¿QUIÉN ES LILIT SANLES?

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¿Dónde? volteo a todos lados, ¿Dónde estoy? No veo nada y hace mucho frio, no puedo... no puedo respirar – ¡AYUDA! -al intentar gritar veo burbujas subir hacia lo que parece la luz, intento mover mis pies y manos para nadar hacia la superficie, pero todos mis esfuerzos son en vano no logro subir nada no logro respirar no logro gritar tengo miedo creo que estoy llorando no lo sé, estoy toda mojada me empieza a doler todo mi cuerpo me detengo de intentar salir y siento que me hundo la luz que va desapareciendo... así es ¿cómo voy a morir?

- ¡Nerea! - lo último que escucho es la voz de mi madre ¿habré sido una buena hija? - ¡Nerea!, mira la hora - ¿mamá? no la veo.

- ¡NEREA YA LEVÁNTATE! - ¿Qué? estoy seca, en mi cama y viva, me toco la cara, aún me siento con mareos, pero puedo ver a mi madre en la puerta de mi cuarto.

- ¡Nerea! ¿qué esperas? ¿estas llorando? - me ve con atención, yo me limpio mis lágrimas rápidamente.

- Bueno debes prepararte, tu papá no tardará en llegar y tu ni siquiera te has cambiado- Ay, me acabo de despertar y ya me están gritando y sermoneando ¿qué uno no se puede levantar con tranquilidad?

Siento un golpe en mi espalda - ¡Y OTRA VEZ NO ME ESTAS PONIENDO ATENCIÓN! - Volteo a ver a mi madre y creo que ya fue mi vida, Hola Dios soy yo de nuevo...

- ¡Auch!, ¡¿por qué todos me pegan?! – mi madre recoge su chancla y yo me paro lo más rápido que pude a cambiarme.

-Ahora prepárate que viene tu padre- Con razón mamá esta así, mi papá casi nunca está en casa, trabaja en unos laboratorios y tienen sus dormitorios, antes venia cada fin de mes, pero desde hace un tiempo sus visitas dejaron de ser regulares.

- ¡Nerea! ¿ya te cambiaste?, Ven y ayúdame con la mesa-

- ¡Ya voy mamá! -

Mientras pongo la mesa suena la puerta, mi madre se apresura a quitarse el mandil para verse levemente al espejo, se arregla el cabello y corre abrir, mi relación con mi padre no es muy buena, él besa a mi madre en la puerta y se mete.

-Hola- dice mientras camina cansado a dejar su saco en el sillón.

-Hola- le recorro la silla para que se siente.

- Gracias – se sienta, y yo me paso a mi lugar, saco mi celular para ver la hora y wow son 10:20 pues ¿a qué hora me desperté?

-Nerea contesta la pregunta de tu padre – me le quedo viendo a mi mamá con el bocado en la boca y mastico lentamente.

- Pregunte ¿cómo te iba en la escuela? – sigue comiendo, yo escondo mi celular debajo de mi muslo izquierdo

- Pues bien, no soy excelente pero tampoco me va mal – sonrió satisfecha de mi respuesta

Me voltea a ver – Si no destacas en algo mejor no hagas nada – su tono de decepción no da mucho que pensar

- Cariño – lo sabía me ofendió, es todo lo que sabe hacer.

- Nunca te quedes en medio o serás ordinaria, eres la mejor o eres la peor, tienes que destacar en algo – no sé por qué sus palabras me duelen si ni siquiera está conmigo la mayoría del tiempo ¿por qué debo darle importancia? No debo, no debo... veo caer una lágrima, demonios.

- Nere ¿ya vas a llorar? – mi mamá me voltea a ver.

Me limpio las lágrimas – no, cenemos – mi padre me ignora o eso creo.

- Debes dejar de ser tan llorona, no llegaras lejos sin carácter – no sé por qué me enoja tanto la voz de mi papá.

- Nerea deja de enojarte- me dice mamá.

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⏰ Última actualización: Jul 20, 2020 ⏰

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