Lágrimas de cristal

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🌸 . . . ⇢ ˗ˏˋ lágrimas  de cristal.࿐ྂ

Amaneció sonriente, miró hacia la ventana viendo que a fuera estaba nevado, tenía sentido pues estaba empezando las épocas de invierno, al bajar pudo ver que ya estaban despiertos un olor a quemado llegó hasta sus fosas nasales, haciéndolo sentir curiosidad sobre qué pasaba escaleras abajo.

Entró a la cocina frotando sus ojos aún adormilado, vio cómo HyunWoo se encontraba haciendo hotcakes en la sartén, fracasando en el intento.

—Hermano, ríndete, con que me hagas unas tostadas con mermelada me vale.— compadeció riendo sutilmente. —

Cuando notaron su presencia se giraron y lo saludaron.

—Dejadme a mí, lo haré bien.— ofreció el omega empujando con suavidad al alfa que se apartó algo sorprendido. —

—Uh, está bien...— accedió sentándose de vuelta. —

Para HyunWoo, era difícil resistirse ante un KiHyun vestido con una camiseta suya, la cual le quedaba demasiado grande.

Su vista se centró en Yoo, quién cocinaba mientras tarareaba despreocupado.

—HyunWoo...— le reclamó el menor dando una sutil patada al contrario bajo la mesa. —

—Auch, ¿Y ahora qué pasa?— cuestionó adolorido. —

La mirada asesina de HyungWon le hizo caer en cuenta, así que solo se encogió de hombros dejando de mirar al rubio.

Tras el paso del tiempo, KiHyun se giró y les tendió los platos a ellos, se sentó al lado de HyungWon.

—¿No vas a desayunar?— inquirió HyungWon curioso. —

—Oh, no tengo mucha hambre. Además, no quiero depender tanto de ustedes, sé que soy una carga.— contestó con simpleza mientras se encogia de hombros. —

HyunWoo frunció su ceño y dejó de comer, suspiró algo inconforme con la actitud del menor.

—¿Puedes dejar de comportarte así?— la intención del mayor era hacer entrar en razón al rubio, pero este no parecía convencido. —No eres una molestia, sólo disfruta de tu estancia en la manada Son.—

KiHyun en vez bajar la mirada y asentir como siempre se vio obligado a hacer, tensó su mandíbula queriendo pronunciarse al respecto, tardó en decidirse sobre qué responder pero una vez lo tuvo claro aclaró su garganta.

—Entiendanme, no quiero depender de gente tan amable, quiero ser útil, hacer algo por ustedes.— encaró KiHyun mirando fijamente a los hermanos. —Toda mi vida me he sentido inútil, y ahora me siento en deuda, joder, me habéis salvado la vida.—

HyungWon sólo pudo abrazar al contrario.

—KiHyun-hyung, sabes que no es necesario.— justificó el alto cortando el abrazo para mirar al nombrado ladeando la cabeza y sonriendo de lado. —

—Sólo queremos que te recuperes, nada más, no necesitamos nada a cambio.— insistió HyunWoo más tranquilizado. —

El rubio resopló e hizo un puchero, miró hacia el techo y luego se sumieron todos en un silencio el cual el omega no tardaría en romper:

—Sé que lo hacéis con buena intención, pero... Quiero ser de ayuda, al menos el tiempo que esté aquí. Lo único que habéis hecho hasta ahora es tratarme demasiado bien. Tanto, que me siento culpable.— expresó Yoo. —Sólo déjenme ayudarlos en lo que pueda.—