Malena era una chica mexicana que vivía con su madre, pues su padre las había abandonado y no tenía hermanos.
Era una chica muy guapa, pues tenía el cabello marrón, largo. Ojos castaños que convinaban perfectamente con su cabello. Piel blanca, pero no mucho, a decir verdad, algo bronceada. Tenía un cuerpo bonito, pecho no muy grande. Piernas largas. En fin, la mayoría de los chicos la deseaba y las chicas en sí le tenían envidia, pero eso no le quita la actitud. Malena tenía una actitud muy mala, siempre encontraba la manera de ofender a alguien. Era racista, pero no del tipo de rasista que discrimina a la gente negra, era el tipo de racista que discrimina a la gente gorda, el simple echo de ver a alguien no muy gordo, la hacía pensar que era una persona inservible que debería dejar de comer tanto porque el día que ya no hubiera comida, esa persona se la terminaría toda... lo sé, muy exagerada.
Un día, un 24 de agosto me parece. Invitaron a Malena a una fiesta. Ellas y sus amigas quedaron de verse en su casa (la de Malena) para probarse unos vestidos y maquillarse.
Y como quedaron, las tres amigas de Malena fueron a su casa. Los vestidos de todas eran hermosos, pero el de Malena.. oh ese hermoso vestido verde menta, era el más lindo de todos.
Se maquillaron y juntas se fueron a la fiesta.
Llegaron, pero nadie parecía notarlas, todo mundo estaba en lo suyo. En un instante, las amigas de Malena le dijeron que se iban con x persona. Ella asintió y se quedo solo junto a un sofá amarillo. La fiesta era muy aburrida. Malena movía la cabeza al ritmo de la música, también los pies. Ella quería bailar, pero nadie la invitaba.
Un chico se acercó a Malena, venía de un grupo de 5 chicos más. La invitó a bailar y Malena aceptó.
Bebieron, se besaron... Malena no supo cuándo, pero terminó en un cuarto. Los dos se miraban de una forma muy "pervertida". Fue entonces cuando el muchacho le dio un refresco que ya había abierto, Malena lo aceptó y lo bebío.
El refresco sabía algo raro, pero Malena lo terminó. Después del último trago todo se volvió borroso y se recostó en la cama, algo adormilada. Fue entonces cuando, no en sus cinco sentidos, escuchó cómo abrían la puerta y eran muchas voces. Volteó la cabeza, a duras piensas alcanzó a ver al chico con el que había bailado, que por cierto, aún no sabía su nombre, y a los otros 5 chicos con él. Malena quedó totalmente inconsciente y ya no supó nadamás...
Cuando despertó, tenía el cabello revuelto, el vestido rasgado y le dolía mucho la cabeza. No sabía que había pasado, pero seguramente no había sido nada bueno.
Giró la cabeza en todas direcciones, pero cuando lo notó, no había nadie, solo estaba ella. Salió de la habitación, creía que había olvidado algo, pero decidió no comprobarlo. Cerró la puerta, que hizo mucho ruido. Bajó las escaleras, no había nada, ni nadie. Sorprendente, porque no habían pasado ni dos horas desde que ella estaba ahí. Salió a la calle, estaba confundida, no había nadie, las luces de las casas estaban apagadas, estaba todo en silencio.
Caminó, hasta llegar a su casa. Al igual que en todas las demás casas, la suya estaba completamente oscura y no se oía nada.
Entró. Nadie la recibió, cosa que le pareció extraña pues siempre que entraba, su perro o su madre la recibían. Caminó hasta la habitación de su madre. Ella estaba dormida profundamente junto con patata, su perro. Su madre había insistido en llamarle así pues sus colores eran similares a los de una papa.
La besó en la mejilla y se fue a su habitación. Se cambió y llamó a cada una de sus amigas, ninguna le respondió. Malena sabía muy en lo profundo de su ser que algo se le había olvidado, pero no lograba recordar qué.
Dos horas después de que se había ido a dormir, se despertó, asustada, sin saber el motivo. Salió de su habitación y fue a buscar a su madre, ella no estaba, ni tampoco patata, no sabía qué pasaba. Entonces escuchó unas voces que venían de la cocina, fue ahí, pero solo eran voces, pues no había nadie.
Se miró en un espejo, fue entonces cuando notó cómo tenía un corte gigantesco en la garganta. No estaba sangrando, pero la impresión fue mucha. Enseguida fue al baño a limpiarse. El baño estaba completamente iluminado, la ventana mostraba una luz blanca que venía de la nada. Después de limpiarse, Malena salió a la calle. Sin saber qué hacer, comenzó a caminar, simplemente siguiendo su instinto, asustada.
Yo te puedo asegurar algo, Malena había sido drogada, violada por 6 chicos y le habían cortado la garganta.
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Relatos de adolescentes
JugendliteraturRelatos cortos de adolescentes (prácticamente solo mujeres) que mueren por cualquier cosa e intentan descubrir qué les sucedió, así como intentan llegar a un sitio. Algunos conocen este sitio como cielo, paraíso, etc. Pero también hay algunos que s...