinero estaba escaseando, no había ni un poco de comida y podía notar que los pequeños morían de hambre.

Ensimismado recordó las palabras que su padre le había dicho antes de marcharse a beber.

- "Hijo mío ; no te vas a quedar allí para siempre, no vales nada en esta familia y tendrás que ganarte tu propio pan, las personas te encuentran bastante hermoso, solo tendrás que salir por la noche como aquellas mujeres que se ganan la vida paseándose por la acera"

No había de otra, no conseguiría fácilmente trabajo y parecía que esa era la única forma de traer un poco de parné (Dinero).

Tomo una camisa vieja de seda que pertenecía a su madre y se la colocó junto a los pantalones negros, esos que dejaban a la vista sus delgados tobillos.

- Saldré Soobin, cuida a mamá mientras no esté.

Dijo cubriendo su cabeza con la boina e inclinándose un poco para depositar un beso casto sobre la frente del menor con cariño.

- ¿Volverás pronto TaeTae?

Preguntó.

El no quería mentir frente a la mirada afligida que le regalaba el crío, pues desde ahora su vida sería nocturna.

Pero lo hizo, el le mintió.

- Sí...

Susurró peinando los cabellos de su hermanito y salió finalmente de casa en busca de un nuevo cliente.

"En mi calle hay mujeres que se pasean
les escucho tararear en la noche
y me duermo mecido por una balada"

Una balada que apenas y se escucha, mientras su delgado cuerpo es tocado por desconocidos, mientras aquellos ojos marrones pican y amenzan con derramar lágrimas del dolor que su corazón ya no puede reprimir.

---------------

Hi
No tengo nada que decir, hasta el siguiente capítulo 😔✌️

Les quiero mucho.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 10, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝓓𝓪𝓷𝓼 𝓜𝓪 𝓡𝓾𝓮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora